Estas cartas con Michael Fraenkel con Hamlet como excusa, escritas entre 1935 y 1938, constituyen uno de los destellos de inteligencia más deslumbrantes del autor de 'Sexus'. Como resalta Michael Hargraves en el prólogo «La belleza del libro no radica en el examen de Hamlet (si bien estoy seguro de que un erudito shakespeareano podría disfrutar enormemente con el libro), sino en la forma como los autores se van por las ramas para revelarse. Esas desviaciones son las que les permiten fluir, lanzarse a debates sobre muchas cosas caras a su corazón y sobre el mundo en general» y «contiene algunas de las páginas mejores de Miller, algunos de sus pensamientos más libres [...] publicados e imbuidos del estilo sarcástico y maravillosamente vulgar del Miller que yo ya había leído.»
En ocasiones extremas, algunos seres humanos padecen injusticias que los sobrepasan. En otras, son llevados a situaciones de tal grado de opresión, que los privan por completo de su libertad. Es entonces cuando, milagrosamente, algunos sacan lo mejor de sí. También en las cárceles del régimen nazi hubo personas que lucharon para que no fuera conculcada definitivamente la dignidad humana. Su comportamiento y sus decisiones altruistas testimonian la perenne necesidad de resistir frente a toda desesperanza, de reparar en lo posible las numerosas injusticias y de abrir caminos hacia un futuro más humano.
La aparición de este " Diario íntimo " en 1970 supuso una renovación de los estudios unamunianos motivada por la nueva luz que arrojaron sobre la figura del gran escritor bilbaíno. Formado por cinco cuadernos de diferente tamaño y número de páginas, en ellos Miguel de Unamuno (1864-1936) vertió, abandonado a su espontaneidad y sin la expectativa de juicios ajenos, los sentimientos, dudas, esperanzas y temores suscitados por la profunda crisis espiritual que en los últimos años del siglo XIX cambió el rumbo de su vida y de su concepción del mundo.
El relato de los cuatro viajes que componen el presente libro no se escribieron originariamente en castellano. Presentan un gran interés literario, político e histórico. Jorge de Einghen, quien estuvo en España en 1457, describe una serie de aventuras y hazañas que, más que sucesos reales, parecen ficciones de un libro de caballería. León de Rosmithal vino a España en una época en que los viajes eran muy poco frecuentes, dado que ofrecían grandes dificultades y peligros. Su intención fue la de conocer las costumbres y estudiar la disciplina militar. Realizó su viaje hacia 1465. La tercera relación comprendida en esta obra es la del viaje hecho por España, en 1512, por el famoso historiador Francisco Guicciardini, que vino como embajador de Florencia cerca del Rey Católico; consiste en un juicio general, sintético, del nuevo Estado que acaba de formarse por la unión de los reinos de Aragón y Castilla. Andrés Navajero nació en Venecia en 1483. Nombrado embajador de Venecia en 1523 llegó a Toledo en 1525. Conoció y trató a los más famosos literatos y poetas españoles. Realizó varios viajes por Extremadura y Andalucía.
El Diario de Florencia es el fruto del primer encuentro de Rilke con el arte renacentista y la cultura italiana en 1898. Pese a algunos amaneramientos del jovencísimo escritor de veintiún años?aún lejos de su madurez poética?, es uno de sus textos en prosa más delicados y sugerentes. Concebido como diario de viaje escrito para Lou Andreas Salomé, enseguida se convierte en una reflexión general sobre el arte, la misión del artista y el valor de las obras del Renacimiento, además de en una emocionante profesión de fe artística. Y, como en el Viaje a Italia de Goethe, sus inspiradas evocaciones hacen desear al lector volver a visitar Florencia con el diario de Rilke en la mano como única guía.
Y así nos entendimos, escribió con mano temblorosa la pensadora María Zambrano, escasos meses antes de morir, a su entrañable amigo el pintor Ramón Gaya. Los documentos que se publican en este libro, muchos de ellos inéditos, son, sin duda, fieles testimonios de esta amistad. Pero, más allá de ello, también constituyen una parte de ese preciado tesoro histórico y cultural que se guarda en la memoria de los exiliados españoles, y encierran reveladores textos que orientan la comprensión de la trayectoria vital y de la obra que llevaron a cabo Gaya y Zambrano. La correspondencia intercambiada entre los exiliados que se vieron obligados a abandonar España tras la guerra civil constituyó un necesario recurso para mantener vivas sus relaciones personales, pero, además, sirvió de privilegiado cauce a través del cual poder compartir sus ideas, proyectos, dolores y anhelos. Resulta bien significativo del valor que le concedían, el gran esfuerzo que muchos de ellos, superando dificultades y traslados, tuvieron que hacer por conservar a lo largo de años las cartas, postales, tarjetas... No sólo encerraban recuerdos, sino el sentido de lo que eran y del destino de lo que hacían. Resulta, por tanto, plenamente justificado el que este legado no se pierda en el olvido, y que se haya venido acometiendo, desde diversos ámbitos, la ineludible tarea de publicar los restos de la memoria epistolar cruzada entre aquellos poetas, pintores, novelistas e intelectuales, desde fuera primero, y desde dentro, después, del país que un día se vieron obligados a abandonar.
