El ojo es un elemento constante en las representaciones iconográficas de todas las épocas y culturas. Símbolo del firmamento y de la divinidad, cobra múltiples formas y matices que el poeta y crítico de arte Juan Eduardo Cirlot (Barcelona, 1916-1973) desvela capa tras capa con una erudición e intuición extraordinarias. El ojo en la mitología fue escrito originalmente en 1954, y es sin duda el germen del posterior Diccionario de los símbolos (1958), obra de referencia del autor a nivel internacional. Desde el ojo en las obras de Magritte y otros surrealistas, la figura del dios Indra sembrado de ojos, los esbeltos ojos de las pinturas egipcias, los serafines románicos con ojos en las alas o las representaciones de los bodhisatvas tibetanos, Cirlot hila una mitología del ojo que es a la vez una historia de la cultura y de la relación del arte con lo sagrado.
L'avarícia pot ser convertida en el més noble dels sentiments revolucionaris o en el més lleig dels pecats. És un pecat relatiu, que fluctua entre el vici i la virtut (una manera força estranya de ser pecat). L'avarícia implica tant l'adquirir (rebre) com el no desprendre's (no donar), i res no és excessiu, ni desordenat, ni desmesurat si no és en relació amb una gradació que marca el punt d'excés, un ordre o una mesura. D'aquí els seus límits difusos. Oriol Ponsatí-Murlà ens apropa a l'avarícia des d'una òptica reveladora i suggestiva sense deixar de banda referents de la filosofia antiga i de les fonts cristianes. A través d'un recorregut històric sobre el concepte a partir d'autors paradigmàtics (Bracciolini, Evagri Pòntic, Gregori el Gran, Tomàs d'Aquino, Aristòtil, Prudenci, Joan Cassià, Isop o Demòcrit), formula la pregunta següent: ¿quina funció fa, o pot fer, l'avarícia, en el nostre Occident globalitzat, interconnectat i líquid? La sèrie «Pecats capitals» pretén oferir una visió fresca i rigorosa de cada «pecat» a càrrec de noves veus de l'assaig català.
La aparición del intelectual antiguo va unida a la invención de la escritura como exigencia de la Administración civil y religiosa, expresada por primera vez en rudimentarias tablillas de cuentas. En el umbral de la historia, surge el escriba monopolizador de la palabra escrita. En las culturas del cercano Oriente, una clase ociosa de sacerdotes y escribas estableció las bases legitimadoras del sistema político dominante. En Israel, se desarrolló una profecía extática, que no se dio en Egipto ni en Mesopotamia. La elaboración intelectual de los profetas hebreos abrirá las puertas del racionalismo ético del occidente, preludiando la figura del intelectual crítico. En Grecia, toma cuerpo la intelectualidad occidental, siendo el poeta y el sofista los primeros prototipos del espíritu europeo. Después de la revolución llevada a cabo por Sócrates y los sofistas, las escuelas de filosofía representadas por la Academia y el Liceo albergan las figuras del filósofo y el científico, que simbolizan a Platón y Aristóteles. A su vez, en las grandes culturas orientales de India y China, el intelectual se desarrolla a través de los dos tipos del brahmán y el mandarín, que responden a concepciones opuestas de la vinculación entre religión y poder político. La aventura del intelectual antiguo se mueve ya entre la legitimación y la crítica del poder.
Escrito con la fuerza narrativa y la encendida prosa de su autor, este relato en primera persona es un apasionante recorrido por una de las vidas más intensas, combativas y dramáticas de la primera mitad del siglo XX. Trotsky, uno de los líderes de la insurrección que instauró el poder soviético, aborda en este texto, escrito en Constantinopla en 1929, sus primeros años de formación intelectual y familiar, sus primeras lecturas y escritos teóricos, sus amigos y colaboradores, re pasando las sucesivas oleadas revolucionarias, la minuciosa construcción de un partido político capaz de enfrentarse con el zarismo, la cárcel y el exilio del joven bolchevique, el triunfo de la revolución y la guerra civil. Entre sus recuerdos, Trotsky no olvida las penurias y las desgracias -provocadas por sus irreconciliables diferencias con Stalin- de una vida consagrada a la propagación de la revolución mundial. León Trotsky murió asesinado por el agente español de la GPU Ramón Mercader en 1940.
