La experiencia concentracionaria, una de las más terribles expresiones de violencia y barbarie del siglo XX, se conecta con un tipo concreto de escritura desarrollada fundamentalmente a partir de la década de 1930 y caracterizada por transmitir el testimonio de los supervivientes de los centros de internamiento. Es ésta una literatura que nace de una experiencia concreta, pero que se vincula con un marco intercultural determinado por la universalidad del fenómeno de los campos de concentración y que, más allá de mostrar y denunciar la inhumanidad y el horror, intenta convertirse en memoria activa y ejemplar. No todos los campos de concentración son iguales, y, de hecho, resulta difícil asimilar el infierno de los centros nazis de exterminio con otras realidades concentracionarias sin caer en la banalización o la simplificación, pero sí se pueden detectar en los testimonios de quienes los sufrieron análogos temas y recursos expresivos. Analizando de forma comparatista la obra de diversos supervivientes ?Primo Levi, Jorge Semprún, Robert Antelme, Alexandr Solzhenitsyn, Max Aub, Imre Kertész, Margarete Buber-Neumann, etc.?, como si de una estructura de ?vidas cruzadas? se tratase, Escribir el horror. Literatura y campos de concentración intenta analizar las principales características de este tipo de escritura.
La revolución de los claveles anuncia el fin del colonialismo portugués y fija la proclamación de la independencia de Angola para el 11 de noviembre de 1975. Tres meses antes, Kapus¿cin¿ski se instala en Luanda, donde asiste al «éxodo blanco». Mientras, en su avance hacia la capital, la guerra por el poder en el futuro Estado soberano se recrudece por momentos. Kapus¿cin¿ski, con grandes dosis de valor ?o de insensatez? decide quedarse hasta el final; sumido en la mayor soledad, recorre la ciudad desierta y los frentes de batalla. Más que el relato de un reportero, se trata de un diario íntimo, escrito por un ser humano al límite de sus fuerzas y consciente de su indefensión ante la amenaza de muerte que se cierne sobre su cabeza y sobre las cabezas de tantos angoleños, soldados y civiles, que protagonizan este libro, el preferido del autor entre todos los suyos.
Howard Phillips Lovecraft (1890-1937), maestro indiscutible de la narrativa de terror moderna, manifestó a lo largo de su vida una gran preocupación por lo fantástico, presente no sólo en sus poemas y relatos, sino también como tema de reflexión y análisis en la mayoría de sus artículos y buena parte de su copiosísima correspondencia. Por eso no es de extrañar que su ensayo más extenso fuera precisamente un apasionado alegato en favor del género fantástico, que él presenta como una deslumbrante victoria del espíritu frente a la materia, como un imprescindible rescate de la facultad de soñar. El horror sobrenatural en la literatura (1927) va más allá de una confesión muy personal acerca de los libros que más influyeron en HPL, y constituye posiblemente el estudio sobre el género fantástico más completo y valioso escrito hasta la fecha. Tras unos capítulos iniciales dedicados a la ficción sobrenatural en la antigüedad y a la novela gótica en el Reino Unido y el resto de Europa, llegamos al capítulo VII, dedicado por completo a Poe, culminación del movimiento gótico y a la vez iniciador de una tradición completamente nueva. Repasa a continuación la tradición fantástica en Estados Unidos (Hawthorne, Irving, Bierce...) y en las Islas Británicas (Stoker, Benson, Hodgson...), para llegar finalmente a los «maestros modernos» (Machen, Blackwood, Lord Dunsany, M.R. James...) Como complemento a esta edición, ampliamente anotada por J.A. Molina Foix, se han incluido nueve apéndices íntimamente relacionados con ella, y en su gran mayoría inéditos, entre los que cabe destacar una extensa bibliografía de todos los títulos y autores citados, listas de relatos favoritos de Lovecraft, ideas, imágenes y citas para su posible uso en relatos futuros, o notas autobiográficas.
