El docente actual se encuentra, a menudo, con la necesidad de abordar la cuestión literaria, bien como contenido curricular, bien como soporte instrumental para el acceso a otro tipo de contenidos, sin una reflexión previa sobre los materiales utilizados en el aula. Por este motivo, suele recurrir a los textos canónicos fijados por la tradición escolar, que, sin embargo, distan de ser reflejo de la realidad actual, obviamente mucho más compleja. Las reflexiones que aquí se presentan se fundamentan en la necesidad de promover el hábito de lectura por medio de estrategias que animen, interesen y diviertan; que permitan la formación literaria de nuestros jóvenes lectores desde una visión de la literatura como instrumento de crecimiento individual y vehículo de comunicación intercultural, desde el convencimiento de su poder como valioso recurso para el entendimiento y para la transformación de las relaciones sociales.
El autor explica en el prólogo el motivo por el que fue escrito este libro, que es precisar la imagen trasmitida a lo largo de los años de Fernández Flórez como "escritor de derechas". Díaz-Plaja sostiene que tal calificativo se debe exclusivamente a la colaboración que el escritor coruñés mantenía con el diario "ABC" y al hecho de haber tomado partido por el bando de Franco tras finalizar la Guerra Civil. No obstante, pese a mantener un ideal conservador, en las obras de Fernández Flórez aparecen numerosos textos izquierdistas en los que humorísticamente critica todos los pilares del conservadurismo. De ahí la acepción de "conservador subversivo" que da título a esta obra. El libro, mediante acotaciones a estos textos, intenta explicar lo mencionado anteriormente, abarcando todas las facetas en la literatura de Fernández Flórez.
Este manual presenta de forma clara y accesible un recorrido por la evolución de los principales movimientos de la literatura alemana a lo largo de todas sus épocas, ilustrado con una selección de textos de diferentes autores y obras. La presentación diacrónica de esta evolución permite observar la confluencia de toda una serie de presupuestos sociales, culturales, históricos e ideológicos que subyacen tras el proceso de creación literaria en los distintos momentos de la historia. Este planteamiento, por tanto, ofrece una visión panorámica de las diferentes épocas y movimientos en que se inscribe, facilitando al lector las herramientas que le permitirán el estudio.
Si bien mucho se ha hablado sobre literaturas no lineales desde contextos cercanos a las teorías de los nuevos medios, este libro acentúa la continuidad de estas prácticas a lo largo de la historia de la literatura. Los nuevos dispositivos de escritura, surgidos a partir de tecnologías digitales, permiten alcanzar dimensiones antes no previstas en estrategias tales como la no linealidad de las tramas, la interactividad o el reparo en el aspecto perceptual de los signos. Sin embargo, este tipo de experiencias no son nuevas en el campo literario. Desde los Carmina Figurata hasta los poemas dadá, desde el Tristam Shandy de Lawrence Stern hasta los viajes africanos de Raymond Roussel, desde el Coup de dés de Mallarmé hasta el Nouveau Roman, desde la verbivocovisualidad joyciana hasta el concretismo, desde los lenguajes inventados por Velemir Khlebnikov hasta los event scores de Fluxus se han buscado formas de decir y de narrar que escapasen a modelos canónicos y automatismos lingüísticos.
El individuo humano, y no sólo para defenderse del frío, protege su cuerpo con prendas de vestir, entre las que cabe distinguir entre la «ropa interior» y los vestidos y los trajes, que se ven; protege también su vida cotidiana con puertas las de las habitaciones de la casa, la del piso, la del portal de la calle; la protege también con vallas y setos los que defienden el espacio de los habitantes de una urbanización, por ejemplo, con murallas y fronteras. La «habitación propia» reivindicada por Virginia Woolf para la mujer la necesita también el hombre. Una voz abandonado el espacio inaugural, el espacio de dos, «la interior bodega», el individuo humano lleva siempre consigo una especie de «habitación propia»: la «guarda» de este espacio está encomendada a la cortesía.
