En Final en Berlín, Heinz Rein conduce al lector a las entrañas de la ciudad de Berlín, en abril de 1945, bombardeada y sumida en el caos total, ante el inminente colapso de Hitler y los suyos. De manera desesperada, el régimen nazi procura aferrarse al poder, e incluso en lo que serían sus días finales, las fuerzas de seguridad y la Gestapo continúan sembrando el terror, buscando judíos, disidentes y desertores. Creando con maestría una atmósfera de paranoia y sospecha absolutas, Rein relata la situación de una pequeña célula de resistencia, trasladando a los lectores a las entrañas mismas del hundimiento del nazismo, en una magistral novela cuyo principal protagonista es la ciudad de Berlín, en uno de los períodos más trágicos y virulentos de su larga historia.
"Sueños de invierno" es un reflejo de la época del jazz y los locos años veinte, una denuncia del sueño americano. Retrata el ascenso social del joven Dexter Green y su deseo por la hermosa Judy Jones. Fitzgerald publicó este cuento en 1922 en la revista Metropolitan. El propio autor lo describió como el primer borrador de "El gran Gatsby", su obra maestra. "Sueños de invierno" es un experimento logrado: las diferencias sociales, el valor del dinero, la búsqueda de la belleza y la quiebra de los ideales son los temas centrales de esta historia de amor y ambición, dramática y tierna, sarcástica y delicada, que Fitzgerald construyó con una prosa preciosista, que destila emoción, llena de sugerentes imágenes, pero también fresca, liviana, cínica y desencanta.
Lanny Budd es en 1930 un marchante de arte casado con la heredera más codiciada de Estados Unidos. Vive apaciblemente en Cannes y ha salido mejor parado del crac del 29 que otros. Pero su hermana es la esposa de un afamado violinista judío alemán, y en Alemania corren tiempos inciertos. A pesar de su fama de bon vivant de la Riviera, el joven Lanny no dudará en convertirse en espía contra el gobierno de Hitler cuando descubre el peligro que corren los suyos. Por ello, el señorito Budd habrá de acercarse a los nuevos amos del país: al mariscal Goering, al esmirriado Goebbels y al mismísimo Führer. Todo vale con tal de provocar la caída del enemigo. Con Los dientes del dragón, tercera entrega de la saga de Lanny Budd, Upton Sinclair ganó el Premio Pulitzer en 1943.
Un viejo faquir encara su última actuación en una discoteca de mala muerte; el paisaje australiano se vuelve un infierno para un escritor frustrado que sobrevive en la carretera como vendedor de cosméticos; una pareja de forasteros monta una librería en un pueblo anodino y allí pierde las tardes un niño de nueve años que será testigo de hechos prodigiosos; el poder de la música subyuga a un viejo neurólogo y lo empuja a cometer un crimen propio de Mefisto; un general se ve enfrentado a su hijo revolucionario sin vuelta atrás; una mañana de cacería en la sierra se transforma en una película de terror; un humilde alemán refugiado en la Patagonia oculta en su biografía una página de heroísmo contra el III Reich; Florencia será el idílico escenario de un certamen de piano que supone un esfuerzo titánico para cierto participante. Estos y otros tantos personajes pueblan este libro de Emilio Aragón, seres anónimos a quienes la vida coloca en circunstancias extremas, juguetes de la pasión y de sus sueños. Decía Stanley Kubrick que «si el hombre se sentara y pensara en su fin inmediato y en su horrible insignificancia y soledad en el cosmos, seguramente se volvería loco». Sin embargo, estos relatos demuestran que los seres, haciendo pie en su nimiedad, pueden crecer o disminuir según la voluntad con que dominen la trama de su vida, y así logran dar un sentido a la experiencia incluso contra el indiferente azul del cielo.
La frase que Jesús le dijo tras resucitar a María Magdalena para que no se acercara a él, da por título a la nueva novela del genial creador siciliano, una exploración en la apasionante vida de Laura, una joven experta en historia del arte que desaparece en oscuras circunstancias y a la que el sagaz comisario Maurizi tratará de encontrar. Pero seguir la pista de Laura se convertirá en mucho más que una carrera contrarreloj.