«Algunos de los reportajes más memorables del último medio siglo periodístico. Un clásico moderno.»Babelia Desde que allá por los años sesenta Gay Talese irrumpiera en el mundo del periodismo para revolucionar sus formas y cambiar para siempre la manera de afrontar un reportaje, sus artículos han servido de modelo a generaciones de escritores. Ya se trate de historias cotidianas protagonizadas por gente desconocida que con frecuencia nos resulta curiosamente familiar, o de perfiles de personajes famosos a los que en realidad no conocíamos tanto como creíamos, Talese es capaz de mostrarnos siempre el detalle invisible que nos revela los secretos, de introducirnos en la escena como si la estuviéramos presenciando, de hacernos partícipes de los momentos más inaccesibles. Iconos de la cultura como Frank Sinatra, Ernest Hemingway o Peter O'Toole, de la política como Kennedy o Fidel Castro, o del deporte como Joe DiMaggio, Muhammad Alí o Joe Louis, se alternan en estas páginas con entrañables recuerdos familiares o los humildes inicios del autor en el mundo del periodismo. El nexo de unión es siempre el mismo: el inigualable estilo de Talese. La crítica ha dicho...«Cada pieza está marcada con el elegante estilo de Talese, su exhaustiva investigación, su hábil uso de los diálogos, su característica construcción por escenas y, sobre todo, su infalible ojo para el detalle revelador. Lo que distingue a Talese, lo que él hace mejor que nadie es sencillamente dejarse caer por la escena, observar y escuchar... Es cierto que siempre ha sido un reportero, pero también que tiene la vista y el oído de un artista. Esta antología le devuelve el brillo al término Nuevo Periodismo.»Los Angeles Times Book Review «Los textos que aparecen en esta esperada y maravillosa recopilación son brillantes ejemplos de una época de la historia del periodismo en la que publicar en determinadas revistas era una forma de arte y Talese su Miguel Ángel. Este libro merece ser leído una y otra vez.»Publishers Weekly «La obra monumental de este reportero norteamericano que ha hecho del periodismo un arte.»Babelia «Gay Talese forma parte de un grupo de geniales maleantes de la máquina de escribir, junto a Truman Capote, Tom Wolfe o Norman Mailer... El arte de explicar el mundo a través de los pequeños detalles y convertir cada reportaje en una historia.»Antonio G. Iturbe, Qué Leer «Gay Talese representa la elegancia... Retratos y encuentros reúne piezas maestras de este hombre que hizo del periodismo una manera de vivir.»La Vanguardia «Una reunión extraordinaria de las piezas que convirtieron a Talese en punta de lanza de eso que se llamó Nuevo Periodismo.»Juan Gabriel Vásquez, Letras Libres
Zbigniew Herbert fue, además de poeta, un ensayista de una densidad y una capacidad comunicativa incomparables. La solidez y claridad de su prosa, que mantiene siempre una extraordinaria belleza, es un auténtico prodigio. Un bárbaro en el jardín nos hace viajar a la vez por las tierras de Europa y por su historia: desde el arte y la cultura que arrancan de la pintura rupestre de Lascaux hasta hoy. Visita Francia y también Italia: las aportaciones de la Magna Grecia que descubre en las ruinas clásicas de Pæstum, la maravilla de las viejas fortalezas y las catedrales góticas y románicas, los jardines à l?anglaise de la Francia ilustrada, el destino trágico de albigenses, cátaros, cruzados y templarios, la superbundancia del Renacimiento italiano?entre otros el Duccio, Sassetta, Piero della Francesca o Fra Angelico?, van tejiendo un entramado con sutiles y esclarecedoras iluminaciones. El lector reencontrará en este libro al Herbert que supo maravillarnos con sus estudios y apócrifos neerlandeses de su Naturaleza muerta con brida (Acantilado, 2008).
