Veintitantos años después de que Aristóteles replantease en sus mejores términos el problema socrático de la relación entre el conocimiento de lo moralmente correcto y la moralidaddel cognoscente, Dietrich von Hildebrand intenta en esta obra salir por fin del círculo vicioso al que ese problema ha conducido siempre a la filosofía: que, para ser moralemente bueno es preciso saber cómo se debe obrar, pero, para saber cómo se debe obrar, es preciso, a su vez, ser moralmente bueno. Y en su intento descubre al mismo tiempo la mejor explicación conocida hasta hoy del singular fenómeno de la ceguera para los valores.
Al mismo tiempo reúne dieciséis ensayos y conferencias escritos en los últimos años de vida de Susan Sontag, una de las pensadoras y escritoras más importantes del siglo XX. «Un escritor es alguien que presta atención al mundo», expuso Susan Sontag en su discurso de aceptación del Premio de la Paz que le otorgó la Asociación de Libreros Alemanes en 2003, y nadie sirvió de mejor ejemplo de esta definición que ella. La inteligencia incisiva de Sontag, su brillantez expositiva, su profunda curiosidad por el arte, la política y la responsabilidad testimonial del escritor le han asegurado un lugar entre las pensadoras y escritoras más importantes del siglo XX. Al mismo tiempo reúne dieciséis ensayos y conferencias escritos en los últimos años de su vida, cuando su obra era objeto de reconocimiento en el ámbito internacional; estos ensayos reflexionan sobre la naturaleza liberadora de la literatura -su compromiso más profundo-, sobre el activismo político y sobre la resistencia a la injusticia como deber ético. Discurren sobre la obra de diversos escritores, desde el poco conocido novelista soviético Leonid Tsipkin (que pugnó por -y por fin logró- publicar su único libro unos días antes de morir), hasta los grandes, como Nadine Gordimer, que acrecienta nuestra capacidad para el juicio moral. Reseña:«Se diría que Susan Sontag es como Oscar Wilde, a quien tanto admiraba: el mismo esteticismo, pero militante.»Enrique Lynch, Babelia, El País
La mentira, para ser efectiva, tiene que disfrazarse de verdad. Una ideología es un conjunto de ideas que pretenden interpretar la realidad y gobernar el comportamiento de las personas. La ideología dominante, también llamada ?pensamiento único políticamente correcto? persigue determinados fines, que favorecen a ciertos grupos de la sociedad en detrimento de otros. Para ser creíble intenta disfrazarse de ciencia. En este libro buscamos dejar en claro lo que dice la ciencia sobre algunos temas controvertidos, en contraposición con las afirmaciones de la ideología. Esta edición ha contado con el impulso de la Fundación Cultural Ángel Herrera Oria
PREMIO PRINCESA DE ASTURIAS DE COMUNICACIÓN Y HUMANIDADES 2015 PREMIO NACIONAL DE LAS LETRAS ESPAÑOLAS 2014 Memoria de la ética es uno de los textos clave de Emilio Lledó, gran exponente de la filosofía contemporánea ¿Cómo organizar la posible felicidad individual, el Bien de cada persona junto al Bien de los otros? ¿Cómo luchar por ser bueno en un mundo malo? Los griegos que, hace veinticinco siglos, inventaron la palabra y el contenido de la democracia, crearon también los dos términos que representan esa inmensa revolución humana: la Ética y la Política. Este libro trata de ellas, de su indisoluble unión y de su origen, e intenta mostrar la sombrosa modernidad de su mensaje. Pretende leer las páginas clásicas recobrando sus esenciales latidos, penetrando la lozanía e inmediatez de su maravilloso lenguaje y olvidándose de la terrible costra de ideologías y terminologías que cierta tradición ha aplastado sobre el libre fluir de estos textos. Emilio Lledó es un filósofo capaz de otorgar a la filosofía una dimensión práctica y de construir puentes entre los filósofos clásicos y nosotros. Su vocación docente consigue que sus libros estén al alcance de cualquier lector interesado en la filosofía, el lenguaje y la moral. «Pensador de relevancia internacional y de trayectoria ejemplar en el ámbito de las humanidades, concibe la Filosofía como meditación sobre el lenguaje y subraya la tendencia natural del ser humano hacia la comunicación. [...] Hace suya la razón ilustrada a través de un diálogo que impulsa la convivencia en libertad y democracia.» Del acta del Jurado del premio Princesa de Asturias «Por su pensamiento y dilatada obra, que armoniza la filosofía del Logos, la hermenéutica, el valor estético y ético de la palabra, la defensa de la libertad y reivindica la vocación docente.» Declaración del jurado que le otorgó el Premio Nacional de las Letras Españolas 2014 La crítica opina... «Un gran ensayista y divulgador de alto nivel, entre los temas que trata destacan la defensa de la lectura, la felicidad, el silencio, la belleza y la verdad.» Winston Manrique, El País
