Ir al contenidoHistoria antigua: hasta c. 500 e. c.
La actuación de los pretorianos estuvo marcada por el heroísmo y la traición. Su poder creció hasta convertirse en la llave de la política de Roma y no tardaron en aprovecharse de ello. Su preparación era la mejor, sus medios ilimitados y su capacidad no tenía igual. No existían soldados más diestros entre las tropas romanas. Este es un relato épico sobre la guardia imperial, los guerreros seleccionados para proteger la integridad del Estado cuyo destino estaba en sus manos. Siempre preparados para neutralizar cualquier amenaza, quizá salvaron la vida a tantos emperadores como a los que se la arrebataron. Roma. En la residencia palatina, el soberano del más grande imperio occidental ni siquiera se permite pasear por sus jardines sin ser vigilado. El poder genera ambición por ocuparlo, y no había mayor poder en la Antigüedad que el emperador. Las campañas fronterizas contra los germanos o los partos suponen un peligro adicional. Nunca sus enemigos extranjeros tendrán otra oportunidad como esa para tratar de acabar con su vida. En realidad, no existía un lugar totalmente seguro. Los pretorianos surgieron con una única y difícil misión, proteger su vida y la de su familia allí donde se encontraran. Estrictamente escogidos entre los mejores soldados de todo el imperio. Entrenados diariamente para cumplir su cometido. Miles de soldados de elite estaban a las órdenes de la casa imperial, acuartelados en el Castra Preatoria. Los pretorianos surgieron como unidad militar el 27 a.C. y se mantuvieron en su puesto hasta el 312 d.C., más de tres siglos de historia donde compartirían funciones con los guardias germanos y los más expertos jinetes de la guardia real antes de que Constantino dictara su disolución. Ningún soberano fue tan audaz como para presentarse en combate sin tenerlos cerca. Si sus oponentes amenazaban con obtener la victoria esa era el momento para que actuaran mientras el resto de soldados contemplaban como conseguían cambiar el destino de la batalla hasta destruir a sus enemigos. Arturo Sánchez, especialista en Historia Antigua y Militar ofrece la primera obra extensa sobre los pretorianos en nuestro idioma. Se mostrará su entrenamiento, tácticas, cuadros de mando y privilegios; su actuación en el frente y en la capital del imperio, no solo como soldados sino, incluso, como verdugos o espías. Se estudiará en detalle el campamento militar más importante de Roma, cuyos muros aún se levantan imponentes tras dos milenios. Todo ello tras una ardua y exhaustiva investigación para mostrar por fin la completa Historia de uno de los cuerpos militares de elite más importantes del mundo, aquellos que controlaron el devenir del imperio.
Grandioso fresco que retrata la turbulenta historia de Roma durante el medio siglo correspondiente al gobierno de los emperadores Julio-Claudios, los " Anales " de Cornelio Tácito (ca. 56-117 d.C.) constituyen uno de los pilares fundamentales de la historiografía clásica. Es principalmente a esta obra a la que deben su notoriedad ciertos acontecimientos y anécdotas de esa época, tales como la misteriosa muerte de Germánico, la estancia de Tiberio en Capri, el envenenamiento de Claudio o el matricidio de Nerón. La personalísima interpretación de los hechos orientada a dejar bien sentada la perennidad del Imperio y la gloria de Roma, a pesar de la ineptitud y brutalidad de los dueños del poder, ha ejercido, sin embargo, una enorme influencia en la historia del pensamiento político. Traducción e introducción de Crescente López de Juan
Adoptando un acercamiento «decididamente pagano», que abandona desde un principio el concepto de «religiones» mistéricas, la presente obra quiere esbozar una fenomenología comparada de los cultos mistéricos de la Antigüedad. En la época precristiana, las diversas formas de culto, incluidos dioses nuevos y extranjeros en general, y la institución de los misterios en particular, nunca fueron excluyentes; aparecen como variantes, corrientes u opciones diversas dentro del conglomerado único, dispar y sin embargo homogéneo de la religión antigua. El análisis de Walter Burkert se centra en cinco de estas formas: los misterios de Eleusis, los misterios dionisiacos, los de Méter, Isis y Mitra. Fruto de un ciclo de conferencias, las documentadas interpretaciones de Burkert transmiten de forma clara, atractiva y rigurosa «la experiencia extraordinaria» encarnada en los misterios.
