Thomas vivirá, durante toda una noche, la experiencia más fascinante de su vida: el privilegio de escuchar las más secretas historias de tres astronautas que, una vez al año, se reúnen para recordar sus experiencias.
Cuando aquella mañana de abril se abrió en la tierra un agujero del tamaño de una cabeza de alfiler y surgió de entre las migas marrones una cabeza de gusano normal, nadie podía imaginar que así empezaba una gran aventura. Ni siquiera podía imaginárselo el pequeño gusano al que los humanos bautizaron como Bómbix Mori I de Cratonia y del que hablaremos a continuación?
Al meu cosí Down, li agraden les margarides blaves i per a dormir compta flors. Jo crec que és xinès, tot i que la mare diu que no, i s?enfada si li dic Down. No entén que ell s?estima més aquest nom que no pas el de Guille. Els grans són estranys, tan estranys, que a l?oncle Serafí li ha caigut un cargol del cap.
Tras una huida precipitada de España y un viaje a América no menos azaroso, en el que Jaime Mercader conoce a un misterioso asesino árabe, por fin la vida del joven parece estabilizarse. Corría el mes de junio de 1903 en la hermosa Cartagena de Indias y Jaime Mercader se había convertido en el tahúr más famoso de la ciudad caribeña. Sin embargo, de nuevo la aventura pasa por su lado tentándolo. Claro que es fácil entender que cayera en ella, sobre todo teniendo en cuenta que venía de la mano de una seductora mujer de pelo moreno y ojos oscuros llamada Antonia. Y más aún si el premio era el fabuloso tesoro de Íñigo de Saavedra: la cruz de El Dorado. Así, siguiendo las pistas de una leyenda, Jaime Mercader, Antonia y el árabe Rasul, perseguidos por unos peligrosos piratas, se lanzan a una alocada carrera cruzando selvas y desiertos.
Rosanda se había fijado muy bien en el calendario que mamá tenía colgado con imanes en la nevera. Quedaban pocos cuadraditos para que llegaran los Reyes, que vivían muy muy lejos, recibían cartas de cientos, miles, millones de niños, pero su carta era requetenecesaria y tenían que leerla cuanto antes.
Se hacía llamar John Buck, porque ése era un magnífico nombre para un pirata, y no Arcadio García, como en realidad se llamaba, porque ése podía ser un buen nombre para un torero, para un fontanero o incluso para un bibliotecario. Pero, desde luego, Arcadio García no era nombre de pirata.
El 9 de abril de 1940, el ejército alemán invadió Dinamarca y Noruega. Dinamarca se rindió el mismo día; Noruega resistió un mes. Desde ese momento, estos países se convirtieron en territorios ocupados, controlados y explotados por los alemanes, con la única posibilidad de defenderse desde los movimientos de la resistencia, que eran secretos y peligrosísimos. Sin embargo, el joven Jesper no duda en unirse a la resistencia y desafiar a los nazis, primero colaborando con un periódico clandestino, para poco después irse implicando más y más, hasta participar en las operaciones más arriesgadas.
Este libro es una novela y los personajes que aparecen son ficticios. Pero podría ser una crónica real, porque muchas jóvenes están viviendo hoy en día los problemas de Miriam. Es una historia escalofriante, en muchos aspectos y, sin embargo, tan normal, tan frecuente, que podría sucederle a cualquiera de tus compañeras?
Cuando Stacey y su padre compran un ataúd para su tienda de antigüedades en Australia, no se imaginaran lo que contiene... ¡Un auténtico vampiro! Sin saberlo, lo embarcan rumbo a Australia. Pero, con la ayuda de Stacey y de unas sabrosas ideas, el vampiro descubre que la vida puede ser divertida.
La pequeña Yung, una niña china de once años, nos cuenta un fragmento de su historia. ¿Qué nombre se le puede poner a un hermano mayor que renuncia a la cama tibia de casa, que prefiere vivir en la montaña, con los jabalíes y los espantajos, en una leprosería abandonada, y que acaba saliendo por la tele, colgado de la punta de un pararrayos como si fuese una cigüeña que hace su nido? Pues éste: Korazón de Pararrayos. Cuando yo tenía once años, mi hermano mayor era okupa.
La gran ilusión de Javier era tener un perro fuera como fuera. Pero la respuesta, tanto de su madre como de su madre, era siempre un "no" de ésos de verdad, sin vuelta de hoja y tan insalvable como un muro de piedra bien alto.