Cervantista de fama internacional, Martín de Riquer es una autoridad unánimemente reconocida asimismo en el campo de las literaturas románicas medievales, del armamento y de la heráldica. Eminente filólogo y apasionado de la literatura, de sus más de sesenta años dedicados al estudio y la investigación han resultado obras inexcusables, entre las cuales destacan con fuerza las dedicadas al cervantismo, tanto en sus ediciones fundamentales del Quijote (también el de Avellaneda) como en un gran número de estudios innovadores y capitales. El presente libro recoge los más significativos, unos estudios de altísimo nivel que sorprenden al lector por su amenidad y claridad expositiva. La sabiduría enciclopédica de Riquer llega, como apuntó Dámaso Alonsoen un texto que se incluye en la presente edición«a un público amplio, a todos aquellos que quieren saber, saber más, pero que son ajenos a la especialización, a la profesión literaria».
El 31 de enero de 1827, decía Goethe a Eckermann: «Cada vez me doy más cuenta de que la poesía es un bien común de la humanidad, que se manifiesta en todos los lugares y épocas. [?] Hoy en día la literatura nacional ya no quiere decir gran cosa. Ha llegado la época de la literatura universal y cada cual debe poner algo de su parte para que se acelere su advenimiento». El concepto, fluctuante y ambiguo, de Weltliteratur, o Literatura universal, había nacido. Victor Klemperer, en este esclarecedor ensayo escrito en los momentos de tribulación de quien ve agrietarse los fundamentos de una cultura compartida más allá de los límites de lo nacional, sigue los avatares de la evolución de esta idea, del humus que la hizo posible y de su sentido último. Un recorrido en el que subyace, iluminada por la fuerza del espíritu, una idea moral de Europa.
«Me temo que formo parte de una familia de literatos, la menos atractiva, que se limita a buscar, y que Solidaridad y soledad, un libro escrito en los primeros años de mi época parisina (1982), es el testimonio más elocuente de ello. En esta obra, mi búsqueda adoptó la forma de una apología de algo que definí a la antigua usanza como vida espiritual, individualidad, soledad y poesía». Adam Zagajewski
Además de uno de los novelistas más prestigiosos del mundo, J.M. Coetzee es un crítico literario del más alto calibre. Mecanismos internos recoge 21 ensayos de Coetzee sobre el trabajo de algunos de los más grandes escritores del siglo XX. En palabras de Derek Attridge, que se encarga de prologar esta edición, leer los ensayos de Coetzee nos ofrece la oportunidad de «ver cómo se relaciona con sus pares un autor que está en la primera fila de su profesión, al comentar sus obras no como un crítico, desde el exterior, sino como alguien que trabaja con las mismas materias primas.» En esta colección de 21 ensayos, Coetzee reflexiona sobre el trabajo de algunos de los grandes escritores del siglo XX, de Samuel Beckett y Günter Grass a Gabriel García Márquez y Philip Roth. Brillantes, intuitivos, desafiantes pero accesibles, estos ensayos demuestran su inquebrantable perspicacia crítica. Escritos con gran claridad y precisión, estos textos deleitarán a aquellos lectores ya familiarizados con los autores y sus obras y serán una introducción ideal para quienes se acerquen a ellos por primera vez. Reseña:«Crítica del más alto orden.»The Independent
Isadora Duncan pidió una cerveza en su hotel y un grupo de gente contempla una foto de Gorbachov. Lou Reed dijo que medías cinco pies y diez pulgadas junto al Muro y un guía norteamericano con gafas Ray-Ban explica dónde estaba el despacho de Goebbels. Barry Lyndon se disfrazó para cruzar una frontera y una chica se baja los tirantes del vestido para tomar el sol tumbada en la hierba de un cementerio. Chéjov llamó a la puerta de un médico y un hombre deja una piedra sobre un monumento a las víctimas de un crimen. Berlín es lo que tienen en común. Es singular la acupuntura que ejerce sobre la piel del mundo esta urbe condenada a ser pedagógica, que convive con las heridas de su historia y las cura con cuidadosa despreocupación. Queda en Berlín un rastro de imágenes de la vida invisible, la de quienes poblaron distintos países sin saber que en Berlín habían de cruzarse sus destinos.