En esta novela basada en hechos reales Álvaro Colomer reconstruye en clave de ficción uno de los episodios más controvertidos de la guerra de Irak: el papel de las tropas españolas en la batalla de Najaf.Un convoy militar atraviesa el desierto. Niños iraquíes saludan desde el arcén; a sus espaldas, pozos de petróleo en llamas, carros de combate calcinados y un paisaje cuarteado como el vientre de un reptil moribundo. La brigada española Plus Ultra II se dirige a la ciudad santa de Najaf, donde compartirá acuartelamiento con unidades de otros países. Todo transcurre con normalidad en la base Al-Andalus, hasta que un día el autoproclamado ejército del Mahdi asalta el cuartel español, dando inicio a la batalla de Najaf. Es el 4 de abril de 2004 y ha pasado un año desde la invasión de Irak. España se encuentra en pleno proceso de transferencia de poderes: tras los atentados del 11-M, el Partido Popular ha perdido las elecciones y el PSOE aún no ha tomado posesión de la cartera de Defensa.¿Se cruzó de manos el alto mando de la Brigada Plus Ultra II mientras las otras unidades luchaban para defender el cuartel? ¿Se negó el gobierno en funciones a tomar decisiones durante el enfrentamiento? ¿Por qué se ha silenciado una de las batallas recientes más importantes del ejército español?Esta novela construye una ficción con los acontecimientos y el autor advierte: en la guerra, como en la literatura, hay tantas verdades como puntos de vista.De la obra anterior del autor se ha dicho:«Es un libro extraordinario. Tocamos el mal en cada página, la angustia, el egoísmo. Ya no se escriben libros como estos, es decir, libros [...]. Magistral.»Lector Mal-herido«Un texto soberbio, de una intensidad inusual que no decae nunca.»Fernando Aramburu«He aquí un libro que nos recuerda lo que, en otro tiempo, se llamaba el oficio de periodista.»Cultura/s (La Vanguardia).«La obra de Colomer emana sensibilidad y sarcasmo a partes iguales.»Qué Leer«Una obra maestra [...] que resuena con verdades universales.»The Irish Times«Las novelas de Colomer siempre son engañosamente pesimistas y dolorosamente ancladas en hechos reales.»La Razón
Antes de que la adaptación cinematográfica de Mystic River lo lanzara a la fama, Dennis Lehane ya se había afianzado como uno de los autores más destacados del género negro gracias al ciclo de los detectives bostonianos Patrick Kenzie y Angela Gennaro. Sin embargo, ha sido en la última década cuando su enorme talento para desarrollar historias de gran tensión y complejidad psicológica le ha procurado un aluvión de premios y ha convertido sus novelas en una inspiración constante para Hollywood, hasta consagrarlo definitivamente con series tan prestigiosas como «The Wire» y «Boardwalk Empire». Sin duda, no hay en la actualidad ningún escritor que retrate con mayor verosimilitud el mundo de los gángsters en Estados Unidos durante la primera mitad del siglo XX, y esta electrizante novela que cierra la trilogía de Cualquier otro día y Vivir de noche es la mejor prueba de ello. Padre de un niño de diez años al que adora, el antaño todopoderoso Joe Coughlin casi ha logrado cortar amarras con su turbulento pasado, aunque no del todo, pues ejerce de consejero del importante clan mafioso de los Bartolo. Pese a ello, lleva una vida más o menos tranquila hasta que dos hechos inquietantes vienen a perturbarla: la aparición del fantasma de un chico que le resulta vagamente familiar, y, mucho más grave, el soplo de que alguien ha puesto precio a su cabeza y planea matarlo durante el Miércoles de Ceniza. Así pues, entre su tarea de mediador entre clanes mafiosos al borde del conflicto y sus pesquisas para descubrir quién quiere acabar con él, Joe se verá retrotraído a los viejos tiempos, aquellos años de traiciones y venganzas, bañados en sangre, donde cada día podía ser el último. Y es que tal vez haya llegado al fin la hora de pagar por sus pecados.