Thomas vivirá, durante toda una noche, la experiencia más fascinante de su vida: el privilegio de escuchar las más secretas historias de tres astronautas que, una vez al año, se reúnen para recordar sus experiencias.
Cuando aquella mañana de abril se abrió en la tierra un agujero del tamaño de una cabeza de alfiler y surgió de entre las migas marrones una cabeza de gusano normal, nadie podía imaginar que así empezaba una gran aventura. Ni siquiera podía imaginárselo el pequeño gusano al que los humanos bautizaron como Bómbix Mori I de Cratonia y del que hablaremos a continuación?
Al meu cosí Down, li agraden les margarides blaves i per a dormir compta flors. Jo crec que és xinès, tot i que la mare diu que no, i s?enfada si li dic Down. No entén que ell s?estima més aquest nom que no pas el de Guille. Els grans són estranys, tan estranys, que a l?oncle Serafí li ha caigut un cargol del cap.
Tras una huida precipitada de España y un viaje a América no menos azaroso, en el que Jaime Mercader conoce a un misterioso asesino árabe, por fin la vida del joven parece estabilizarse. Corría el mes de junio de 1903 en la hermosa Cartagena de Indias y Jaime Mercader se había convertido en el tahúr más famoso de la ciudad caribeña. Sin embargo, de nuevo la aventura pasa por su lado tentándolo. Claro que es fácil entender que cayera en ella, sobre todo teniendo en cuenta que venía de la mano de una seductora mujer de pelo moreno y ojos oscuros llamada Antonia. Y más aún si el premio era el fabuloso tesoro de Íñigo de Saavedra: la cruz de El Dorado. Así, siguiendo las pistas de una leyenda, Jaime Mercader, Antonia y el árabe Rasul, perseguidos por unos peligrosos piratas, se lanzan a una alocada carrera cruzando selvas y desiertos.
Rosanda se había fijado muy bien en el calendario que mamá tenía colgado con imanes en la nevera. Quedaban pocos cuadraditos para que llegaran los Reyes, que vivían muy muy lejos, recibían cartas de cientos, miles, millones de niños, pero su carta era requetenecesaria y tenían que leerla cuanto antes.
Se hacía llamar John Buck, porque ése era un magnífico nombre para un pirata, y no Arcadio García, como en realidad se llamaba, porque ése podía ser un buen nombre para un torero, para un fontanero o incluso para un bibliotecario. Pero, desde luego, Arcadio García no era nombre de pirata.
El 9 de abril de 1940, el ejército alemán invadió Dinamarca y Noruega. Dinamarca se rindió el mismo día; Noruega resistió un mes. Desde ese momento, estos países se convirtieron en territorios ocupados, controlados y explotados por los alemanes, con la única posibilidad de defenderse desde los movimientos de la resistencia, que eran secretos y peligrosísimos. Sin embargo, el joven Jesper no duda en unirse a la resistencia y desafiar a los nazis, primero colaborando con un periódico clandestino, para poco después irse implicando más y más, hasta participar en las operaciones más arriesgadas.
Este libro es una novela y los personajes que aparecen son ficticios. Pero podría ser una crónica real, porque muchas jóvenes están viviendo hoy en día los problemas de Miriam. Es una historia escalofriante, en muchos aspectos y, sin embargo, tan normal, tan frecuente, que podría sucederle a cualquiera de tus compañeras?
Cuando Stacey y su padre compran un ataúd para su tienda de antigüedades en Australia, no se imaginaran lo que contiene... ¡Un auténtico vampiro! Sin saberlo, lo embarcan rumbo a Australia. Pero, con la ayuda de Stacey y de unas sabrosas ideas, el vampiro descubre que la vida puede ser divertida.
La pequeña Yung, una niña china de once años, nos cuenta un fragmento de su historia. ¿Qué nombre se le puede poner a un hermano mayor que renuncia a la cama tibia de casa, que prefiere vivir en la montaña, con los jabalíes y los espantajos, en una leprosería abandonada, y que acaba saliendo por la tele, colgado de la punta de un pararrayos como si fuese una cigüeña que hace su nido? Pues éste: Korazón de Pararrayos. Cuando yo tenía once años, mi hermano mayor era okupa.
La gran ilusión de Javier era tener un perro fuera como fuera. Pero la respuesta, tanto de su madre como de su madre, era siempre un "no" de ésos de verdad, sin vuelta de hoja y tan insalvable como un muro de piedra bien alto.
Edición, introducción y notas: José Francisco Ruiz Casanova, profesor de Literatura Española de la Universidad Pompeu Fabra.