Ir al contenidoHistoria del arte y estilos de diseño: c. 1900
Publicacion que hace un recorrido irónico a lo largo de más de treinta años de trayectoria del artista Carlos Pazos (Barcelona, 1949), Premio Nacional de Artes Plásticas en 2004. La originalidad y la personalidad de su obra, emparentada con la estética Kitsch y con la poética del objeto son claramente percibidos en esta publicación.
TODOS LOS HOMBRES SON HERMANOS, ES UN PUNTO DE REFERENCIA EN LA LITERATURA CLASICA CHINA, EL PUNTO DE PARTIDA DE UNA NUEVA ERA EN LA HISTORIA LITERARIA DE CHINA EN EL LIBRO TAMBIEN SE ILUSTRA LA PERSONALIDAD DE LAS 108 PERSONAS Q SE CORRESPONDEN SUPUESTAMENTE, CON LAS 108 CONSTELACIONES. ASI MISMO, EL LIBRO NOS PERMITE DESCUBRIR UNA FORMA DIFERENTE DEL PLEBELLISMO PROPIA DE LA EPOCA BASADA EN LA "LIBERTAD". SIMILARES EN MUCHOS ASPECTOS, LOS DISEÑADORES GRAFICOS TAMBIEN INTRENTAN ESTABLECER UN REINO UTOPICO, COMO LOS ROBIN HOOD. EN EL ARTE DEL DISEÑO GRAFICO, EL CONCEPTO ABSTRACTO DE LA LIBERTAD A MENUDO, ESTA LIGADO A DEMANDAS COMERCIALES DIFERENTES Y ESPECIFICAS, SIN EMBARGO, LA CREATIVIDAD DEL DISEÑO GRAFICO CONTINUA ATRAYENDONOS, EN ESTE LIBRO REUNIMOS A 108 DISEÑADORES GRAFICOS DE TODO EL MUNDO. POR SUPUESTO, NO SON NI LAS 108 CONSTELACIONES DEL CIELO NI AUTORIDADES ACADEMICAS POR ENCIMA DE LAS CRITICAS, SIMPLEMENTE, TIENEN ALGO EN COMUN EN SU CORAZON Y ESPIRITU, E INTENTAN EMPLEARLO PARA CREAR UN REINO DEL DISEÑO GRAFICO.
Nada más antipático que la solemnidad del arte. Y nada tan grato y ameno como parodiarla, burlar todo su orgullo, pompa y circunstancia señalando con el dedo que el rey está desnudo. Lo esté o no lo esté, ese es otro cantar. Para equilibrar la balanza, Brecht Vandenbroucke decide adoptar el disfraz del bufón que da volteretas, se tira pedos y cuenta chistes chuscos en la cara de Manet, Botticelli, Warhol o Marina Abramovic. Su irreverencia iguala épocas y estilos, escuelas y disciplinas como la performance, el graffiti, la pintura, el diseño
y el cómic. Porque o follamos todos, o la puta al río. Los dos gemelos protagonistas con cabeza de uva de WHITE CUBE emergen como dos implacables críticos que no necesitan pronunciar una sola palabra para dirimir la naturaleza de una obra de arte. Da igual que cuelgue de la pared de un museo o que descanse junto a un contenedor de basura, si sus pulgares apuntan hacia arriba, es que bien. Así, la tradicional división entre alta y baja cultura, entre arte popular y pieza de colección, es cuestionada por Vandenbroucke a través de sus magníficas viñetas coloreadas con acrílicos y de ese algo que podríamos llamar humor belga hablar de absurdo aquí es quedarnos cortos, siguiendo la estela de otros maestros del extrañamiento como Herr Seele y Kamagurka, Gummbah o Glen Baxter.