Este segundo volumen, centrado en la investigación histórica de base, recoge desde los trabajos destinados a la exhumación de fosas y la singularización de las víctimas y los hechos en una región concreta como es Extremadura, hasta el estudio de periodos poco conocidos de nuestra guerra civil como el del gobierno de José Giral.
Cuando leemos una historia de amor casi siempre se llega a un final feliz. Esto es porque cuando se encuentra presente este sentimiento existe bondad y cariñ,o entre la pareja de enamorados, quienes se entregan sin exigir nada a cambio.
Al igual que, en las sociedades secularizadas, la esperanza de lograr en el futuro el bienestar en la tierra ha reemplazado a la antigua resignación medieval que difería hasta la otra vida la realización de las aspiraciones insatisfechas, también LA IDEA DEL PROGRESO ha sustituido a la fe en la providencia como mano invisible que orienta el desarrollo de la humanidad. Esta obra clásica de JOHN BURY (1861-1927) analiza la génesis y evolución de ese gran mito de nuestra época, estrechamente vinculado al nacimiento de la ciencia moderna y a la lucha por la libertad política y religiosa. Tres grandes periodos cabe distinguir en su constitución. Cubre el primero la etapa que transcurre entre los revolucionarios descubrimientos de la astronomía heliocéntrica y el optimista mensaje de Condorcet, culminación de las reflexiones sobre el destino humano de la Ilustración, en las que la noción del mejoramiento se halla siempre subyacente. En el segundo periodo, la categoría de progreso se formula ya con todo su alcance teórico: la filosofía idealista alemana, por un lado, y Saint-Simon y Comte, por otro, se esfuerzan por descubrir sus leyes. Por último, tras la publicación en 1859 de «El origen de las especies» (CT 2512), la extensión del principio de la evolución a la vida social termina por convertir esta idea en un credo de aceptación casi universal.
Una amplia colección de fuentes y documentos, de los testimonios notariales a la literatura, nos permiten comprender la formación, situación social y formas de vida de los pintores del siglo xvii.
Escrito entre 1925 y 1928, el libro de Víctor-Serge, clásico ya, describe los acontecimientos y procesos principales que tuvieron lugar en Rusia durante los primeros doce meses que siguieron al triunfo de la Revolución bolchevique, en octubre de 1917. Antes, en un primer capítulo, hace una rápida síntesis de los antecedentes más importantes (políticos, económicos, sociales) que condujeron a ella. La cercanía de Víctor-Serge a la Revolución, y la circunstancia de que haya sido actor y participante en ella, le dan una frescura, una fuerza y una originalidad extraordinaria al libro. Así, el autor, escrupuloso conocedor, presenta desde adentro una obra que, desde el punto de vista histórico, demuestra una comprensión verdaderamente profunda del proceso de la Revolución de Octubre. Su interpretación y análisis, así como el reconocido talento de escritor y narrador de Víctor-Serge, convierten El año I de la Revolución rusa en uno de los frescos históricos más bellos que se hayan escrito en el siglo XX. Y, desde luego, una de las obras culminantes, fundamentales, sobre los primeros tiempos de la Revolución rusa.