Con el fin de ayudarnos a que la palabra evangélica toque de lleno nuestra vida humana y cristiana, y nos acompañe a lo largo de toda la semana, este libro ofrece, para cada domingo o fiesta, el texto evangélico correspondiente, y luego, una reflexión breve, incisiva, que no se queda en un comentario individualista o moral, sino que sitúa la palabra de Jesús como Buena Noticia para toda la realidad humana: la más personal y espiritual, y al mismo tiempo la más social y colectiva. Para así ayudarnos a vivir, en nuestra vida cotidiana, el caudal de novedad y de fuerza transformadora del mensaje que Jesús nos dejó con sus palabras y con sus hechos. Ignacio Otaño Echaniz (San Sebastian, 1938) es sacerdote marianista, licenciado en pedagogia y en teologia, y ha ejercido su actividad tanto en el campo educativo como parroquial. Ha sido responsable del Seminario Internacional Marianista de Roma y actualmente forma parte de la comunidad marianista de Vitoria.
El amor entrañable del Padre Este libro aparece siguiendo el criterio de las publicaciones para la preparación del Jubileo del año 2000. Ofrece pautas sencillas para facilitar la lectura creyente del evangelio de Juan. Material para el participante: lectura continuada, guía de lectura, para profundizar, para preparar el próximo encuentro.
El título de este libro está inspirado en el texto de Mateo 13,51-52: ?¿Entendéis todo esto? Le dijeron: Sí. Y él Les dijo: por eso todo escriba que se ha hecho discípulo del reino de los cielos es semejante al padre de familia, que saca de su tesoro lo nuevo y lo viejo?. Para los creyentes la Palabra de Dios es un tesoro inagotable del que sabiamente se ha de ir sacando lo que cada momento se necesita. A través de 15 encuentros, el equipo de Animación Bíblica de la Pastoral de La Casa de la Biblia, nos ayuda a descubrir, con sencillez y maestría, la riqueza inmensa que guarda el relato del evangelio de Mateo.
Guía para conocer el evangelio de Marcos con 15 fichas de lectura; una de las mejores formas de descubrir a Jesús. Puede ser un complemento a la lectura del domingo.
El Decálogo es una oferta salvadora de Dios a su Pueblo. ¿Qué son los Diez Mandamientos? Son ayudas ofrecidas por Dios para que cada persona realice su existencia caminando en su presencia. Los mandamientos no pretenden mortificarnos, sino vivificarnos. No buscan comprimir la vida, sino expandirla. No son fronteras en las que recluirse, sino horizontes a los que abrirse, rutas por las que caminar. Solo desde una recepción gozosa, agradecida y cordial de los mandamientos es posible vivirlos; sin la alegría de creer es imposible la alegría de vivir. Aquí se deja a un lado la presentación exegética pura y se opta por una vía orientadora del camino cristiano, revalidada y profundizada por Jesús en su Evangelio (cf. Mt 5,17-19). En cada uno de los mandamientos se abren perspectivas nuevas para hacer una lectura actualizada de los mismos, integrando en ella las exigencias y retos de nuestros días.
María es la protagonista de este hermoso relato. Después de la muerte de Jesús está viviendo con Juan, con él tiene varias conversaciones en las que van recordando los acontecimientos que vivió Jesús a lo largo de toda su vida.
El título es significativo. Nos envía a dos dimensiones del catequista: vivir lo que anuncia y buen hacer para anunciar. La fuente de inspiración para la reflexión se pone en «el hacer de Dios» en la historia de la salvación. Un estilo particular por el que Dios se abaja y trata con los hombres y que denominamos «pedagogía divina». Esta pedagogía de Dios, la Iglesia la pone por obra en su actividad evangelizadora. Es lo que expresamos al usar la expresión «pedagogía de la fe». En la Sagrada Escritura se nos narra cómo Dios actuó con Israel, cómo Jesús educó a sus discípulos y cómo el Espíritu condujo a los primeros cristianos hacia el conocimiento de Cristo. A la luz de ese testimonio, la Iglesia, a través del tiempo, va extrayendo las líneas de acción necesarias para ejercer la cercanía y el cuidado que su Señor tiene de los hombres.
Este libro recoge las conferencias que el P. Dominique Barthélemy dio en los últimos años de su vida a las Hermanitas de Jesús. Una selección realizada dentro de una temática muy amplia y motivada por el deseo de sacar a la luz el tema de la pobreza; tema por el que el P. Barthélemy mantuvo un interés constante. Leyendo estas páginas nos quedamos admirados ante los conocimientos exegéticos del autor, la finura de sus interpretaciones y sus formulaciones incisivas y densas. Partiendo de la predicación del Reino de Dios hecha por Jesús, observa cómo, desde el principio, esta se vincula estrechamente a la pobreza: «Bienaventurados vosotros, los pobres», «el Reino de Dios es anunciado a los pobres». Después prosigue examinando las diferentes vías del cristiano en cuanto a la pobreza y la riqueza, para hacer comprender poco a poco los contextos en los que la gravedad y la fuerza de esta actitud fundamental aparecen con todo su relieve. Algunos textos del Nuevo Testamento son especialmente tenidos en cuenta: el pasaje de Lázaro y el rico epulón (Lc 16,19-31), el Padrenuestro (Mt 6,9-13), la parábola del Juicio final (Mt 25,31-46), los capítulos 5 y 11 del evangelio de Juan, el tema de la Jerusalén celestial que desciende a la tierra (Ap 21), etc.
Lucas, como los otros evangelistas, nos ofrece un testimonio de fe en Jesús, a la vez que trata de aportar un sólido fundamento a la enseñanza ya recibida y aceptada. Adentrarnos en la lectura y meditación del evangelio de Lucas nos permitirá encontrar magníficas e insustituibles orientaciones para recorrer animosos y comprometidos el ?camino del Señor?, es decir, para vivir en plenitud nuestra condición cristiana.
Lucas, como los otros evangelistas, nos ofrece un testimonio de fe en Jesús, a la vez que trata de aportar un sólido fundamento a la enseñanza ya recibida y aceptada. Adentrarnos en la lectura y meditación del evangelio de Lucas nos permitirá encontrar magníficas e insustituibles orientaciones para recorrer animosos y comprometidos el ?camino del Señor?, es decir, para vivir en plenitud nuestra condición cristiana.