Ir al contenidoHistoria contemporánea hasta el siglo xx: c. 1700-c. 1900
La patria no se hizo sola, la soñaron unos cuantos, y la ganaron después, unos hombres a caballo
los versos de León Benarós y Waldo Belloso puestos en la voz del inmortal Jorge Cafrune sintetizan de una forma poética buena parte de lo que significaron las revoluciones de independencias iberoamericanas: su proceso histórico, su complejidad, sus fases, la participación popular, la omisión durante muchos años de la misma, sus actos revolucionarios, sus protagonistas
Esta obra colectiva plantea estos problemas desde la más novedosa renovación historiográfica. Tema, el de las independencias, que se inscribe dentro de los grandes cambios universales que sacudieron el mundo occidental desde el último tercio del siglo xviii hasta mediados del siglo xix.
Mike Davis examina una serie de sequías inducidas por el fenómeno ?El Niño? y las hambrunas que éstas provocaron por todo el globo terráqueo en el último tercio del siglo XIX. Davis revela que hubo una relación íntima y funesta entre la arrogancia imperial y los fenómenos naturales que causó varias de las peores tragedias de la historia de la humanidad y plantó las semillas del subdesarrollo en lo que después se ha llamado el Tercer Mundo. «Davis nos ha dado un libro muy relevante para el período contemporáneo y de gran interés histórico» (Amartya Sen). «Una crónica magistral de la historia climática, económica y colonial» (New Scientist). «Muchas generaciones de historiadores han ignorado en gran medida las implicaciones [de las grandes hambrunas de finales del siglo XIX] y hasta hace poco las desestimaban por considerarlas ?accidentes climáticos?... Los holocaustos de la era victoriana tardía les muestra cuán equivocados estaban» (Mejor libro del año 2001 del Los Angeles Times). «Davis, un investigador brillante e independiente, sitúa el triunfo del imperialismo occidental de finales del siglo XIX en el contexto de los catastróficos patrones climáticos de El Niño de la época... Es completamente innovador y ensancha nuestras fronteras mentales» (The Independent). «Convence e informa ampliamente... un logro extraordinario» (The Times Literary Supplement).
El catalanisme que vinculava bona part de la intel·lectualitat dels anys vint i trenta del segle passat va projectar una peculiar imatge del poble jueu. Linterès per les qüestions jueves era comú a lEuropa del moment i va arribar a Catalunya per la modernitat de la seva premsa i per lexistència dun ambient favorable a aquesta temàtica. El discurs catalanista, diferent segons cada sector, va referir-se al perill de lantisemitisme, a les esperances duna nova llar nacional i a tota mena de qüestions religioses, culturals i lingüístiques. El catalanisme republicà va presentar-se com a amic dels jueus i amb simpaties pel seu projecte nacional. El regionalisme de matriu conservadora i catòlica, en canvi, va ser més ambigu i contradictori. Igual que en el cas del catolicisme, analitzat al llibre Els catòlics catalans i la qüestió jueva (1917-1939), les referències catalanistes van ser nombroses i variades. Lapassionat debat que es va generar, amb la participació de les principals plomes del país, demostra com aquella realitat prou desconeguda esdevenia un element més de la discussió política, social i cultural daquells anys tan convulsos.
Para comprender los complejos procesos que se desarrollan en el continente africano y que asaltan periódicamente los titulares de los medios de comunicación es necesario profundizar en su peculiar pasado, especialmente en el más reciente. La presente obra se ocupa de la historia de África desde 1800, fecha en la que la mayor parte del interior del continente era ya conocido, pero en la que aún no se había iniciado el gran proceso colonizador que alteraría sustancialmente las relaciones de poder y las estructuras económicas. Roland Oliver y Anthony Atmore sitúan África, y no a sus invasores, en el centro de este estudio, dividido en tres partes. La primera describe la historia precolonial del continente, la segunda trata temáticamente de la partición y el régimen colonial y la tercera aborda el surgimiento de los Estados «nacionales» modernos. La presente edición abarca los acontecimientos ocurridos hasta mediados de los años noventa, da cuenta completa de las nuevas perspectivas derivadas del fin de la Guerra Fría y examina las tendencias demográficas, una de las principales causas de los problemas que sufre el África actual.
Las líneas maestras del pensamiento progresista español se forjan en las primeras décadas del siglo XIX, en una época caracterizada por guerras, persecuciones y exilios masivos. Convencidos de que necesitaban disociar sus ideas de Francia, los progresistas ensayaron diversas estrategias para arraigar su proyecto en la tradición nacional. Comuneros y fueros medievales representan para ellos una idea pactada de la monarquía, pero también el respeto a una diversidad regional intrínseca que las dinastías extranjeras de los Austrias y los Borbones, con el apoyo decisivo de Castilla, habían intentado erradicar. Asimismo, al-Andalus, el enemigo por antonomasia de lo español tal y como se había entendido hasta entonces, pasa a simbolizar una España alternativa que, según los liberales, nunca habría debido desaparecer. Una España que era significativamente similar a la que ellos pretendían construir.ÍndiceIntroducción. El pasado como futuro: la invención de una España alternativa.-Capítulo 1. La conflictiva relación de los liberales con el pueblo.-Capítulo 2. El mito de los comuneros y de los fueros medievales.-Capítulo 3. El mito de al-Andalus.-Capítulo 4. Extranjeros en su patria: Blanco White y Larra.-Conclusiones.-Bibliografía.-Índice onomástico.