Una novela intimista y sentimental que logra emocionar y enganchar desde la primera página. Para los nostálgicos, que escuchaban el programa de Elena Francis, y para los amantes de una buena historia en general. La maravillosa prosa de Ángeles Doñate se pone de nuevo al servicio de una historia donde las cartas vuelven a ser las protagonistas. La vida de una locutora de radio, que responde cartas sentimentales en antena, y las de varios de sus oyentes se entrecruzan en una historia de amor, desamor, malos tratos y soledad situada en la Barcelona de finales del franquismo e inicio de la democracia. Cuando Aurora se convierte en la nueva voz de Elena Francis se encuentra con una gran responsabilidad. Por un lado, debe impedir que Elisa, una joven de diecisiete que ha anunciado su intención de quitarse la vida, se suicide. Por otro, llenar la vida de personas solitarias como Germán, quien escucha el consultorio a diario. Lo que nadie sabe es que Aurora es tan infeliz como muchos de sus oyentes y que acaban de romperle el corazón. Un día se pregunta dónde van a parar las cartas que no llegan a sus manos, y descubre que las queman. Muchas muestran una realidad fea, llena de violencia doméstica y represión política que los anunciantes no quieren que se asocie al programa. Aurora, indignada, se lleva todas las cartas que puede a su casa para responderlas en sus horas libres. Tras muchos años de vacío emocional, encuentra un sentido a su vida.
Alex es un padre de treinta y tantos años. Quiere a su esposa, Jody, pero ha olvidado cómo demostrárselo. Quiere a su hijo, Sam, pero no lo entiende. Su matrimonio va a la deriva. Jody es una mujer cansada de educar sola su hijo. Recrimina a Alex que solo viva para su trabajo. La ruptura no tiene vuelta atrás. Sam tiene ocho años. Es maravilloso, sorprendente..., pero para él, el mundo es un rompecabezas que tiene que aprender a montar solo. Sus problemas de comportamiento han provocado muchas tensiones entre sus padres que llegan a separarse. La vida de Alex carece de sentido. Busca desesperadamente la manera de reconstruirla y de relacionarse con Sam. Para su sorpresa, descubre la pasión de Sam por el videojuego Minecraft. El juego les va a permitir encontrar a ambos un lugar en el que comunicarse y entenderse, redescubrirse cada uno; un lugar en el que establecer una relación más profunda entre los dos y cada uno consigo mismo. ¿Podrá esta familia fragmentada reconstruirse poco a poco, ladrillo a ladrillo? " El niño que quería construir su mundo " es una novela llena de emociones y muy divertida a la vez, a pesar del tema que aborda. Escrita con el corazón, inspirada en la experiencia personal del autor con su hijo, es una novela que hace reír y llorar al mismo tiempo.
Tras el fulgurante éxito de Mis amigos, su segunda novela, Armand, publicada tres años después, supuso la consagración de Emmanuel Bove en la Francia del periodo de Entreguerras. En esta obra su protagonista, Armand, vive con su amante Jeanne, una mujer mayor que él y en buena posición económica. Sin embargo, tras reencontrarse con su viejo amigo Lucien, después de una larga separación, se enamora de su hermana Marguerite. De repente Armand siente una extraña atracción por los viejos tiempos de su amistad con Lucien, cuando ambos vivían en la pobreza y él se hallaba muy lejos de la vida burguesa que ahora comparte con su amante. La prueba evidente de esa atracción es que se haya enamorado de Marguerite.
Berta cree que está predestinada a que en su vida sólo sucedan cosas desagradables, por lo que busca algo que pueda proporcionarle una visión diferente de la realidad. Su madre se esconde en una apariencia y unas decisiones que no siempre reconoce como propias. En sus vidas se cruza un hombre que se presenta como el prestigioso artista mexicano Vicente Rojo y desencadenará un sorprendente juego de identidades en el que es difícil reconocerse o diferenciar lo que está a nuestro alcance de lo que es imposible: una enigmática lección de vida. «Yo puedo decir que no sólo he alcanzado la paz, sino que he hecho una gran labor. He trabajado mucho por la cultura, ha sido lo único que me ha interesado. No conozco sensación más placentera que la de leer un buen poema, escuchar música o mirar una pintura bella. Ése es el único significado de todo, el lugar del que fuimos expulsados y que nos pasamos toda la vida buscando».