Cuenta la Legenda Aurea de Jaime de Vorágine que, en una de las hambrunas que afligió la ciudad de Myra, el obispo Nicolás (San Nicolás de Bari, c. 270 ? c. 343) persuadió a varios navegantes que llevaban trigo desde Alejandría a la corte del emperador para que le cedieran una parte de la carga. Cuando llegaron a Constantinopla los marineros quedaron atónitos al comprobar que el peso del flete no había menguado. Mientras los oficiales del emperador recibían el cargamento intacto, el trigo desembarcado en Myra se multiplicaba prodigiosamente hasta alimentar la ciudad durante dos años.
Si bien la finalidad que mueve a Plutarco a la composición de sus "Vidas paralelas" es fundamentalmente ilustrar sus ideales éticos, el rigor de su método, la claridad de su exposición y el conocimiento de fuentes hoy perdidas para nosotros las convierten en un precioso documento para estudiar la historia de Grecia y Roma. Las biografías que aparecen traducidas en este volumen forman un vívido drama en cuatro actos del auge y declinar de la más gloriosa ciudad de Grecia, Atenas.
La cultura occidental descansa en el pensamiento griego, que fue recogido y ordenado en la Biblioteca de Alejandría, por lo que pocas instituciones culturales han sido tan útiles a la cultura universal como ella, que salvó la producción escrita grieg
La literatura científica actualizada sobre las primeras manifestaciones artísticas de la Humanidad, o Arte Prehistórico, se halla dispersa en un sinfín de tratados y publicaciones específicas. Este Manual de arte prehistórico viene a llenar un vacío existente en la bibliografía, puesto que recoge toda esa documentación producida durante más de un siglo de investigación. Nos ofrece la información más clásica pero sin dejar de lado las aportaciones más novedosas y recientes que se están llevando a cabo en estos tiempos, sacando a la luz los últimos resultados que la renovación metodológica está propiciando y planteando las bases de indagación futura en un universo que está aún por descubrir. Es un texto que nos introduce en todos los sistemas de comunicación gráfica y expresiones artísticas creadas por las distintas sociedades humanas anteriores a la necesidad del desarrollo de la escritura, o sea una gran parte de la Historia. En estas páginas podremos hacer un recorrido secuenciado desde los primeros indicios de figuración y la explosión artística de las comunidades de cazadores-recolectores del Paleolítico Superior de Europa hasta el arte de las sociedades más estructuradas de la Península Ibérica. Sus contenidos están expuestos de manera que el acceso sea rápido y fácil, aderezado con abundantes ilustraciones, lo cual favorece al lector universitario y a quienes quieran aventurarse en un área de conocimiento que, por lo general, resulta tan desconocida como apasionante.
En este libro se abordan aquellos aspectos generales de la cultura egipcia en los que la investigación reciente ha podido añadir algo, a veces sólo matices, a veces alguna consecuencia importante. No se trata de negar los aciertos de los grandes maestros, sino de evitar ciertos mitos de la propia disciplina. Se ofrece, así, una visión actualizada sobre la civilización egipcia, pero sin buscar la exhaustividad, destinada tanto al estudioso como al curioso, tanto al alumno de los nuevos grados de Historia, Arqueología y Arte, que incluyen en sus planes de estudio asignaturas como «Civilizaciones de Egipto y Próximo Oriente», como al público en general. No es, por tanto, un manual al uso, en sentido estricto, sino más bien un ensayo sobre ciertos aspectos concomitantes entre el Estado, la religión y la economía. Se hace hincapié, y de manera extensa, en lo relacionado con las creencias egipcias, porque en Egipto la religión lo impregnaba todo. Se ha intentado que sea un libro de fácil lectura, desprovisto de abrumadoras notas, pero con referencias a una extensa bibliografía, importante para aquellos que deseen profundizar en esta apasionante disciplina.
l imperio romano duró diez siglos y desde su capital, Roma, se adueñó de todo el orbe conocido y desarrolló un sistema político, económico y social sin precedentes.