Grabar un vídeo con un teléfono y compartirlo al instante con un grupo de amigos, salir de compras sin movernos del sofá o bajarnos este libro en una tableta son cosas que ya no asombran a nadie, pero que hasta hace poco pertenecían al reino de la ciencia ficción. Los avances incesantes de las tecnologías de la información y la comunicación nos abren un mundo fascinante de posibilidades y retos, pero también de riesgos. Para adaptarnos a esa nueva vida, y frente a las profecías de los agoreros, Cibernícolas nos propone, con amenidad y un punto de humor, una manera inteligente de habitar en ese universo virtual, un enorme hipermercado en el que todo cabe, una jungla en expansión donde, como señala el autor, «los humanos jugamos a ser exploradores, y nos perdemos o no dependiendo de si sabemos usar la brújula adecuada e interpretar las señales». De nosotros dependerá terminar convertidos en ticópatas atrapados por los vicios hipermodernos, o en cibernícolas inteligentes, solidarios y felices.
En el siglo XXI, las familias han evolucionado hasta el punto de que los hijos se han convertido en el centro de las mismas. Y dispuestos a «darles todo» y a conseguir unos hijos perfectos, orbitan los hiperpadres o «padreshelicóptero », que ejercen una crianza basada en estar siempre encima de los hijos, anticipándose a sus deseos y resolviéndoles todos sus problemas. Un cóctel con ingredientes como la estimulación precoz, las agendas repletas, la tolerancia cero a la frustración y los enfrentamientos con los maestros que osen cuestionar las maravillas del niño o la niña. Aunque ejercida con la mejor intención, la hiperpaternidad se está llevando por delante aspectos tan vitales en el desarrollo de los hijos como la adquisición de autonomía, la capacidad de esfuerzo y el tiempo para jugar. También provoca familias estresadas y niños tan sobreprotegidos que, irónicamente, tienen más miedos que nunca. Con rigor y un punto de humor, este libro analiza el fenómeno de los hiperpadres y da claves para la práctica del underparenting o la «sana desatención»: relajarse, confiar en los hijos y dejarlos más a su aire.
¿Es justo tratar siempre bien a todos? ¿Ser cortés es cosa de otra época? ¿El que dice las verdades pierde las amistades? ¿Se puede discutir sin pelearse? ¿«Disentir cordialmente» es un con
Lleno de agudas observaciones y de un humor explosivo, Papá está gordo es el homenaje de Jim a su vida rodeado de su familia, con todas sus alegrías y también con sus horrores. A la vez, es una petición de ayuda de un padre que se ha dado cuenta de que él y su mujer se han convertido en minoría en su propio hogar.
La desaparición del Oso y el Madroño es el explosivo inicio de Operación chotis en adobo. Pichi, un camarero gato de seis generaciones, recibe la noticia de que sus dos hermanos heavies, que normalmente charlaban pacíficamente en Gran Vía, han sido secuestrados. 500 kilómetros más al sur, una famosa pareja de cantantes de sevillanas ven amenazados los derechos de su gran éxito, una pegadiza canción que hizo bailar al planeta entero, y encargan su protección a un ingenioso y caradura abogado repeinado con gomina y rizos en la nuca: Megías. Pichi, de cocido, Megías de puchero; Pichi de caña, Megías de botellín; Pichi de zarzuela, Megías de sevillanas; uno y otro, tan distintos, tendrán que investigar qué está pasando en Madrid, y por qué es tan importante un antiguo disco del que ni siquiera los coleccionistas de El Rastro han oído hablar.
Veintiún cuentos de fantasmas escritos por algunas de las maestras victorianas del relato escalofriante. Un regalo perfecto para Navidad y para leer al amor de la lumbre. ¿Qué hace que las historias victorianas de fantasmas sean tan perfectas para leer al calor de una chimenea en una noche oscura? Historias de mansiones abandonadas, de viajes en coches de caballos por páramos desolados, de castillos en acantilados, de bellas mujeres sepulcrales, de oscuras historias familiares en las que los antepasados no acaban de irse del todo? Un género en el que algunas eminentes damas novelistas, especialistas en lo escalofriante, marcaron tendencia. Las veintiuna historias incluidas en este volumen abarcan el reinado de la reina Victoria y cuentan con aportaciones de autoras clásicas como Charlotte Brontë, Elizabeth Gaskell, Margaret Oliphant o Willa Cather, junto con otras no tan conocidas pero no por ello menos especialistas en lo tenebroso y lo sobrenatural. Ambientados en las montañas de Irlanda, en una villa mediterránea o en una tétrica mansión de Londres, estos relatos evidencian la fascinación victoriana por la muerte y por lo que había más allá, con atmósferas sugerentes, ingenio y mucho, mucho humor.