Sobre un mundo con mucho mal e inmenso sufrimiento, miles de hombres y mujeres gritan cada día: «¿Dónde estás, oh Dios?» (Salmo 42). Por eso, más que un Dios como enigma racional, me ha importado el Dios comprometido con los hombres, y así me he atrevido a trazar su itinerario de una forma práctica, desde una perspectiva cristiana. Empezaré hablando del hombre como viviente a quien Dios mismo despierta a la existencia personal y social; quiero dejar que Él se revele en el mismo corazón de nuestra vida humana. Expondré después los argumentos a favor o en contra de Dios, tal como han sido planteados en la filosofía de Occidente, lugar donde ha surgido la cuestión de la teodicea como juicio que la historia eleva frente a Dios. Contemplaré al ser humano como pregunta teológica: abierto a Dios, viviendo en amor y libertad, pero capaz de negarle y suicidarse. Y estudiaré las grandes paradojas que suscita Dios, a quien solo podemos conocer ensanchando el horizonte de nuestras razones y experiencias. Así concluye este itinerario, dejando abierto el camino a la posible fe religiosa.
Tras varios años de excedencia, la crisis lleva a Augusto Bongiorno a retomar su plaza de profesor de Filosofía en un instituto de nombre aciago: Instituto Gracián. Allí se encontrará con un grupo de alumnos de Bachillerato (cada uno de su padre y de su madre), que, más que proporcionarle quebraderos de cabeza, lo arrastran a una vida de aventura que no deseaba.¿Pueden utilizarse las aventuras de un año escolar, se pregunta Bongiorno, para comenzar a discutir con sus protagonistas acerca de cómo debemos conducirnos día a día? ¿Qué otra cosa es, si no, la filosofía?Así, las pequeñas historias de este libro tratan sobre la dificultad de asomarse a la realidad de la vida sin complejos, abordando la verdad de todo lo que parece no tener demasiado sentido. La dificultad de asumir nuestra exposición constante a la tensión entre esos polos que a veces nos atraen y otras nos repelen: segregación y socialización, naturaleza y cultura, violencia y razón, libertad y responsabilidad, justicia y felicidad...Un homenaje a la vocación de una de las profesiones más importantes en la creación de nuestra sociedad y menos valoradas por ella: la del profesor.
La presencia de los valores en los curricula ha sido una constante de los sistemas educativos actuales. Y es que los aspectos formales de la educación han preocupado y siguen preocupando- de forma explícita, a pensadores y políticos. La reflexión y el debate sobre los valores constituyen un reto desafiante en la formación de los adolescentes. El libro será muy práctico para el profesorado, especialmente los tutores, monitores, educadores de tiempo libre, padres que encontrarán en sus páginas pautas de intervención alternativas orientadas a la formación de los adolescentes.
Este tratado de filosofía moral, que ocupa un lugar clave dentro de la obra de John Stuart Mill (1806-1873), contiene tanto enunciados de hecho como valoraciones implícitas respecto al mundo, la humanidad y la felicidad. «El mérito de Mill -señala Esperanza Guisán- radica en que supo combinar inteligentemente los datos que le ofrecía la experiencia para formular, proponer e imaginar un mundo que resultase más deseable y una convivencia que pareciese más satisfactoria y más gozosa.» «El utilitarismo» muestra, por un lado, que el logro de la felicidad humana implica la puesta en marcha de una serie de resortes morales, y por otro, que el ideal de la máxima felicidad del mayor número constituye el criterio mismo de la moralidad. Completa el volumen «Un sistema de la lógica», que esboza de manera clara los supuestos metaéticos de Mill. Prólogo y traducción de Esperanza Guisán
¿Por qué es nuestro universo precisamente como es? ¿Qué significado tiene el hombre en las inimaginables extensiones del cosmos? Tales preguntas se las plantea posiblemente todo aquel que se ocupa de las estrellas, las galaxias y la arquitectura del universo. La cosmología, como apenas ninguna otra parte de la física, da lugar a preguntas filosóficas. Seguramente es esta relevancia de cara a obtener una imagen del mundo la que proporciona a la cosmología una notable atención más allá de los estrechos círculos de especialistas, y la que ha conducido a una abundancia de libros de divulgación. ¿Y cómo se relaciona la cosmología física con la filosofía? ¿Cómo hay que interpretar los modelos cosmológicos de nuestro tiempo? ¿Como descripciones del universo, o más bien como ficciones útiles? ¿Poseen las leyes del universo rasgos peculiares que requieren una explicación? ¿Qué explicaciones cabe ofrecer?
