Monet y Giverny, Renoir y Les Collettes, Pissarro y el Hermitage en Pontoise: los artistas impresionistas están inseparablemente ligados a sus hogares. Para cada uno de ellos, «hogar» tenía un significado ligeramente diferente un lugar confortable dentro de una sociedad en permanente cambio, un santuario inmune a los cambios de la fortuna y la fama, una forma de vida más sencilla, alejada de la ciudad, un lugar para expresar su individualidad y disfrutar. En todos los casos, marcó su arte. Organizado alrededor de las rutinas diarias de los artistas comidas, actos sociales, trabajo, baños, horas de dormir, reposo y educación de los niños este libro explora las vidas domésticas de los impresionistas como no se había visto hasta ahora. Acercándose a sus cuadros, diarios, cartas, recuerdos, bocetos íntimos y fotografías familiares, proyecta la turbulencia y la tranquilidad de las vidas privadas de los artistas, teniendo en cuenta sus actitudes respecto a las relaciones, la familia, la decoración interior y su arte. A través de bocetos cálidos y llenos de afecto, contemplamos a los impresionistas con una nueva luz: Monet, después de unos comienzos difíciles, acomodándose a su confortable vida burguesa; Renoir, el frívolo artista juvenil, convirtiéndose en un maduro y amoroso padre de familia; Pissarro, el socialista comprometido; Toulouse-Lautrec, el distinguido aristócrata; Morisot, la elegante parisienne; y los impresionistas norteamericanos como Childe Hassam, que acudieron en tropel hasta Giverny buscando la inspiración de Monet. El libro se completa con las biografías de las principales personalidades, incluidos criados, modelos y amantes, así como una lista de los hogares impresionistas que se pueden visitar hoy en día.
Georgia O'Keeffe (1887-1986) fue una gran figura del arte moderno estadounidense durante siete décadas. Su fama no estuvo asociada al cambio de tendencias y estilos artísticos, sino a su visión única, basada en la búsqueda de formas abstractas y esenciales en la naturaleza.Los temas primordiales de O'Keeffe fueron los paisajes, las flores y los huesos, que desarrolló en distintas series a lo largo de varios años. Algunos trabajos se prolongaron durante décadas y dieron como resultado una docena o incluso más variaciones de una misma imagen. Un ejemplo de ello son sus famosas ampliaciones de lirios de agua y azucenas. Aumentando los más diminutos pétalos hasta llenar enormes lienzos, O'Keeffe creó un lenguaje proto-abstracto de formas y líneas que le valió el apodo de madre del arte moderno americano. En 1946, O'Keeffe se convirtió en la primera mujer a la que el MoMA de Nueva York dedicaba una exposición individual.Esta introducción de la serie Basic Art 2.0 de TASCHEN descubre la larga y luminosa carrera de O'Keeffe por medio de pinturas clave, fotografías de su época y retratos que hizo de ella Alfred Stieglitz, su marido. Seguimos a la artista a través de sus grandes creaciones y éxitos, y la acompañamos en sus viajes internacionales, llenos de inspiración, del sudeste asiático a India, Oriente Medio y, en particular, Nuevo México, cargada de magníficos paisajes, vivos colores y vegetación exótica.
En " Las vanguardias artísticas del siglo XX " , el escritor y crítico de arte Mario de Micheli ha trazado una crónica viva de los grandes movimientos que configuraron la transformación de las artes plásticas desde el cambio de siglo hasta 1950, buscando su línea de continuidad y su común razón de ser en aquello que propiamente constituye la esencia de la vanguardia: el ánimo de ruptura cultural. Combinando el dato histórico y la crítica, se ofrecen aquí los materiales de una visión de los " ismos " más profunda que la mera catalogación de variantes formales; una visión integral, apoyada, de una parte, en el examen de la actividad creadora de los artistas más representativos del período, y, de otra, en los manifiestos y programas que presentaron las posiciones de partida de cada grupo.
Un total de 18 especialistas de distintas universidades presentan sus aportaciones sobre el arte latinoamericano del pasado siglo. El libro nace con la pretensión de ofrecer una nueva Historia del arte latinoamericano contemporáneo. No tiene carácter sintético y general, sino que ofrece distintas aproximaciones sobre temas específicos y con intención básicamente interpretativa. Se trata de contar pequeñas historias, disímiles, a menudo marginadas de la Historia del Arte. Obra profusamente ilustrada.
El art brut fue definido por el artista francés Jean Dubuffet como toda práctica artística, intermitente o permanente, realizada por una persona «indemne» de cultura. Aunque Dubuffet redefinió con los años la naturaleza de este concepto, el art brut permitió desde un principio reevaluar obras y artistas que habían quedado tradicionalmente fuera de los márgenes del arte oficial. Este volumen, que recoge la totalidad de las intervenciones del ciclo En torno al Art Brut, celebrado entre los meses de febrero y abril de 2006 en el Círculo de Bellas Artes bajo la dirección de Serge Fauchereau, historiador del arte y comisario, aborda las claves de un movimiento artístico cuyas raíces históricas se remontan a mediados del siglo XX pero que a veces se interpreta en un sentido mucho más amplio. Esta extensión plantea numerosos interrogantes: ¿Hacen art brut los niños, los locos o los místicos? ¿Qué relación hay, por ejemplo, entre Adolf Wölfi, encerrado de por vida en un hospital psiquiátrico, y el minero Lesage, que obedecía a las voces de los espíritus? Los textos recogidos en estas páginas exploran el fenómeno del art brut combinando el debate conceptual, la revisión histórica y el acercamiento detallado a algunas de sus figuras centrales. El libro incluye artículos de Serge Fauchereau, Dolores Durán Úcar, Joëlle Pijaudier-Cabot, Lucienne Peiry, Guillermo Solana, Juan Manuel Bonet, Josette Rasle, Emmanuel Guigon, Carlos Pérez.
Desde la primera fotografía de la que se tiene noticia en la ciudad hasta las majestuosas panorámicas más recientes, este es un homenaje fotográfico a modo de fascinante viaje a lo largo de la historia cultural, política, industrial y sociológica de Los Ángeles. Ante nuestros ojos pasará toda la evolución de la ciudad: el boom urbanístico de la década de 1880, los primeros años de Hollywood y la expansión residencial de finales del siglo XX hasta nuestros días. A través de más de 500 imágenes, Los Ángeles asoma entre las desolación del desierto para convertirse en una metrópoli cuajada de estrellas.Sucesos que dieron la vuelta al mundo (entre ellos dos Juegos Olímpicos, el asesinato de Bobby Kennedy y los disturbios del caso Rodney King) dan cuenta de las muchas facetas de la ciudad. Se ha prestado una atención especial a Hollywood, capital mundial del entretenimiento, así como a las celebridades que la pueblan, pero también a muchos de sus destacados residentes: arquitectos, artistas, músicos... Los movimientos culturales pop de la ciudad, la música, el surf, las modas dietéticas, las bandas, los coches... todo aparece en el libro, incluso los más sonados crímenes y criminales. Esta obra retrata lo mejor y lo peor de Los Ángeles a través de centenares de imágenes recientemente descubiertas, entre ellas las de Julius Shulman, Garry Winogrand, William Claxton y muchos otros fotógrafos de extraordinario talento, recopiladas de los principales archivos fotográficos, museos, colecciones privadas y universidades.Los textos de acompañamiento, escritos por el prestigioso historiador de California Kevin Starr y el experto en literatura angelina David Ulin, aportan el contexto necesario a cada imagen y las dotan de mayor profundidad.