¿Qué aporta a los lectores la crítica literaria en medios masivos de comunicación? La escritora y estudiosa Márgara Averbach nos ofrece una respuesta múltiple a esa pregunta no solo mediante la reflexión sino también con ejemplos: notas críticas, entrevistas y artículos largos. Como toda colección de textos, esta requiere un orden. De ahí es donde surge la segunda pregunta: ¿cómo debe organizarse un amplio índice de lecturas?, cuya única contestación es que resulta imposible crear una clasificación coherente porque la literatura es un lugar complejo, donde se cruzan ideas, sensaciones, propuestas, experiencias. La literatura es, por esencia, inclasificable. La serie de artículos que Averbach presenta celebra esa cualidad y la explica con la clarividencia y sagacidad de la ensayista que también es mujer de letras y creadora de realidades literarias.
Encierra este MANUAL una de las más completas revisiones de los movimientos de la crítica literaria a lo largo del siglo XX y primeros años del siglo XXI. Son veinticinco las corrientes descritas en este libro desde el formalismo ruso hasta la teoría del canon, atendiendo a las pautas renovadoras con que la lingüística estructuralismo, generativismo, pragmática, la filosofía hermenéutica, deconstrucción, la sociología teorías marxistas, teorías sistémicas o la psicología la psicocrítica han contribuido a renovar estas tendencias críticas, centradas en los diferentes elementos de la articulación literaria, sin que ninguna de ellas acierte a resolver todos los problemas o cuestiones que conciernen a la "literatura" entendida como sistema, es decir como un orden de valores que se inscribe en los marcos más amplios de la cultura y de las relaciones sociales en general. De ahí, la necesidad de conocer la totalidad de estos discursos interpretativos: disponen de medios valiosos para examinar la génesis textual, para identificar los rasgos del lenguaje literario, para explicar los procesos de creación y de recepción textuales, para advertir la trama de signos a la que el texto remite y que a la vez suscita, para reconocer las redes de conexión de las obras o de los géneros con esquemas más amplios del conocimiento humano. Hoy no se puede hablar de "literatura" sin una mínima noción de la "actividad crítica" aquí organizada. Tal es el objetivo de este MANUAL: destacar las principales aportaciones de cada uno de esos grupos o escuelas que se han ido sucediendo a lo largo del siglo XX, con el fin de valorar sus posibilidades y de señalar, también, los límites de esos métodos de análisis. No necesita, desde luego, la "creación literaria" de estas metodologías críticas, pero sin ellas no podría entenderse el complejo fenómeno de causas y de accidentes que la sostiene y la posibilita.
En este ensayo, iniciado en Brasil y terminado en Barcelona, Andrea Valdés investiga sobre los usos y derivas de la escritura autobiográfica desde mediados de 1950 hasta nuestros días, centrándose en la obra de varios escritores latinoamericanos que escribieron desde los límites de la locura, la enfermedad o la exclusión social (Maura Lopes Cançado, Mario Levrero, María Moreno, Carlos Correas, Gloria Anzaldúa, Severo Sarduy...).
La generación de escritores conocida como generación del 98 ha sido objeto de mitificación piadosa durante los años del franquismo. Era hora ya de aprovechar los estudios parciales y de conjunto para trazar un panorama de la España que la hizo posible. Multitud de circunstancias personales de los protagonistas, así como razones de índole política, teológica y social, contribuyeron a crear el fermento, tras el desastre de la pérdida de las colonias, del movimiento de regeneración de España. Qué hubo de buenas intenciones o de pronunciam,ientos más o menos cínicos es lo que desentraña el profesor José Luis Calvo basándose en un apabullante recuento de datos periodísticos, literarios e históricos. Y sobre todo examina los acontecimientos más cercanos a ese año emblemático en los momentos en que la generación no tenía aún ese nombre.