Copleston dedica el segundo volumen a explicar la adaptación de la filosofía a un nuevo paradigma que sitúa al sujeto como centro de la reflexión. En este campo de batalla competirán quienes piensan, siguiendo a Descartes, que la razón humana es el punto de apoyo sobre el que el hombre puede dar sentido al mundo; y quienes piensan, con Hume como mayor exponente, que la mente es una tabla rasa donde se imprime el flujo activo de sensaciones de cuyo meticuloso estudio debe partir cualquier esfuerzo de interpretación y de intervención sobre el mundo. Esta edición de la Historia de la Filosofía de Frederick Copleston actualiza para el lector en castellano la que probablemente sea la mejor introducción al pensamiento Occidental. Concebida como un mapa para dar orientación al estudiante y al lector curioso que se acerca a la filosofía por primera vez, la obra de Copleston ha terminado por consolidarse ?gracias a la claridad de su escritura, por la profundidad de sus interpretaciones y la atención concedida a los condicionamientos históricos de cada corriente de pensamiento- en una indispensable herramienta de consulta para especialistas y curiosos. Una visión crítica y razonada del pensamiento filosófico cuya actualidad y vigencia exigían esta reedición.
Esta completa Historia de la filosofía griega es un exhaustivo estudio que no solo enumera, clasifica y examina filósofos, escuelas y obras, sino que también los contextualiza adecuadamente para comprender mejor la progresión de las ideas en cada momento histórico. El objeto de estudio de este primer tomo son los filósofos presocráticos, desde los primeros hombres que en las ciudades jonias del siglo VI a. C. se preocuparon por la búsqueda de la verdad mediante la razón hasta los atomistas. El detallado recorrido por la tradición presocrática pasa, entre otros, por los filósofos milesios, Pitágoras y sus seguidores, Alcmeón, Jenófanes, Heráclito, la escuela eleática, Empédocles y Anaxágoras, hasta llegar a Leucipo y Demócrito, máximos exponentes del atomismo.
Una vida apasionada, marcada por el convulso siglo xx. Un pensamiento radical y lúcido, de gran influencia en nuestros días. Hannah Arendt fue una intelectual avanzada a su tiempo. Autora de una obra que abarca tanto la filosofía como la política, la ética y la religión, su figura es una de las más fascinantes de entre las que transitaron por el agitado siglo xx. En nombre de sus propias ideas, sin adscribirse a ninguna escuela, optó por preguntarse, a lo largo de toda su vida, sobre la cuestión del mal: la violencia política, los totalitarismos, el conflicto entre israelíes y palestinos, el poder de la sociedad de consumo, el aumento de los refugiados y la degradación de nuestras libertades. En esta extraordinaria biografía, Laure Adler traza un recorrido por el itinerario vital e intelectual de una mujer que desconfió de todos los ismos, y arroja luz sobre infinidad de cuestiones poco conocidas a partir de correspondencia inédita y del encuentro con amigos y conocidos de Arendt.
Este bello libro aborda de manera sencilla y práctica las grandes cuestiones que han movido a la humanidad desde siempre: la felicidad, el amor, la libertad, la justicia..., y lo hace desde la reflexión, la belleza y las sabias palabras de cuatro de los pensadores más fructíferos, atemporales e importantes de todos los tiempos. Estructurado con una pequeña introducción a cada uno de los temas, las citas, breves pero intensas, brillantes e ingeniosas, ayudan a pensar y a comprender. Porque todo lo que hay en los libros de autoayuda actuales, ya estaba en los clásicos.