Para el creyente cristiano se ha impuesto hasta ahora sin discusión la prohibición de quitarse la vida. Sin embargo, argumenta Hans Küng, un tránsito feliz a la muerte está fundado en el respeto profundo hacia la vida infinitamente valiosa de toda persona y no tiene nada que ver con un desdichado suicidio arbitrario. Pues, si todos tenemos una responsabilidad sobre nuestra vida, ¿por qué habría de cesar esa responsabilidad en su última fase? Precisamente como cristiano que cree en la vida eterna, hace Hans Küng un nuevo llamamiento en favor del derecho de cada cual a decidir responsablemente el momento y la forma de su muerte. Tras "Morir con dignidad" (Trotta, 2010), este «opúsculo » sumamente personal surge de la voluntad, como precisa el autor en el prólogo, de «contribuir a un proceso de debate continuo» sobre la controvertida cuestión de la eutanasia, aportando la voz del teólogo, «él mismo afectado de una manera existencial por esta problemática ». El testimonio en primera persona de Hans Küng se recoge de un modo especial y con toda su viveza en la conversación con Anne Will incluida en este libro.
En el año 1844, uno de los más productivos de su carrera, publica Søren Kierkegaard, en el plazo de unos pocos días, los tres escritos aquí reunidos: Migajas filosóficas, El concepto de angustia y Prólogos. Su heterogeneidad estilística y la diversidad de su contenido hacen que aparezcan con la firma de tres pseudónimos diferentes: Johannes Climacus, Vigilius Haufniensis y Nicolaus Notabene, respectivamente. Las Migajas exponen las limitaciones del pensamiento filosófico cuando se trata de la apropiación individual de la verdad. Climacus dirige su mirada al tipo de aprendizaje de la verdad representado por la mayéutica socrática y por el cristianismo. El concepto de angustia emprende una discusión conjunta de la cuestión psicológica de la angustia y de la cuestión dogmática del pecado hereditario. La angustia se caracteriza por su ambigüedad psicológica, por ser una «antipatía simpatética». Como escribe Kierkegaard en su Diario, «la angustia es un poder extraño que se apodera del individuo, pero liberarse de él es algo que el individuo no puede y no quiere, puesto que uno teme, pero lo que uno teme es lo que uno desea». Los Prólogos son reflejo del particular interés prestado por Kierkegaard a esta forma literaria. Se trata de una serie de ocho prólogos a libros inexistentes, precedidos a su vez por un prólogo que reclama la emancipación del texto «prologal» en su ambigua naturaleza: poder «tratar sobre nada».
Es posible que Il Principe resulta una obra intraducible por una serie de razones que van desde la riqueza del lenguaje empleado por un Maquiavelo que se expresaba en frases cortas y precisas, hasta la significación que encierran muchos de sus conceptos situados en el tránsito del mundo de los antiguos a los modernos. Pese a todo, este breviario ha terminado convirtiéndose en el arquetipo del clásico, siempre leído y citado, siempre recurrente, para explicar los acontecimientos del presente. Y es que tras quinientos años, Il Principe continúa siendo un texto vivo, excepcionalmente útil para afrontar las complejas realidades de la vida y la política. Por ello, Tecnos ha querido reunir en este libro cuatro aportaciones extraordinarias: el texto italiano preparado por Giorgio Inglese, considerado la mejor fijación del original; la excelente versión española de Helena Puigdomenèch; los ensayos de John G. Pocock, el gran responsable de la relectura de lo maquiavélico que actualmente nos está llegando desde el mundo cultural anglosajón; y un estudio bibliográfico de Julio A. Pardos.
Los grandes líderes democráticos como Abraham Lincoln, Mohandas Gandhi y Martin Luther King comprendieron la importancia de cultivar las emociones. Sin embargo, los partidarios del liberalismo suelen dar por supuesto que una teoría de los sentimientos públicos iría en contra de la libertad y la economía. Nussbaum pone en cuestión este supuesto y estudia las propuestas de religión civil o religión de la humanidad que autores como Jean-Jacques Rousseau, Auguste Comte, John Stuart Mill y Rabindranath Tagore han planteado a lo largo de la historia. A partir de ello nos explica cómo una sociedad decente puede utilizar recursos de la psicología humana al tiempo que limita los perjuicios que causa el lado más oscuro de nuestras personalidades.