Zygmunt Bauman, en aquest breu assaig, perfila la noció d'Europa com un repte, una aventura inacabada, un escenari que cal crear i construir. Sense deixar de banda el fil de la història, i des d'una perspectiva eminentment sociològica, Bauman interpel·la la contemporaneïtat per trobar respostes als grans interrogants que planteja la convivència planetària. Amb l'agudesa que caracteritza les anàlisis i el pensament de Bauman, Una aventura anomenada "Europa" advoca per la construcció d'un espai on tingui cabuda la diversitat de la vida humana, sobre la base d'una xarxa de dependències recíproques que abraci tot el món. El destí de la llibertat i la democràcia de cada país només es pot defensar amb alguna possibilitat d'èxit en l'escenari global; i en aquest horitzó Europa pot recrear el seu caràcter aventurer.
Se reúnen aquí una serie de estudios, fragmentos, sobre un siglo de cultura y política en la España contemporánea, cuyo criterio-guía sería mostrar la vía positiva de compleja continuidad que vincula la Institución Libre de Enseñanza (1876) y la actual Constitución democrática (1978). En medio de ambas, tras las plurales huellas de la mejor dialéctica de la Ilustración, estarían la generación del 98, más literaria, y la del 14, más científica, determinantes en 1931 de la segunda República. Sobre tal marco de referencia, se hace en estas páginas un especial tratamiento de algunas de las principales aportaciones, en aquella vía, de la oposición intelectual frente al régimen dictatorial impuesto como resultado de la guerra civil. Transición, pues, a la democracia y homologación con Europa. De entonces para acá, ante la hegemonía global en las últimas décadas de la reacción fundamentalista y ultraconservadora (Wojtila, Thatcher, Reagan o, después, Ratzinger y Bush), de lo que, como respuesta, en buena medida se trata hoy es de que la soberanía (oligárquica) del mercado no sustituya, subordine o anule a la soberanía (democrática) del Estado: es decir, del Estado social y democrático de Derecho que se insiste en este libro es justamente lo que prescribe nuestra Constitución.
Nos inicios do pasado século XX tecíanse relacións fecundas entre os máis relevantes valores da Galiza. Relacións que darían lugar a iniciativas de grande e decisiva importancia, caso das Hirmandades dos Amigos da Fala. Unha organización que, desde o seu nacemento na primavera do 1916, reivindicaría a identidade nacional da Galiza, a partir da defensa do idioma propio do noso país nun tempo no que a lingua galega ficaba fóra da legalidade (española) imperante. Na presente monografía apreséntase unha ampla visión do que foron e representaron as coñecidas, popularmente, como Irmandades da Fala; partindo do contexto no que estas foron creadas e no que agromaron de xeito vizoso. E facémolo como homenaxe ás Irmandades no marco do centenario da creación das mesmas (1916-2016). Diante desta efeméride agardamos contribuír a socializar unha panorámica, o máis ampla posíbel, de como se xestaron e o que significaron para o país as Irmandades da Fala. Socializar, nomeadamente, que programa socio-político e cultural ergueron e defenderon as Irmandades, cal foi o seu modelo organizativo e o seu axir, cales foron as diferenzas internas que amosaron e onde situaron o eixo central da Causa galega: a loita pola visibilización da nación galega, a partir da defensa do idioma propio, en todos os planos nos que esta debía de se manifestar como tal; pulando ao tempo polo recoñecemento da Galiza como suxeito político.
«Este libro aborda el momento histórico vivido durante el final de la Guerra Fría, poniendo el foco en el humor gráfico publicado en los tres principales diarios de la época, ABC, El País y La Vanguardia. En una pugna ideológica en la que tan importante era ganar los corazones como las mentes de los españoles, Morera pone de relieve cómo el humor gráfico desempeñó un importante papel. La autora nos sitúa en el mundo de los años ochenta, contextualiza con rigor cada viñeta, proporcionándonos los elementos para su comprensión hoy, es decir, varias décadas después. Así consigue trasladarnos a la época, dramática y cómica a la vez, en la que dos superpotencias a un lado y a otro del telón de acero se armaban hasta los dientes con un arsenal nuclear que jamás se atreverían a utilizar, mientras escenificaban interminables conferencias sobre un desarme en el que nadie creía. Trabajos como este permiten constatar una vez más la importancia que la prensa tuvo en su momento como agente de cambio histórico, contribuyendo a crear determinados estados de opinión en el seno de la sociedad. Y hoy, pasados ya largos años desde la finalización del conflicto, nos muestran la utilidad de los periódicos como fuente histórica, porque nos ayudan a entender qué pensaban aquellos hombres y mujeres, qué temían, y también (y no es poco importante) de qué se reían».
