La historia de La Celestina se caracteriza por un constante proceso de ampliación más propio de un libro manuscrito que de un libro impreso. Sabemos, gracias a su propio autor Fernando de Rojas, que la comedia circulaba en forma manuscrita antes de su entrega al impresor y que él mismo introdujo cambios bastante significativos en la versión primera.Este ensayo de José Guillermo García Valdecasas supone un notable esfuerzo por intentar reconstruir justamente ese texto arquetipo, tal como pudo llegar a manos de su primer impresor. El resultado es un apasionante trabajo de investigación y una Celestina de un texto corto, libre de postizos, del que surge la asombrosa hermosura del original.José Guillermo García Valdecasas, abogado y titular de Filosofía del Derecho de la UNED, es rector del Real Colegio de España en Bolonia. A él se debe la recuperación de la ópera de Calderón de la Barca Celos, aun del aire mata, así como el hallazgo del manuscrito de El Cantico espiritual de san Juan de la Cruz que los estudiosos han designado con su apellido.
Las cartas que Valera escribió en sus años juveniles son las más conocidas y las que contribuyeron de modo decisivo a la forja de su estilo como novelista y crítico. Aquí encontramos cartas familiares, comunicados enviados a publicaciones periódicas como «cartas abiertas» o notas estimulantes destinadas a jóvenes escritores que, en muchos casos, las utilizaron como prólogo a la edición de sus libros. En nuestra edición se excluyen los artículos de crítica literaria escritos en forma epistolar y las numerosas comunicaciones diplomáticas que Juan Valera transmitió al Ministerio de Estado.Esta edición ha seguido varios criterios fundamentales:-- Se reproduce la versión manuscrita de cada texto siempre que ha sido posible (si no, la de su último editor).--La ordenación de los textos es cronológica y cada carta va precedida por el nombre del destinatario, el lugar y la fecha de data (año, mes y día).--Se evita un abrumador aparato de anotaciones explicativas, para facilitar la lectura de los no especialistas.Un índice de nombres propios (de personas y lugares), títulos de libros y de las publicaciones periódicas citados ayudará a situar el riquísimo contenido referencial de esta obra.SI ESTÁ INTERESADO EN TODOS LOS VOLÚMENES DE LA CORRESPONDENCIA DE JUAN VALERA CONSULTE LAS VENTAJAS DE UNA SUSCRIPCIÓN (PINCHE AQUÍ)LOS EDITORESLEONARDO ROMERO TOBAR es Catedrático de la Universidad de Zaragoza, fundador de la Asociación Española de Bibliografía y de la Sociedad de Literatura Española del siglo XIX. Ha publicado: Prosa y teatro románticos, Poesía romántica y postromántica y Ensayo sobre la novela popular española del siglo XIX. ENRIQUE SERRANO ASENJO es profesor de la Universidad de Zaragoza. Ha publicado Ramón y el arte de matar (El crimen en las novelas de Gómez de la Serna y Vidas oblicuas: aspectos teóricos de la biografía en España (1928-1936). ÁNGELES EZAMA GIL es Profesora Titular de la Universidad de Zaragoza. Ha publicado El cuento de la prensa y otros cuentos.
Más de 50 artículos publicados en diarios y revistas en el transcurso de los últimos cien años, muestras de la mejor prensa escrita, permiten observar la evolución completa de la historia del pensamiento y de la sociedad española desde 1900 hasta nuestros días.Desde Ramiro de Maeztu y Pío Baroja a Antonio Muñoz Molina y Rosa Montero o, lo que es lo mismo, desde las mejores muestras del 98, pasando por los trabajos de los autores más representativos de los años veinte, del grupo del 27, de la guerra y sus postrimerías, de las décadas de 1960 y 1970, hasta las muestras periodísticas más significativas de los últimos 25 años se dan cita en este libro que mostrará un panorama completo de la historia del pensamiento en España a todos cuantos se acerquen a él, especialmente a estudiantes de literatura, de ciencias de la información y de sociología.FRANCISCO GUTIÉRREZ CARBAJO es profesor titular de Literatura Española en la Universidad Nacional de Educación a Distancia. Ha obtenido el premio de ensayo González Climent, el accésit del premio Giner de los Ríos y el Primer Premio de Investigación de la Fundación Andaluza de Flamenco. En Castalia también ha publicado las ediciones críticas de las novelas El separatista de Eduardo López Bago, y El chalet de las rosas de Ramón Gómez de la Serna.
