Se recogen en estas páginas las aportaciones presentadas a la Mesa redonda sobre historia de la Medicina Iberoamericana, celebrada con motivo de la reunión de la Junta General Ordinaria de la Sociedad de Historia de la Medicina Hispanoamericana, en Cádiz, en abril de 1993.
Esta biografía, publicada con ocasión del IV Centenario de la muerte de san Camilo de Lelis (1614), prescinde del carácter épico y hagiográfico tan frecuente en las narraciones de las vidas de los santos. A partir de los datos fidedignos aportados por la crítica histórica, Giorgio Cosmacini nos descubre la esencia que mueve la vida de Camilo. Enfermo desde muy joven, ve, sufre y participa de las deficiencias del hospital de tradición medieval. Camilo de Lelis, que conoce desde dentro el hospital de Santiago de los Incurables, decide en un cierto momento poner remedio a los despropósitos que allí acontecen, descubre su vocación y funda una Orden hospitalaria acorde a las necesidades de los tiempos y distinta de las que proliferaron a partir del siglo XII. La excelente biografía escrita por el profesor Cosmacini muestra la hospitalidad no solo como un carisma cristiano sino también como un valor humano fundamental, como algo valioso por sí mismo, que todo ser humano debe cultivar y practicar por mero imperativo de humanidad. Y si esto se dice de todo ser humano, cuánto más de quienes por vocación y profesión dedican su vida al cuidado de la salud de los demás: los profesionales sanitarios. GIORGIO COSMACINI, médico y licenciado en Filosofía, es profesor de «Historia de la Ciencia» en la Facultad de Filosofía y de «Historia de la Medicina» en la Facultad de Medicina y Cirugía de la Universidad Vita-Salute San Raffaele de Milán. Considerado el más ilustre historiador de la medicina italiano, es autor de numerosas obras sobre filosofía e historia de la medicina.
Los saberes y la práctica médica han otorgado desde siempre un peso excesivo a la salud y a la enfermedad concebidas como fenómenos exclusivamente biológicos. Los profesionales de la medicina deberían afrontar los problemas de salud desde una perspectiva integradora, que valore los factores somáticos, psíquicos, sociales y culturales característicos del entorno inmediato. Esta obra, mediante un análisis transcultural, intenta que los futuros profesionales de la medicina conozcan también la existencia de ideas, creencias, prácticas, valores, vocabulario? relacionados con la salud y con la enfermedad, porque la medicina es, al fin y al cabo, una ciencia eminentemente social. Los autores son ambos profesores titulares de Historia de la Medicina en la Universitat de València e investigadores del Instituto de Historia de la Ciencia y Documentación (UVEG-CSIC). José Luis Fresquet Febrer, autor de dos libros y de varios artículos, centra su área de estudio en la terapéutica, incluyendo la vertiente popular. Carla P. Aguirre Marco imparte docencia a los estudiantes de medicina, enfermería y odontología, y sus investigaciones, que tratan temas de medicina valenciana ?tanto la científica como la popular?, incluyen estudios sobre el mestizaje cultural.
Los principales cultivadores de la historiografía médica en la España de la primera mitad del siglo XIX fueron Antonio Hernández Morejón (1773-1836) y Anastasio Chinchilla Piqueras (1801-1867). El primero, nacido en Castilla, se formó en Valencia; el segundo nació en Ayora (Valencia) y también se formó en la Facultad de Medicina de Valencia. Las obras que aquí presentamos no son auténticas exposiciones históricas, sino repertorios bibliográficos cuya intención fue, básicamente, la de reivindicar la importancia de nuestra tradición médica nacional. Esta tendencia no fue exclusivamente española.
Se recogen en estas páginas las aportaciones presentadas a la Mesa redonda sobre historia de la Medicina Iberoamericana, celebrada con motivo de la reunión de la Junta General Ordinaria de la Sociedad de Historia de la Medicina Hispanoamericana, en Cádiz, en abril de 1993.
Esta biografía, publicada con ocasión del IV Centenario de la muerte de san Camilo de Lelis (1614), prescinde del carácter épico y hagiográfico tan frecuente en las narraciones de las vidas de los santos. A partir de los datos fidedignos aportados por la crítica histórica, Giorgio Cosmacini nos descubre la esencia que mueve la vida de Camilo. Enfermo desde muy joven, ve, sufre y participa de las deficiencias del hospital de tradición medieval. Camilo de Lelis, que conoce desde dentro el hospital de Santiago de los Incurables, decide en un cierto momento poner remedio a los despropósitos que allí acontecen, descubre su vocación y funda una Orden hospitalaria acorde a las necesidades de los tiempos y distinta de las que proliferaron a partir del siglo XII. La excelente biografía escrita por el profesor Cosmacini muestra la hospitalidad no solo como un carisma cristiano sino también como un valor humano fundamental, como algo valioso por sí mismo, que todo ser humano debe cultivar y practicar por mero imperativo de humanidad. Y si esto se dice de todo ser humano, cuánto más de quienes por vocación y profesión dedican su vida al cuidado de la salud de los demás: los profesionales sanitarios. GIORGIO COSMACINI, médico y licenciado en Filosofía, es profesor de «Historia de la Ciencia» en la Facultad de Filosofía y de «Historia de la Medicina» en la Facultad de Medicina y Cirugía de la Universidad Vita-Salute San Raffaele de Milán. Considerado el más ilustre historiador de la medicina italiano, es autor de numerosas obras sobre filosofía e historia de la medicina.
Tesis doctoral realizada en el Departamento de Medicina de la Universidad de Oviedo
Los saberes y la práctica médica han otorgado desde siempre un peso excesivo a la salud y a la enfermedad concebidas como fenómenos exclusivamente biológicos. Los profesionales de la medicina deberían afrontar los problemas de salud desde una perspectiva integradora, que valore los factores somáticos, psíquicos, sociales y culturales característicos del entorno inmediato. Esta obra, mediante un análisis transcultural, intenta que los futuros profesionales de la medicina conozcan también la existencia de ideas, creencias, prácticas, valores, vocabulario? relacionados con la salud y con la enfermedad, porque la medicina es, al fin y al cabo, una ciencia eminentemente social. Los autores son ambos profesores titulares de Historia de la Medicina en la Universitat de València e investigadores del Instituto de Historia de la Ciencia y Documentación (UVEG-CSIC). José Luis Fresquet Febrer, autor de dos libros y de varios artículos, centra su área de estudio en la terapéutica, incluyendo la vertiente popular. Carla P. Aguirre Marco imparte docencia a los estudiantes de medicina, enfermería y odontología, y sus investigaciones, que tratan temas de medicina valenciana ?tanto la científica como la popular?, incluyen estudios sobre el mestizaje cultural.
Los principales cultivadores de la historiografía médica en la España de la primera mitad del siglo XIX fueron Antonio Hernández Morejón (1773-1836) y Anastasio Chinchilla Piqueras (1801-1867). El primero, nacido en Castilla, se formó en Valencia; el segundo nació en Ayora (Valencia) y también se formó en la Facultad de Medicina de Valencia. Las obras que aquí presentamos no son auténticas exposiciones históricas, sino repertorios bibliográficos cuya intención fue, básicamente, la de reivindicar la importancia de nuestra tradición médica nacional. Esta tendencia no fue exclusivamente española.