El ojo es un elemento constante en las representaciones iconográficas de todas las épocas y culturas. Símbolo del firmamento y de la divinidad, cobra múltiples formas y matices que el poeta y crítico de arte Juan Eduardo Cirlot (Barcelona, 1916-1973) desvela capa tras capa con una erudición e intuición extraordinarias. El ojo en la mitología fue escrito originalmente en 1954, y es sin duda el germen del posterior Diccionario de los símbolos (1958), obra de referencia del autor a nivel internacional. Desde el ojo en las obras de Magritte y otros surrealistas, la figura del dios Indra sembrado de ojos, los esbeltos ojos de las pinturas egipcias, los serafines románicos con ojos en las alas o las representaciones de los bodhisatvas tibetanos, Cirlot hila una mitología del ojo que es a la vez una historia de la cultura y de la relación del arte con lo sagrado.
L'avarícia pot ser convertida en el més noble dels sentiments revolucionaris o en el més lleig dels pecats. És un pecat relatiu, que fluctua entre el vici i la virtut (una manera força estranya de ser pecat). L'avarícia implica tant l'adquirir (rebre) com el no desprendre's (no donar), i res no és excessiu, ni desordenat, ni desmesurat si no és en relació amb una gradació que marca el punt d'excés, un ordre o una mesura. D'aquí els seus límits difusos. Oriol Ponsatí-Murlà ens apropa a l'avarícia des d'una òptica reveladora i suggestiva sense deixar de banda referents de la filosofia antiga i de les fonts cristianes. A través d'un recorregut històric sobre el concepte a partir d'autors paradigmàtics (Bracciolini, Evagri Pòntic, Gregori el Gran, Tomàs d'Aquino, Aristòtil, Prudenci, Joan Cassià, Isop o Demòcrit), formula la pregunta següent: ¿quina funció fa, o pot fer, l'avarícia, en el nostre Occident globalitzat, interconnectat i líquid? La sèrie «Pecats capitals» pretén oferir una visió fresca i rigorosa de cada «pecat» a càrrec de noves veus de l'assaig català.
La aparición del intelectual antiguo va unida a la invención de la escritura como exigencia de la Administración civil y religiosa, expresada por primera vez en rudimentarias tablillas de cuentas. En el umbral de la historia, surge el escriba monopolizador de la palabra escrita. En las culturas del cercano Oriente, una clase ociosa de sacerdotes y escribas estableció las bases legitimadoras del sistema político dominante. En Israel, se desarrolló una profecía extática, que no se dio en Egipto ni en Mesopotamia. La elaboración intelectual de los profetas hebreos abrirá las puertas del racionalismo ético del occidente, preludiando la figura del intelectual crítico. En Grecia, toma cuerpo la intelectualidad occidental, siendo el poeta y el sofista los primeros prototipos del espíritu europeo. Después de la revolución llevada a cabo por Sócrates y los sofistas, las escuelas de filosofía representadas por la Academia y el Liceo albergan las figuras del filósofo y el científico, que simbolizan a Platón y Aristóteles. A su vez, en las grandes culturas orientales de India y China, el intelectual se desarrolla a través de los dos tipos del brahmán y el mandarín, que responden a concepciones opuestas de la vinculación entre religión y poder político. La aventura del intelectual antiguo se mueve ya entre la legitimación y la crítica del poder.
Escrito con la fuerza narrativa y la encendida prosa de su autor, este relato en primera persona es un apasionante recorrido por una de las vidas más intensas, combativas y dramáticas de la primera mitad del siglo XX. Trotsky, uno de los líderes de la insurrección que instauró el poder soviético, aborda en este texto, escrito en Constantinopla en 1929, sus primeros años de formación intelectual y familiar, sus primeras lecturas y escritos teóricos, sus amigos y colaboradores, re pasando las sucesivas oleadas revolucionarias, la minuciosa construcción de un partido político capaz de enfrentarse con el zarismo, la cárcel y el exilio del joven bolchevique, el triunfo de la revolución y la guerra civil. Entre sus recuerdos, Trotsky no olvida las penurias y las desgracias -provocadas por sus irreconciliables diferencias con Stalin- de una vida consagrada a la propagación de la revolución mundial. León Trotsky murió asesinado por el agente español de la GPU Ramón Mercader en 1940.