En junio de 1984 Italo Calvino fue invitado a ocupar la cátedra de las Charles Eliot Norton Poetry Lectures en la Universidad de Harvard, Massachusetts, durante el curso 1985-1986. El autor preparó un ciclo de conferencias eligiendo como tema los valores literarios que él más apreciaba y que habrían de conservarse en el nuevo milenio, aunque nunca llegó a impartirlas, pues falleció en Italia una semana antes de su partida a los Estados Unidos. «El milenio que está por terminar ha asistido al nacimiento y a la expansión de las lenguas modernas de Occidente y de las literaturas que han explorado las posibilidades expresivas y cognoscitivas e imaginativas de esas lenguas. Ha sido también el milenio del libro, dado que ha visto cómo el objeto libro adquiría la forma que nos es familiar. La señal de que el milenio está por concluir tal vez sea la frecuencia con que nos interrogamos sobre la suerte de la literatura y del libro en la era tecnológica llamada postindustrial. No voy a aventurarme en previsiones de este tipo. Mi fe en el futuro de la literatura consiste en saber que hay cosas que sólo la literatura, con sus medios específicos, puede dar. Quisiera, pues, dedicar estas conferencias a algunos valores o cualidades o especificidades de la literatura que me son particularmente caros, tratando de situarlos en la perspectiva del nuevo milenio.» Italo Calvino
En La hora de la verdad, Rosa Regàs mira la vejez a los ojos, sin miedo ni apriorismos, con valentía e ilusión por el presente. La hora de la verdad es un canto a la vida que no rehúye la cercanía de la muerte, una incitación a dar alas a nuestras vocaci
En este libro no hay retratos sino radiografías de grandes escritores contemporáneos. En ellas, si se miran al trasluz, como las placas de rayos X, aparecerá todo lo que nuestra memoria debe a su genio. La vida es un caos entre dos silencios, según Samuel Beckett; ningún sabor es comparable al del pecado, dice Graham Greene; para Joseph Conrad el mar es una moral; el ciego Borges solo vislumbra la luz del ámbar; las páginas de Dorothy Parker liberan un humo de lejanas fiestas junto con el jazz, los martinis y las franelas blancas de Scott Fitzgerald; la culpa te convertirá en el escarabajo de Kafka mientras Bioy Casares se seduce a sí mismo ante el espejo y Virginia Woolf se adentra en el río con el abrigo cargado de piedras.
Las relaciones de Montesquiou con Proust, desde 1893 hasta la muerte del poeta, en 1921, conocieron diversos avatares. Su abundante correspondencia, de la que se hallará aquí una selección "ejemplar", y los artículos consagrados por Proust
Contra un arte del genio reservado a unos pocos, la Francia del clasicismo se decantó por el arte de la conversación, abierto y expansivo, propicio a la sociabilidad y a la negociación. El descubrimiento de la pulcritud en los textos en prosa requiere de una auténtica diplomacia del ingenio. Su floración viene acompañada de una nueva primavera en los géneros literarios. Ni el ensayo, ni las memorias, ni la correspondencia, ni las recopilaciones de los moralistas habían encontrado antes unas condiciones tan extraordinarias. Consagrados a las figuras más elocuentes del primer Parnaso francés, los dieciséis ensayos reunidos en el presente volumen dan cuenta de esa función original de la literatura en el contexto de la cultura francesa: la prosa se convierte tanto en asunto de estado como en efectivo lazo de socialización. Centrado en un momento especial de la formación cultural europea en la que Francia tiene un papel sustantivo, los ensayos del profesor Fumaroli nos iluminan sobre la construcción de un concepto de sociedad.