¿Por qué el alzamiento militar de julio de 1936 fracasó en Barcelona? ¿Qué papel jugó el general Goded en el alzamiento? La presente obra nos desvela los entresijos del fracaso del alzamiento de julio de 1936 en la capital catalana, desde la fase conspiratoria hasta el alzamiento militar, así como los nombres clave de los dirigentes de la sedición en Cataluña. Con la figura del General de División Manuel Goded Llopis como eje del relato, Merino nos explica qué pasó el 19 de julio en Barcelona; la llegada a la ciudad del general Goded desde Mallorca cuando ya hacía horas que se luchaba en las calles de Barcelona; y cómo se produjo la rendición de los militares sublevados. Goded, detenido y encarcelado a bordo del barco-prisión Uruguay, sería sometido a un Consejo de Guerra. El autor nos explica con detalle los interrogatorios y el proceso judicial que finalizaría con la sentencia a la pena máxima. Goded murió fusilado después del alzamiento en los fosos del Castillo de Montjuïc.
La Guerra contra el Imperio Turco, conocida popularmente como la "Guerra del Turco", fue la más tenaz y prolongada que España libró a lo largo de su historia. Duró más de 200 años y tuvo como escenario principal el mar Mediterráneo y los países ribereños. Un enfrentamiento titánico que obligó a un derroche descomunal de recursos y energías y dejó casi despoblada gran parte de la costa española. En esa contienda despiadada se mezclaron factores políticos y religiosos, pero sin la intervención de España, entonces en el cenit de su poder, es muy probable que el centro y sur de Europa hubieran caído en manos del islam otomano. Mientras el Imperio Hispano se extendía por todo el mundo, a duras penas conseguía detener los ataques de turcos y corsarios magrebíes. La guerra se convirtió en una herida abierta que se tragó enormes cantidades de hombres, barcos y oro.
Perdedores es el emocionante relato en primera persona de unos cuantos de los millones de personas que combatieron contra los Aliados en la Segunda Guerra Mundial. Recurre a las auténticas voces de los protagonistas, soldados y civiles alemanes y japoneses, para relatar sus experiencias. Sus palabras salen de diarios, cartas, informes de interrogatorios, entrevistas y memorias personales. Fascinante e instructivo, Perdedores revela cómo fue el conflicto para dos pueblos conducidos al desastre por unos líderes fanáticos y ávidos de poder.
Este libro muestra la evolución de las tácticas y la tecnología de estos contingentes armados a lo largo del auge, expansión y decadencia de las diferentes culturas. Profusamente ilustrado con más de 200 dibujos, fotografías y mapas, ofrecemos una introducción asequible a las campañas bélicas de la Antigüedad para los aficionados a estas cuestiones y para el lector en general.
Estas láminas a la acuarela y sus notas, acompañadas de información suplementaria, serán de interés para los investigadores y los estudiantes serios de la historia militar, así como para aquellos que tengan un interés más general en el desarrollo de los uniformes militares.
El submarino, como arma de guerra útil, apareció a principios del siglo XIX. Pese a que eran poco fiables, ya eran útiles para auténticas batallas navales. Pronto se vería que iban a ser un arma que tendría un prometedor futuro si se desarrollaba plenamente. Al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, el número de buques de la armada alemana era demasiado pequeño para disputar el control del mar a la Royal Navy británica; su única posibilidad estratégica era atacar su comercio utilizando la flota submarina; una clásica guerra de corso, como la realizada por Inglaterra durante siglos contra España, pero utilizando los medios de que disponía el siglo XX: navíos de superficie, aviones y, sobre todo, submarinos.
Con su habitual perspicacia sobre el complicado mundo bélico y su gran capacidad de narrador, Keegan teje un relato lleno de ritmo sobre los medios que han empleado los grandes estrategas de la historia para identificar las debilidades, las intenciones o las tácticas de sus enemigos. En ocho capítulos que se leen como ocho mini-novelas, el autor analiza las claves de algunos de los enfrentamientos más famosos de todos los tiempos y el papel que desarrolló la información, para bien o para mal, en cada uno de ellos. Julio César, el almirante Nelson, Napoleón, Stonewall Jackson o Churchill aparecen en estas páginas inmersos en las complicadas decisiones tácticas de sus grandes batallas, para acabar con un relato especialmente interesante para el lector de habla hispana: el análisis de la guerra de las Malvinas en 1982. Profusamente ilustrado con mapas y gráficos, y documentado con un impresionante despliegue bibliográfico de primera mano, este libro apasionará a los interesados en la historia y ayudará a poner en perspectiva el uso actual de la información en la lucha antiterrorista.
Durante siglos, las expediciones militares han dado prestigio al país y han permitido a los ejércitos mantenerse ocupados. No es un invento nuevo. En los siglos XVI, XVII y XVIII, con el fin de conquistar territorios, o en el XIX y el XX, para ganarse el respeto de las naciones de su entorno, España mandó contingentes de tropas -grandes o pequeños, según la ocasión- fuera de sus fronteras. De esas aventuras tratan éstas páginas. Países europeos, asiáticos y africanos, hasta donde llegaron las armas españolas en tiempos en que, sobre todo, estaban muy lejanos; sin aviones, sin automóviles y casi sin ferrocarriles. Tiempos en que los ejércitos se movían a pie y las travesías en barco entre continentes duraban meses. Tiempos, en fin, sin televisión, teléfono o internet, en que todo asombraba, y una herida o una enfermedad mal curadas, significaban la muerte en la mayoría de los casos. La obra, basándose en las fuentes directas, estudia la participación, desarrollo y conclusión en las diversas intervenciones, de los soldados de España, que ajenos a razones políticas, con abnegación y valor, sirvieron en tierra extraña para mantener en alto el honor y el nombre de su patria.