En " Mercaderes y banqueros de la Edad Media " , el gran historiador francés Jacques Le Goff estudia una de las figuras más características y atractivas de la Cristiandad medieval, mostrándonos la actividad del mercader-banquero del Occidente europeo entre los siglos xi y xv, desde su trabajo en el mercado hasta sus relaciones sociales, sus ideas políticas, creencias religiosas y gustos artísticos. En este ejercicio modélico de la «nueva historia» --cuyo objetivo es integrar lo individual con lo colectivo, lo político con lo social, económico y cultural, en pos del ideal de una «historia total»-, y al reclamar el «derecho a la historia» de los mercaderes y banqueros medievales, Le Goff reivindica una imagen distinta de la Edad Media occidental, no sólo hecha de campesinos, monjes y caballeros, sino también de otros personajes, precursores indiscutibles de la modernidad.
Este gran mapa de la vida política en la Europa medieval tardía proporciona un nuevo marco para entender los desarrollos que formaron este periodo turbulento. El relato se centra en los resultados combinados del crecimiento político y gubernamental a través del continente. La época de la Guerra de los Cien Años, el cisma y la revuelta también fue un tiempo de rápido crecimiento en jurisdicción, impuestos y representación, en el que se incrementó la alfabetización y se desarrolló la técnica política. Con una introducción completa a los acontecimientos y a los procesos políticos acaecidos entre los siglos XIV y XVI, este libro combina una narración amplia y comparativa con la discusión de regiones y estados individuales, incluyendo la Europa oriental y del norte junto con la más familiar Europa occidental y del sur.
El nuevo libro del autor del best seller mundial 1421: una fascinante revisión de la historia que presenta nuevas pruebas sobre el Renacimiento y encuentra sus orígenes en la milenaria civilización china.
En medio de un agresivo y politizado debate abierto sobre la historia de al-Ándalus, Reinos de fe supone una nueva manera de entender siete siglos de civilización islámica en la península. Ni el campo de un choque de civilizaciones, ni un idílico paraíso de la convivencia pacífica, al-Ándalus fue una construcción política y religiosa muy compleja que tuvo que buscar equilibrios entre facciones enfrentadas y muy a menudo estableciendo importantes lazos de conveniencia con los poderes cristianos. Este libro marca un hito en el análisis de un período de nuestra historia que algunos pretenden negar desde la ignorancia y la xenofobia y que nos aporta ejemplos muy interesantes para establecer unas bases de una mejor convivencia.
Esta obra muestra cómo un autor, un artista, sea musulmán, judío o cristiano describe o comprende las prácticas religiosas, las realidades culturales, las costumbres del «otro» religioso y su evolución en el Medioevo. Nos permite así comprender mejor los problemas de interrelación en el mundo actual, en este momento en que Europa vive cambios profundos ante la necesidad de integrar las masas de inmigrantes de diversas culturas y religiones en su propia realidad.
En la época visigótica se configura un nuevo concepto de Hispania o Spania que va mucho más allá de lo meramente geográfico y que constituye el fundamento para la edificación de las Españas medievales, a partir de tres componentes que confluyen: un territorio, una entidad política que es el Reino Visigodo con capital en Toledo y una historia que se llega a entender como el matrimonio del pasado romano con el pueblo godo. Los tres elementos se funden en virtud de un factor religioso fundamental, ya que logra unir a los dos grandes núcleos étnicos existentes e impulsa un esplendor cultural sobresaliente dentro del conjunto de los reinos germánicos. Este libro aparece en un momento clave que afecta al debate sobre el ser de España y sin duda resultará incómodo para ciertos postulados.
Julio Caro Baroja reclamó hace tiempo la necesidad de «hacer un estudio de conjunto de las leyendas genealógicas españolas». Este libro reúne precisamente una serie de trabajos sobre la construcción de la memoria genealógica de algunas de las principales casas nobiliares de Castilla. El estado de la cuestión sobre los textos y mecanismos fundamentales de construcción de la memoria nobiliar castellana se aborda a partir del análisis de las narrativas y de la escritura genealógica de los Haro, Castro, Lara, Ayala, Velasco, Pimentel, de la Cueva, Fernández de Córdoba, Guzmán e, incidentalmente, algunos más. Este libro quiere, además, ser un homenaje al trabajo de uno de los más brillantes medievalistas europeos de finales del siglo XX, Luís Krus (1954-2005), quien supo, con gran talento e intuición, ofrecer una visión renovada sobre la autoimagen que construye la nobleza pleno y bajomedieval.
