Carmen Güell recrea en esta novela el fascinante destino de Germana de Foix, una reina olvidada que, sin embargo, pudo cambiar el futuro no sólo de España sino de todo un imperio. En 1505, su tío, el rey de Francia, acordó su matrimonio con el maduro Fernando el Católico, que acababa de enviudar de Isabel y buscaba desesperadamente un heredero para que Aragón consumara la separación de la corona de Castilla. Pero Fernando murió antes de que llegara el ansiado varón y la suerte le tenía preparada a Germana una rocambolesca vuelta de tuerca: cuando Carlos I llegó a España ambos se enamoraron apasionadamente. Él tenía diecisiete años y ella, que técnicamente era su abuelastra, veintinueve. Para acallar las habladurías, el emperador arregló su matrimonio con un hombre de su confianza y la nombró virreina de Valencia, donde tuvo que hacer frente a la insumisión y el bandolerismo y gobernó con extrema dureza hasta su muerte.
En la actualidad la violencia ha adquirido un gran protagonismo en la vida pública, hecho que se ha convertido en objeto de estudio por parte de sociólogos y políticos. Sin embargo, a diferencia de la opinión dominante, Robert Muchembled nos explica que la brutalidad y el homicidio iniciaron un descenso constante a partir del siglo XIII, lo cual parece abonar la teoría de «la civilización de las buenas costumbres», de la domesticación e incluso la sublimación progresiva de la violencia. ¿Cómo explicar esta incontestable regresión de la agresividad? ¿Qué mecanismos se pusieron en marcha Europa para disminuir la violencia? El control social cada vez mayor de los adolescentes varones solteros, así como la educación coercitiva de esos grupos de edad, son los elementos centrales de la explicación. La violencia masculina desaparece paulatinamente del espacio público para concentrarse en la esfera doméstica, mientras que la abundante literatura popular de la época -precursora de los medios de comunicación de masas actuales- asume un rol catártico: los duelos de Los tres mosqueteros, o el género policíaco surgido en el siglo XIX son una muestra de la sublimación de las pulsiones violentas. Sin embargo, parece que los primeros años del siglo XXI han presenciado un notable resurgir de la violencia, y por ello ?nos dice Muchembled- quizá debamos preguntarnos si el hombre volverá a ser un lobo para el hombre.
Se suele afirmar que el fascismo es un fenómeno antimoderno, enemigo declarado de la auténtica cultura. De acuerdo con esta premisa, el Tercer Reich, en su barbarie, habría acabado con el modernismo, y el fascismo italiano habría utilizado cínicamente a la vanguardia artística y a la elite tecnócrata para lograr sus propósitos reaccionarios. Sin embargo en este libro Roger Griffin ofrece un retrato convincente del fascismo en cuanto expresión «total» de modernismo por derecho propio. Como si de un cuadro modernista se tratara, este ambicioso libro transforma nuestra comprensión del arte, de la tecnología, del espíritu social y de la política de la primera mitad del siglo XX. Además, la edición española cuenta con un prólogo de Stanley G. Payne, uno de los historiadores hispanistas de mayor relevancia a nivel mundial.
Este libro proporciona una guía clara y bien documentada de la historia de Francia, desde la Baja Edad Media, con el surgimiento de un fuerte estado en la Isla de Francia, hasta los treinta años dorados que siguieron a la Segunda Guerra Mundial e incluyendo la presidencia de Mitterand. Proporciona el estudio disponible más actualizado y extenso de la historia de Francia. Entre los temas centrales del libro se encuentran la relación entre el Estado y la sociedad, el impacto de la guerra y preguntas cruciales como quién poseía el poder político, cómo se ejercía este poder, y en interés de quién y con qué consecuencias. Tiene en cuenta a los grandes personajes de la historia francesa y también los descubrimientos de los historiadores sociales modernos. Es una rica y amena guía de Francia para el estudiante y el lector en general.
