El amor y la soledad van siempre juntos: no son dos contrarios, sino dos reflejos de una misma luz, que es la vida. Sin esta luz no valdría la pena dedicar a la filosofía ni una sola hora. Ésta es la tesis del presente libro, que no es simplemente un libro de filosofía, sino más bien el libro de un filósofo sobre lo que la filosofía y la vida le han enseñado, sobre lo que él ha aprendido... Es todo lo contrario de un sistema o de un tratado, sin llegar a ser un ensayo. Son entrevistas, lo que Montaigne hubiera llamado conferencias («El más fecundo y natural ejercicio de nuestro espíritu, a mi parecer, es la conferencia», decía), o dicho de otro modo, conversaciones. ¿Un arte menor? Sin duda alguna, pero eso forma parte de su encanto. Aquí la verdad importa más que la belleza, el placer más que el trabajo, la vida más que la obra.
María Zambrano (1904-1991) se plantea desde sus primeros escritos la relación entre filosofía y poesía, consolidando, junto al concepto de «razón vital», de Ortega y Gasset, el de «razón poética». A través de su aproximación a la expresión lírica y la mística, la pensadora hace tomar cuerpo en el texto a las palabras de Wittgenstein: «la filosofía no es una doctrina, sino una actividad». En efecto, su escritura se constituye en un ente vivo y en movimiento. Ese carácter autogenésico se debe a las captaciones de la «razón poética», que abarcan la rebeldía humana, la ebriedad ritual, los vislumbres del misterio y la disposición a transmitir el secreto y, por tanto, la voz y la palabra encarnada, unidas a la música, que, nos dice, es «la que vence al silencio antes que el logos». Cuando Clara Janés conoce a María Zambrano, ha reflexionado mucho sobre estas cuestiones y se siente afianzada e impulsada a profundizar. Resultado de sus conversaciones y lecturas son los textos recogidos en este libro.
La categoría de Dignidad es una de las piezas clave de la vida colectiva en las sociedades modernas. Pero no está exenta de debates y tensiones internas. Este libro se propone contribuir a su comprensión ofreciendo un recorrido filológico y filosófico de su compleja trayectoria. Los trabajos se extienden en un abanico que va desde el pensamiento clásico (Platón y Hesíodo) hasta el uso de la categoría en relación a los actuales movimientos migratorios, pasando por supuesto por los fundamentos de la modernidad en I. Kant y G.W.F. Hegel. El concepto de Dignidad es a la vez un logro histórico, un mandato moral, un propósito parcialmente incumplido y uno de los principios más elevados de nuestra modernidad política.
Abû Nsar al-Fârâbî (ca. 871-950) puede ser considerado como el verdadero fundador del sistema filosófico árabe. Representante de la Falsafa, movimiento filosófico que floreció y maduró en el mundo islámico como continuación del pensamiento griego, sus Obras filosóficas y políticas provienen de la preocupación por las dificultades políticas en el Estado islámico y destacan por el intento de introducir una consideración racional de la realidad en una sociedad estrictamente religiosa como la musulmana. Desde un espíritu reformador, al-Fârâbî propone un orden social, el ideal o virtuoso, en el que los ciudadanos puedan encontrar las mejores condiciones para que cada uno, en la medida de sus capacidades, logre su perfección última.
Desiderio Erasmo, más conocido como Erasmo de Rotterdam, uno de los personajes más influyentes en la Europa de su época, escribió Elogio de la locura en un contexto social y cultural convulsionado por la lucha entre la tradición medieval y las nuevas premisas que apuntaba el humanismo. A lo largo de esta obra que Erasmo dedica a su amigo Tomás Moro, parece querer convencer al mundo de que la Insensatez, la Estulticia o la Locura son el origen de todas las bondades, diversiones y deleites que el ser humano disfruta. Acompañadas de la ebriedad, la adulación, la pereza o la ignorancia, reclama sus méritos con desfachatez y gracia, en un discurso impregnado de ironía. Pero ¿qué pretende Erasmo con este elogio? ¿Qué esconde? ¿En qué consiste este juego de ingenio? ¿Es todo una burla? En Elogio de la locura Erasmo crea un espejismo seductor y contundente que, impregnado del humanismo cristiano que preconizaba, le sirve de excusa para describir la necedad del mundo y arremeter a dentelladas contra todo lo humano y lo divino.
Bien es sabido que Tomás Moro (1478-1535) no inventó la utopía como género literario, pero es innegable que su "Utopía" le ha dado el nombre. Tampoco se puede negar que, exista o no convergencia con sus planteamientos, la propuesta de Moro innovó significativamente la literatura política. "Utopía" es una crítica al orden social establecido en la Europa de la época, pero el sistema político que propone y describe minuciosamente en sus páginas es también una alternativa al mismo, de tal forma que, como señala Savater, la contradicción de la obra, y la nuestra propia, al considerar lo que en realidad es un ejercicio literario de denuncia moral como un programa político que, revolucionario en sí mismo, no admite la revolución ni la disidencia. El hecho de que Moro obvie en sus planteamientos el reconocimiento de la libertad humana confiere a "Utopía" la irracionalidad de la que huye, la imprevisibilidad que le niega el autor. Porque más allá de la utopía colectivista siempre está el ideal de la persona libre. Edición de Pedro Voltes.
La presente Hisotira de la Filosofía de Felipe Martínez Marzoa es una reelaboración de la obra del mismo título publicada por el autor en la Colección Fundamentos de esta editorial. En ella el profesor Martínez Marzoa se remite fundamentalmente a la obra original de los pensadores de que trata, y expone en cada caso la raíz histórica de los conceptos filosóficos básicos. La idea central del libro radica en que una historia de la filosofía ha de ser, ante todo, una investigación sobre la carta de naturaleza de sus propios conceptos. Nos encontramos ante un texto rigurosamente introductorio: no exige, por parte del lector, una previa cultura filosófica y filoló gica. Aunque si requiere, en cambio -puesto que intenta resolver cuestiones sin eludir dificultades-, una cierta aptitud para el esfuerzo intelectual.