Los distintos documentos y probanzas de méritos, que Bernal Díaz del Castillo (1495/6-1584) redactó a lo largo de su vida para justificar sus méritos literarios y conseguir el reconocimiento y las encomiendas que solicitaba, se convirtieron, con el paso del tiempo, en el germen de la historia de la conquista de Nueva España. Testigo de los acontecimientos que relata y apoyado en fuentes escritas ajenas, relatos orales de distintos protagonistas y la rememoración oral que debió practicar él mismo, logra transmitir la autenticidad de su historia.Testimonio insuperable de la confrontación entre la población indígena y los españoles que los sometieron, su estilo llano y natural, impregnado de un importante caudal de americanismos procedentes del taíno, arahuaco lenguas hoy desaparecidas que se hablaban en las islas de Cuba y La Española- del náhuatl, la lengua del pueblo mexicano, y del maya despertó el interés de los primeros lectores que tuvo Bernal Díaz, y que también hoy sorprende y conmueve al lector actual.Historadores, lingüístas, profesores y alumnos tienen ahora la oportunidad de encontrarse con toda la belleza y con toda la violencia de nuestra historia a través de esta selección de Alberto Rivas que contiene además cuadros cronológicos, introducción, bibliografía, notas, documentos y orientaciones para su estudio.Alberto Rivas es doctor en Filología Hispánica, catedrático de Bachillerato y traductor de la Comisión Europea en Luxemburgo. Ha publicado diversos trabajos sobre Bernal Díaz y las crónicas de Indias, así como artículos sobre otros aspectos del Renacimiento, la poesía y la novela españolas contemporáneas.
El periodisme després de Twitter és una reflexió sobre l'impacte de les xarxes socials i els dispositius mòbils en la gestió de la informació. L'obra parteix de la hipòtesi que el periodisme és una realitat històrica i, com a tal, podria desaparèixer. A partir d'aquí s'analitzen els canvis en el context cultural, econòmic i polític que afavoririen l'extinció del periodisme, a més dels nous hàbits de consum informatiu dels ciutadans. La conclusió apunta a la possibilitat que el nou lloc del periodisme sigui el que tenia inicialment: un espai de conversa entre els membres d'una comunitat social. Per esdevenir-ho, hauria de desprendre's d'algunes adherències pròpies de la seva organització a través dels mitjans de comunicació de massa i reprendre el seu vincle amb el públic i la seva essència narrativa.
El bon pròleg ha dilluminar, però mai enlluernar. Així, la claror daquests pròlegs illuminen desde aquells escriptors que són com els porcs, on tot saprofita, fins aquells que no escriuen i acaben per descubrir-nos tot el potencial de la seva impotència. Algú diguè que, al capdavall, els autors acaben tenint menys imaginació que els seus editors, que ja es dir.
La imagen que tenemos hoy día de Fernando Pessoa se parece poco o nada a la que tuvieron los escritores de su momento. Si en la actualidad Pessoa es el máximo exponente de la literatura portuguesa en España (y el mundo), no podemos decir que la situación fuese la misma en la primera mitad del siglo XX, cuando era entre nosotros una sombra que sólo conocían unos cuantos iniciados. Sin embargo, la vida de Pessoa estuvo salpicada de encuentros y desencuentros con España y sus escritores. Trazó algunas relaciones con sus camaradas vanguardistas (Adriano del Valle, Rogelio Buendía, Isaac del Vando-Villar, Iván de Nogales) y su archivo revela numerosos testimonios de interés por España, en el contexto de su pensamiento sobre Iberia, y por algunos de sus autores, con Miguel de Unamuno a la cabeza. Ochenta años después de la muerte del portugués, ha llegado el momento de descifrar quién fue Fernando Pessoa entre los escritores españoles de su época y qué significado tuvo España y su cultura en la obra del autor del Libro del desasosiego. Antonio Sáez Delgado es profesor de literatura en la Universidad de Évora y miembro del Centro de Estudos Comparatistas (FLUL). Investigador, traductor y crítico, es especialista en las relaciones literarias entre Portugal y España a principios del siglo XX, tema al que ha dedicado libros como Órficos y Ultraístas (2000), Adriano del Valle y Fernando Pessoa (apuntes de una amistad) (2002), Espíritus contemporáneos (2008) o Nuevos espíritus contemporáneos (2012). Ha traducido al español obras de Fernando Pessoa, António Lobo Antunes, Fialho de Almeida, Teixeira de Pascoaes, Almeida Faria, Manuel António Pina y otros muchos autores portugueses modernos y contemporáneos. Comisario de las exposiciones Suroeste. Relaciones literarias y artísticas entre Portugal y España (1890-1936) (MEIAC, 2010) y Fernando Pessoa en España (Biblioteca Nacional de Portugal, 2013; Biblioteca Nacional de España, 2014), es colaborador habitual de Babelia y dirige Suroeste. Revista de Literaturas Ibéricas.