El carlismo y sus rebeliones desencadenaron varias guerras civiles en la España del siglo XIX, y apoyaron sustanmcialmente la de 1936-1939. Ensombrecido a veces por la imagen de mero conflicto dinástico suscitado a la muerte de Fernando VII, en el carlismo se aglutinaban realidades históricas mucho más importantes. Así lo prueban las sublevaciones en el mundo rural, como la de los malcontents (agraviados) de Cataluña, la primera vez que se proclamaba rey al pretendiente don Carlos. El carlismo, un movimiento político y social nacido a comienzos del siglo XIX, y que ha estado presente de forma relevante en la historia contemporánea española hasta finales del siglo XX, tuvo como prinmcipales escenarios Navarra y Cataluña, y personajes clave como el coronel Tomás de Zumalacárregui, que derrotó en varias ocasiones a las tropas liberales, o Rafael Maroto, que, con Baldomero Espartero, firmó el célebre Convenio de Vergara que puso fin a la primera guerra carlista. "El carlismo y las guerras carlistas" aborda la complejidad socio-política-ideológica de este movimiento, descartando dos de las interpretaciones fundamentales que se han hecho de él: el intento de magnificarlo como un fenómeno «genuinamente español» y su consideración como simple «resistenmcia reaccionaria» al progreso. Producto de la reflexión y la investigación de los tres especialistas en la materia más destacados en la actualidad Julio Aróstegui, Jordi Canal y Eduardo González Calleja, se trata de una obra escrita con objetividad y el máximo rigor.
La trepidante acción de El primer naufragio, entre la ejecución de Luis XVI y el triunfo del golpe de Estado jacobino, transcurre en menos de cuatro meses y medio plagados de motines urbanos, reveses militares y trifulcas parlamentarias. Su tesis se proyecta, sin embargo, sobre más de dos siglos de conflictos entre la democracia y los proyectos totalitarios que han pretendido o logrado destruirla. Es por tanto un libro de Historia a la vez académico y periodístico pero también una advertencia de plena actualidad sobre los riesgos que para la causa de la libertad entraña una dinámica política dictada desde la calle, cuando una minoría organizada trata de imponer su ley a una mayoría desvertebrada y acomodaticia. En medio del abigarrado retablo de personajes de la Revolución Francesa se van sucediendo escenas y situaciones que hemos visto reproducirse una y otra vez hasta nuestros días: la deslegitimación de las instituciones representativas, el recurso a la coacción y la violencia, la explotación de la crisis económica por la vanguardia revolucionaria, el influjo del miedo en la vida cotidiana y el deslizamiento hacia el conformismo del mal menor que desemboca en la toma del poder por la fuerza. Este libro rompe con la historiografía tradicional que ha venido presentando lo ocurrido en la primavera de 1793 en París como la pugna entre dos partidos homologables Jacobinos y «Girondinos» que terminó con el triunfo de la izquierda sobre la derecha. La minuciosa reconstrucción de los hechos demuestra que sólo los primeros constituyeron un partido digno de tal nombre y que fue, precisamente, la incapacidad de los líderes moderados de organizarse para defender la democracia lo que les llevó a ellos al patíbulo y a Francia a la dictadura del Terror.
18 de julio de 1936. Por toda España se alzan guarniciones contra el gobierno del Frente Popular. Entre los sublevados se encuentran los escasos cadetes de la Academia de Infantería de Toledo y el contingente de la Guardia Civil. Pero en la capital manchega el alzamiento fracasa y éstos tienen que refugiarse en el Alcázar una simbólica fortaleza del siglo XIV y sede de la academia. Empieza entonces el asedio más famoso del sangriento conflicto. Esta es la primera gran historia fotográfica sobre aquellos terribles meses de asaltos, minas y contraminas, bombardeos aéreos, acciones heroicas de ambos bandos, traiciones, sacrificios Un libro único que nos transporta, con toda su viveza y crudeza, a uno de los episodios más dramáticos de la Guerra Civil española gracias a más de 250 fotografías, esquemas y mapas muchos de ellos inéditos hasta la fecha, setenta y cinco años después de la «liberación», en septiembre de 1936, del Alcázar de Toledo.
De Breve Historia de España se ha dicho que es el best seller más importante de la historiografía española de los últimos años. Su impacto se reflejó pronto no sólo en las numerosísimas reimpresiones del libro y en la multiplicación de lectores en todo el mundo, por las traducciones que de él se han hecho, sino también porque su éxito volvió a poner de moda la historia de España. Un admirable dominio del arte de la síntesis, un estilo ameno y directo y la reivindicación de la realidad histórica de España dan razón de la popularidad del libro. En esta última edición de Breve Historia de España se ha ampliado el número de páginas para incorporar la reflexión sobre los últimos acontecimientos y mantener el compromiso de los autores de llevar al presente la meditación histórica, llamando a las cosas por su nombre. Incorpora un práctico índice onomástico.