El hombre unidimensional es un análisis de las sociedades occidentales que, bajo un disfraz seudodemocrático, esconden una estructura totalitaria basada en la explotación del hombre por el hombre. La obra se basa en dos hipótesis aparentemente contradictorias. De un lado, Marcuse afirma que la sociedad industrial avanzada es capaz de reprimir todo cambio cualitativo. Por otro lado, parece prevalecer la hipótesis que quiere que en esta sociedad existan fuerzas capaces de poner fin a la represión y de hacer explotar las mortales contradicciones que laten en su seno. La conclusión de Marcuse es de una lúcida desesperación: el sujeto revolucionario no puede estar constituido ni por el subproletariado urbano, ni por los intelectuales, ni por la unión de ambas fuerzas, consideradas hasta hoy como las más progresivas. La solución, según el autor, es ?despertar y organizar la solidaridad en tanto que necesidad biológica para mantenerse unidos contra la brutalidad y la explotación humanas?.
El cartesianismo hace mucho tiempo que murió. El pensamiento de Descartes, sin embargo, pervive y pervivirá mientras exista como guía de reflexión la libertad de pensar. Este principio constituye la más deliciosa fábula que el hombre pudo inventar, y eso se lo debe a la humanidad, en buena parte, a Descartes y, especialmente, a las dos obras que el lector tiene entre sus manos. Leer a Descartes es uno de los mejores ejercicios para mantener vivo el más importante impulso de la filosofía moderna: una duda previa absoluta, un escepticismo como punto de partida del genuino saber. Con todo, el principal mérito del que pasa por ser el primer racionalista oficial de la historia de la filosofía, ha consistido en su matizada crítica al pensamiento dogmático. Nada, efectivamente, puede ser aceptado en virtud de una autoridad cualquiera. Este héroe del pensamiento moderno, en palabras de Hegel, ha llevado a la filosofía por caminos apenas percibidos anteriormente, atreviéndose, por decirlos en palabras de Dalembert, a enseñar a las buenas cabezas a sacudirse el yugo de la escolástica, de la opinión, de la autoridad; en una palabra, de los prejuicios y de la barbarie y, con esta rebelión cuyos frutos recogemos hoy, ha hecho a la filosofía más esencial quizá que todos los que ésta debe a los ilustres sucesores de Descartes.
Al ser un manual breve ofrece la ventaja del bosquejo rápido, en el que los rasgos esenciales y el sentido del conjunto quedan vigorosamente destacados al prescindir de la multiplicidad de pormenores. No es propiamente una obra de consulta (a esto se presta la Historia de la filosofía, en dos tomos, del mismo autor), sino que sirve de iniciación en la materia. La misión del historiador no se agota en la simple exposición de las ideas filosóficas, sino que además debe invitar, desde su especial enfoque, a revivir el hecho histórico y a repensar los problemas y las doctrinas, contribuyendo a la formación filosófica general del lector. La finalidad que persigue el autor es sobre todo iniciar en el espíritu de la filosofía, ofreciendo una clara visión del proceso histórico que ha conducido al planteamiento de los problemas filosóficos y ha provocado la meditación sobre ellos.
¿Por qué pensamos lo que pensamos? ¿Por qué tenemos estos valores y no otros? ¿De dónde vienen nuestras creencias religiosas? ¿Por qué defendemos la democracia liberal como el mejor sistema político, aunque se trate de un ejercicio que hay que mantener en el día a día de nuestra responsabilidad, solidaridad y singularidad? ¿Qué relación se ha dado, en nuestra cultura, entre filosofía y literatura, entre el desarrollo moderno de las ciencias y la ilustración democrática? ¿En qué momentos la mujer aparece como sujeto en el espacio público social y político? ¿Existen relaciones entre la economía y nuestra forma de ver la existencia, nuestras formas de comportamientos sociales o la muerte? ¿Todo está claro y luminoso en nuestro progreso occidental?: ¿no tendríamos que preguntarnos, más bien, acerca de la relación entre y ?... Para explicar estas y otras muchas cuestiones relacionadas con nuestra forma de ser, no exenta de complejas tensiones, no tenemos más remedio que contar una historia. Esta Historia de la Filosofía ha querido narrar la Odisea de Occidente; su complicada y magnífica aventura del pensamiento, sin contar mentiras. También es, a su modo, una defensa de la Filosofía y del valor de la enseñanza pública.