La Primera Guerra Mundial lo cambió casi todo: los mapas, los territorios, las alianzas, las lealtades, los imperios, los regímenes. Y, sin embargo, la Gran Guerra trajo también consigo alteraciones menos manifiestas: por ejemplo, nuestra idea de la propia guerra, o nuestra idea de la literatura. O nuestra idea del modo en que la literatura debe tratar la guerra. Durante unos pocos años, un puñado de escritores ingleses señaladamente, poetas como Edward Thomas, Robert Graves, Siegfried Sassoon y Wilfred Owen se encontraron sometidos al dilema entre los imperativos de la propaganda y la responsabilidad ética y poética de preservar su propia voz. Entre la espada del tradicionalismo inane que representaba la poesía georgiana y la pared de las novedades estruendosas del modernism, estos poetas buscaron y en ocasiones encontraron el camino para cantar la verdad de la guerra y eludir la siniestra apropiación del discurso oficial. Gabriel Insausti (San Sebastián, 1969) ha publicado narrativa (Días en Ramplona, El hombre inaudible), poesía (Vísperas del silencio, Noche a noche, Últimos días en Sabinia, Destiempo, Cristal ahumado, Vida y milagros) y ensayo (La presencia del romanticismo inglés en Cernuda, Tras las huellas de Huston, El porvenir de la lectura, La trinchera nostálgica, Miguel Hernández: la invención de una leyenda, El puente y las orillas: cuatro poetas ingleses, La distancia y el tiempo: escritos sobre Cernuda). Ha editado a Larra, Cernuda y Oteiza, ha traducido a Wilde, Coleridge, Newman, Waugh, Richard Serra, Richard Deacon, Viktor Frankl, Robert Bringhurst y Leon Kass y ha preparado ediciones bilingües de la poesía de los románticos ingleses, W. H. Auden, Stephen Spender, Cecil Day Lewis, Edward Thomas, Wilfred Owen, W. H. Davies, John Ashbery, Coleridge y Newman. Ha recibido algunos premios, como el Gerardo Diego, el Arcipreste de Hita y el Manuel Alcántara de poesía y el Ateneo Jovellanos de Novela Corta, y fue finalista del Nacional de Literatura en 2002.
A diferencia de los grandes nombres de la posguerra japonesa, que como Kenzaburo Oe se empeñaban en redefinir Japón tras el durísimo trauma histórico que supuso el año 1945, Murakami pertenece a una generación que ya no tiene en tan alta estima los sólidos fundamentos filosóficos y culturales de los que bebieron los autores anteriores, y desde sus comienzos literarios escribe para un público nacido varios años después (incluso décadas) del fin del conflicto bélico. [ ] Su obra intuye los grandes poderes fácticos que, aparentemente de forma inescrutable o mágica, mueven los hilos del mundo sin que ninguno de los ciudadanos comunes pueda barruntar siquiera dónde se anclan esas poderosas cuerdas de la política y la economía. Si hay una realidad mágica en los mundos de Murakami, ésta parece adivinarse a partir de la alienante extrañeza de los sucesos históricos cotidianos, cuya lógica parece perderse en esferas incognoscibles, tanto epistémica como políticamente. El pastiche murakamiano habla de una religión y de una fe contemporáneas en el poder de la imagen, en las marcas, en la bolsa de valores y, en ocasiones, en un atisbo de espiritualidad ingenua que sus personajes suelen manifestar. En este interesante ensayo, el autor condensa las claves ficcionales de varias obras de Murakami a la luz de la física cuántica, explicando de qué manera los principios científicos de esta disciplina se pueden aplicar al análisis de narrativas contemporáneas en un intento de ampliar las lógicas de la verosimilitud y las fronteras del género fantástico. Asimismo, recoge las semejanzas entre el pensamiento tradicional oriental y las interpretaciones contemporáneas de la física cuántica en virtud de la confluencia de ambos sistemas en la literatura de Haruki Murakami.
La novela ideológica nació tras el fracaso de la revolución liberal. El género se desarrolló en los primeros años de la Restauración, 1875 y 1880, y cuenta con dos tendencias ideológicas rivales: una, reaccionaria, representada por Alarcón y Pereda, y otra, liberal, en la obra de Galdós.