Zygmunt Bauman, en aquest breu assaig, perfila la noció d'Europa com un repte, una aventura inacabada, un escenari que cal crear i construir. Sense deixar de banda el fil de la història, i des d'una perspectiva eminentment sociològica, Bauman interpel·la la contemporaneïtat per trobar respostes als grans interrogants que planteja la convivència planetària. Amb l'agudesa que caracteritza les anàlisis i el pensament de Bauman, Una aventura anomenada "Europa" advoca per la construcció d'un espai on tingui cabuda la diversitat de la vida humana, sobre la base d'una xarxa de dependències recíproques que abraci tot el món. El destí de la llibertat i la democràcia de cada país només es pot defensar amb alguna possibilitat d'èxit en l'escenari global; i en aquest horitzó Europa pot recrear el seu caràcter aventurer.
Se reúnen aquí una serie de estudios, fragmentos, sobre un siglo de cultura y política en la España contemporánea, cuyo criterio-guía sería mostrar la vía positiva de compleja continuidad que vincula la Institución Libre de Enseñanza (1876) y la actual Constitución democrática (1978). En medio de ambas, tras las plurales huellas de la mejor dialéctica de la Ilustración, estarían la generación del 98, más literaria, y la del 14, más científica, determinantes en 1931 de la segunda República. Sobre tal marco de referencia, se hace en estas páginas un especial tratamiento de algunas de las principales aportaciones, en aquella vía, de la oposición intelectual frente al régimen dictatorial impuesto como resultado de la guerra civil. Transición, pues, a la democracia y homologación con Europa. De entonces para acá, ante la hegemonía global en las últimas décadas de la reacción fundamentalista y ultraconservadora (Wojtila, Thatcher, Reagan o, después, Ratzinger y Bush), de lo que, como respuesta, en buena medida se trata hoy es de que la soberanía (oligárquica) del mercado no sustituya, subordine o anule a la soberanía (democrática) del Estado: es decir, del Estado social y democrático de Derecho que se insiste en este libro es justamente lo que prescribe nuestra Constitución.
Nos inicios do pasado século XX tecíanse relacións fecundas entre os máis relevantes valores da Galiza. Relacións que darían lugar a iniciativas de grande e decisiva importancia, caso das Hirmandades dos Amigos da Fala. Unha organización que, desde o seu nacemento na primavera do 1916, reivindicaría a identidade nacional da Galiza, a partir da defensa do idioma propio do noso país nun tempo no que a lingua galega ficaba fóra da legalidade (española) imperante. Na presente monografía apreséntase unha ampla visión do que foron e representaron as coñecidas, popularmente, como Irmandades da Fala; partindo do contexto no que estas foron creadas e no que agromaron de xeito vizoso. E facémolo como homenaxe ás Irmandades no marco do centenario da creación das mesmas (1916-2016). Diante desta efeméride agardamos contribuír a socializar unha panorámica, o máis ampla posíbel, de como se xestaron e o que significaron para o país as Irmandades da Fala. Socializar, nomeadamente, que programa socio-político e cultural ergueron e defenderon as Irmandades, cal foi o seu modelo organizativo e o seu axir, cales foron as diferenzas internas que amosaron e onde situaron o eixo central da Causa galega: a loita pola visibilización da nación galega, a partir da defensa do idioma propio, en todos os planos nos que esta debía de se manifestar como tal; pulando ao tempo polo recoñecemento da Galiza como suxeito político.
«Este libro aborda el momento histórico vivido durante el final de la Guerra Fría, poniendo el foco en el humor gráfico publicado en los tres principales diarios de la época, ABC, El País y La Vanguardia. En una pugna ideológica en la que tan importante era ganar los corazones como las mentes de los españoles, Morera pone de relieve cómo el humor gráfico desempeñó un importante papel. La autora nos sitúa en el mundo de los años ochenta, contextualiza con rigor cada viñeta, proporcionándonos los elementos para su comprensión hoy, es decir, varias décadas después. Así consigue trasladarnos a la época, dramática y cómica a la vez, en la que dos superpotencias a un lado y a otro del telón de acero se armaban hasta los dientes con un arsenal nuclear que jamás se atreverían a utilizar, mientras escenificaban interminables conferencias sobre un desarme en el que nadie creía. Trabajos como este permiten constatar una vez más la importancia que la prensa tuvo en su momento como agente de cambio histórico, contribuyendo a crear determinados estados de opinión en el seno de la sociedad. Y hoy, pasados ya largos años desde la finalización del conflicto, nos muestran la utilidad de los periódicos como fuente histórica, porque nos ayudan a entender qué pensaban aquellos hombres y mujeres, qué temían, y también (y no es poco importante)
de qué se reían».