Este libro es la primera gran enciclopedia española que propone una aproximación y una guía razonada a la filosofía de los grandes pensadores a través de sus textos. Contiene alrededor de 2000 artículos sobre obras y 920 sobre autores, con abundante información acerca de fuentes y bibliografía secundaria. Las obras fundamentales de cada uno de los pensadores están presentadas con una ficha bibliográfica inicial, una descripción del contenido, una breve biografía del autor, así como información útil para comprender la obra y el contexto en la que ésta fue concebida. La selección de las obras tiene como centro de gravedad la filosofía del mundo occidental, prestando especial atención a los autores de España y América Latina, pero recoge también con amplitud el resto de tradiciones especialmente el pensamiento árabe, chino, judío, eslavo, japonés e indio desde la antigüedad hasta nuestros días. Este libro ha optado por concebir el concepto de obra en su más extenso sentido teniendo en cuenta todas las formas literarias en las que se haya expresado el pensamiento filosófico: tratado sistemático, ensayo, obra capital, diálogos, poemas, cartas, glosas... La Enciclopedia de obras de filosofía es una versión ampliada y revisada de la obra alemana Großes werklexikon der Philosophie y cuenta con más de 90 nuevos autores con cerca de 170 obras nuevas. Un conjunto que permite ofrecer un amplio panorama de la aportación española y del ámbito iberoamericano al pensamiento filosófico. Para su confección, esta obra colectiva editada por Franco Volpi y Antonio Martínez-Riu ha contado con la labor de 240 profesores expertos en cada una de las principales ramas del saber. La Enciclopedia de obras de filosofía, que ha puesto un especial empeño en una redacción clara, precisa y concreta, se orienta tanto al estudiante avanzado que busca un instrumento auxiliar de estudio como al experto investigador que podrá disponer de un perspectiva filosófica centrada en los textos de los autores.
Sarah Bakewell cuenta la vida de Montaigne no bajo los protocolos habituales de una biografía sino como un tratado. Cada uno de sus veinte capítulos contiene veinte tentativas de respuesta a esa gran pregunta que Montaigne se planteaba. De las actitudes personales y de los escritos de Montaigne, Sarah Bakewell va deduciendo una serie de proposiciones que están hechas más de sugerencias que de normas, y que acaban siendo el boceto de una tradición viva que atraviesa los siglos y llega a nuestro presente. Estas son algunas de ellas:- Somételo todo a examen - Preserva una habitación propia - Haz algo que nadie haya hecho antes - Haz bien tu trabajo, pero no demasiado bien - No quieras controlarlo todo Los lectores descubrirán acontecimientos tales como su elección como alcalde de Burdeos y conocerán cómo llevó su vida pública en un momento de grandes conflictos religiosos y políticos. Pero lo más importante que encontrarán es el pensamiento de uno de los más grandes humanistas de la historia de la humanidad.
Los textos incluidos en esta selección responden a lo que se conoce como "moralismo francés", un topos literario que, como casi todos, es de difícil delimitación cronológica y genérica, aunque podríamos hablar de aquella literatura de género aforístico y con pretensiones moralistas que se produce en Europa, y con especial fuerza en Francia, a partir de mediados del siglo XVII, y que ha pervivido con distinta intensidad hasta nuestros días. Este volumen recoge las principales obras de los principales "moralistas franceses", con un punto de partida central en los Pensamientos de Pascal, los conjuntos de Máximas y reflexiones de La Rochefoucaould, los famosos Caracteres de La Bruyere, y la obra aforística y sentenciosa de Chamfort, el marqués de Vauvenargues o de Joubert. La edición literaria del volumen ha corrido a cargo de José Antonio Millán Alba, con las traducciones del propio Millán Alba junto a las de Salustiano Masó, y el estudio introductorio de la especialista Alicia Yllera.