Historia de la Edad Media es la continuación de Historia de los griegos e Historia de Roma, ambas de Indro Montanelli. Historia de la Edad Media retrata las costumbres y la evolución de la sociedad feudal: la vida en los castillos y en los pueblos, las relaciones entre la ciudad y el campo, la nobleza guerrera y terrateniente contra la naciente burguesía urbana, el papel de la mujer, el sentimiento religioso, la alimentación, el uso de la violencia, las supersticiones, etc., le interesan más que las guerras y los grandes cambios políticos y territoriales. A partir del análisis de estos elementos se reconstruyen los acontecimientos que fundamentaron nuestra civilización de una forma precisa y entretenida. Reseña:«Lees a Montanelli, ves el fondo y entiendes qué se mueve allá abajo.»Beppe Severgnini, Corriere della Sera
Hasta hoy las noticias sobre la conquista catalano-aragonesa de Mallorca procedían, salvo algunos fragmentos sueltos, de los vencedores. Este libro viene a cubrir una enorme laguna. Su autor, Ibn Amira Al-Mahzumi (1186-1269), cuenta pormenorizadamente aquel desastre desde el punto de vista musulmán. El manuscrito árabe, solo conocido por lejanas referencias, fue localizado en una biblioteca particular de Tinduf. Muhammad ben Mamar hizo la primera transcripción, anotación y edición del manuscrito y, a partir de este meritorio trabajo, los profesores Guillem Rosselló Bordoy y Nicolau Roser Nebot lo vertieron al catalán, añadiendo también estudios propios y anotación complementaria. Ofrecemos, pues, la primera traducción de un texto que completa de manera ya imprescindible nuestra visión de la historia de Mallorca alrededor de 1229, y unos materiales historiográficos que han de servir para reevaluar los últimos años de la dominación musulmana de la Baleares y el proceso de la conquista cristiana.
Romántica aventura cristiana o última invasión de los bárbaros, movimiento animado por razones religiosas o saqueo guiado por la ambición y la codicia, la Historia de las Cruzadas contituye un acontecimiento decisivo en la Edad Media. Antes de su inicio -en el siglo XI- los grandes centros de la civilización eran Bizancio y los países del Califato árabe; antes de su conclusión -en el siglo XIV- la hegemonía de la cultura y del poder se había desplazado ya hacia Occidente. Para comprender ese lento pero irresistible movimiento de deriva no basta con estudiar las circunstancias que dan cuenta de su génesis en Europa; es preciso también explicar las condiciones que en Oriente posibilitaron el avance de los cruzados. La mirada debe arrancar desde el Atlántico hasta Mongolia, y el espectador ha de situarse en la perspectiva tanto de los francos como de los árabes y los cristianos de Oriente. Los tres volúmenes de la obra original están ahora reunidos en uno solo con tres partes: " La primera Cruzada y la fundación del Reino de Jerusalén " , " El Reino de Jerusalén y el Oriente Franco " y " El Reino de Acre y las últimas Cruzadas " . Estos textos constituyen las mejor ilustración de las bastas posibilidades de una historiografía que se niega a permanecer encerrada dentro de las fronteras de la erudición alejandrina y la parcialización de las especialidades y considera su principal deber " registrar en una extensa sucesión los hechos y movimientos más importantes que han dominado, con su vaivén, los destinos del hombre " .
Esta investigación sobre los primeros asentamientos y comunidades de judíos en los distintos reinos peninsulares durante la transición de la dominación musulmana a la cristiana, cuyo período central se sitúa entre los siglos XI y XIII, se utiliza el concepto de «frontera», es decir «la tierra fronteriza» situada entre los territorios controlados por los cristianos y los controlados por los musulmanes, que se extendía desde el sur de Portugal en el oeste, a través de los territorios de Andalucía, Murcia, y Valencia y hasta las Islas Baleares en el este. El autor, que ofrece una descripción del desarrollo de la sociedad judía en el sur peninsular, argumenta que los contornos de la comunidad judía fueron definidos principalmente por influencia de fuerzas externas. Los factores sociales, políticos y económicos dominantes en la frontera durante la segunda mitad del siglo XIII contribuyeron a conformar comunidades judías caracterizadas por una gran fluidez y una organización y estabilidad internas relativamente precarias. La ausencia de instituciones públicas y estructuras políticas perdurables en esta región, que podrían haber promovido la autonomía y la autoridad judías, permitió tanto a la corona como a los colonos judíos actuar movidos por sus propios intereses individuales.
El insigne medievalista francés Jacques Le Goff busca en este libro las raíces de la larga historia de la Europa contemporánea. Para ello, pone ante nuestros ojos los rastros y los estratos sucesivos de numerosas mutaciones, desde las ruinas del Imperio romano hasta los grandes descubrimientos del siglo XVI. El profesor Le Goff revisa ese pasado, lo explora y lo diseccionad para mostrarnos cómo la Europa contemporánea hereda o retoma muchos de los caracteres de aquella «Europa» medieval que no es, desde luego, la nuestra, pero que constituye un hito en su formación: unidad potencial y diversidad fundamental, mestizaje de poblaciones, divisiones y oposiciones este-oeste/norte-sur, primacía unificadora de la cultura, etc. Desde la frustración carolingia hasta la «bella» Europa de las ciudades y las universidades, el profesor Le Goff nos invita a todos los europeos a viajar en el tiempo, con la esperanza de que comprendamos mejor nuestra procedencia y podamos, así, construir mejor nuestro futuro.