«Te doy todo este libro para que aparezcas», dice el protagonista. Se ha escapado, mantiene una relación con el pasado, pero el pasado ya no está. La parte escondida del iceberg es la reconstrucción amorosa de un ser excepcional. Un escritor perdido en París; la ciudad le pesa, solo la necesita para encontrar los recuerdos, como migas de pan, de aquello que fue. Para eso debe atravesar un invierno de recuerdos. Se adentra en un territorio desconocido, devastado además por una tormenta emocional, una ruptura que arrasó su paisaje interior hasta hacerlo irreconocible. Un inventario de mentiras que le contaron y de las verdades que no quiso aceptar. Este es un libro sobre la vida, a medio camino entre el recuerdo y la superación del dolor; habla de las risas, de las amistades, de la noche, los días? y de ese lado vacío de la cama que se queda para siempre ocupado de recuerdos. Un libro que nos revelará muchas cosas de nosotros mismos.
París, 1945. En la iglesia de Saint-Pierre-de-Chaillot, ubicada en uno de los barrios más elegantes de la ciudad, se celebra un funeral. La difunta es la princesa Natalie de Lusignan, duquesa de Sorrente, que ha fallecido demasiado joven. Ante los asistentes, el joven sacerdote loa a la muerta como esposa, madre y cristiana ejemplar. ¿Lo fue? La guerra y la ocupación nazi supusieron una dura prueba para todos los franceses, también para la clase más privilegiada, que creía poder seguir viviendo aislada de las miserias del mundo. Natalie se mueve por los salones de la aristocracia como pez en el agua, pero es también una mujer mundana, esnob y cosmopolita, que en los años de entreguerras ha financiado a artistas como Buñuel y Cocteau para que puedan rodar sus películas e incluso ha participado en una pequeña escena en La sang d?un poète de este último. Ante el avance de los nazis, la familia abandona París y se traslada a la Riviera. En Cannes, «en la zona no ocupada, nada más firmarse el armisticio de junio de 1940, todas las mujeres estaban disponibles. (...) Reinó en el aire una urgencia que movía a la gente a pasárselo bien a toda costa antes de la postrera catástrofe: la llegada de los bárbaros. (...) Los casinos permanecían abiertos durante toda la noche y los escotes, a la hora de las primeras estrellas, nunca se habían semejado tanto a invitaciones abiertas». Natalie vive una aventura extramatrimonial y se queda embarazada. El asunto se tratará con discreción, porque «son cosas que pasan». Pero lo que sacudirá su vida de manera irremediable será descubrir, tras la muerte de su madre, un secreto familiar que la afecta directamente. Esta fascinante novela retrata un mundo glamouroso y sofisticado sacudido por la Historia, y en ella asoman figuras como Sacha Guitry, Édith Piaf, Jean Gabin, Gérard Philipe, Coco Chanel, Paul Morand, Ernst Jünger, y también Reynaldo Hahn y otros amigos judíos de Proust en busca de salvoconductos. Pero sobre todo retrata de un modo prodigioso a una mujer contradictoria e imperfecta que se enfrenta a una decisión dramática.
Como si fueran figuras de ajedrez, la familia Romanov se prepara en silencio para un nuevo traslado. Alejandra, la zarina, sueña con ver a sus cuatro hijas casadas. Tras la abdicación del zar, ya no tiene grandes pretensiones para su pequeño Alexis, más allá de una vida tranquila y alejada del mundo. Echa de menos a su amigo Rasputin, el hombre que más la comprendió después de su amado Nikki. En su última morada y sin más que hacer que esperar su liberación, Alejandra satisface la curiosidad de sus hijas por su pasado. De esa manera reconstruye una vida marcada por la desgracia; pero también plena de felicidad porque el amor que se profesaron ella y Nikki, y que transmitieron a sus hijos, fue el bastión que los mantuvo unidos y fuertes hasta su trágico final.