El 24 de julio de 1912, Friderike von Winternitz visitó Viena y pasó la velada en la fonda Riedhof, un local frecuentado por funcionarios, oficiales, médicos y escritores, en el que vio a Stefan Zweig. Al día siguiente, Friderike le escribió una carta anónima con la que comenzaba no sólo su relación amorosa, sino una correspondencia que se prolongó durante treinta años, hasta el suicidio del escritor en plena Segunda Guerra Mundial. Estas cartas son un extraordinario testimonio del profundo vínculo que unió al escritor y a su primera esposa durante su vida en común y tras el divorcio, y un conmovedor documento de las vidas truncadas en la Europa devastada por la barbarie nazi.
A lo largo de su vida, Bruno Trentin llenó de apuntes innumerables cuadernos de diario. No se trata, por lo general, de efusiones de una persona dada a la introspección, sino de un almacén de materiales de construcción (experiencias, lecturas) y un taller en el que armaba sus proyectos para el sindicato, para la vida de partido y para su trabajo, de ninguna manera ?menor?, como investigador social. La presente antología reúne solo una parte, la más ?pública? y publicable, de sus diarios de 1988 a 1994, fechas que marcan su paso por la secretaría general de la CGIL pero también el derrumbe de la Unión Soviética, la represión de la plaza de Tiananmen, la primera guerra del Irak o la mutación del Partido Comunista italiano en Partido Democrático de la Izquierda, entre otros acontecimientos de repercusión mundial. El reflejo de todos estos avatares ?en crudo?, sin una elaboración retórica para su publicación, resultaría por sí solo fascinante, dada la condición de observador agudo de Trentin; pero además el lector encontrará aquí los jalones (el 'making of') de toda su paciente labor de construcción de algunos grandes proyectos: el programa para el sindicato, la visión del horizonte necesaria para el partido en mutación, los primeros atisbos de la que iba a ser su obra principal: 'La ciudad del trabajo'.
Lo color més blau és una novel·la epistolar, composta per les cartes que, durant dècades, s'escriuen dues dones, amigues en l'adolescència, separades per la guerra civil: una es queda a Barcelona i l'altra s'exilia. A través d'elles assistim a l'evolució de la societat catalana i a les vicissituds de l'exili durant el període franquista. El pròleg d'aquesta edició ha estat redactat per Montserrat Palau, professora de literatura catalana de la Universitat Rovira i Virgili, especialitzada en estudis de gènere i en l'obra de Maria Aurèlia Capmany.
Séneca fue una personalidad de muchas facetas que abordó con relativo éxito y comprobado entusiasmo: político, gran propietario, hombre de negocios, practicante y difusor de la filosofía, orador, poeta. Su compleja personalidad se nos aparece con fallos palmarios en un maestro de moral, pero esta desconcertante escisión entre sus propuestas doctrinales y su vivir, que ha atraído y monopolizado en exceso la atención de muchos, no debe oscurecer la complejidad de su carácter y el mensaje que podemos extraer de su obra. " Las Cartas a Lucilio " forman un conjunto de 124 piezas publicadas en veinte libros. Séneca fraguó en estas cartas su obra cumbre, el testamento vital del filósofo, en el que están innumerables preocupaciones, vivencias y lecturas del autor. Son el único ejemplar que se conserva de una correspondencia filosófica en la Antigüedad y constituyen una pedagogía en acción, mostrando las técnicas que usa un maestro para hacer progresar al discípulo. Se detecta en ellas cierto método y un avanzar a pequeños pasos, como van desvelando poco a poco las complicaciones y riqueza de la doctrina.
Jesús Arias. Diario(s) de artista... presenta fundamentalmente los estudios que Jesús Arias elaboró para dar forma a tres de los grandes proyectos en los que estuvo involucrado e impulsó: Omega, Mater Lux y Los cielos cabizbajos. Junto a esos estudios, el libro reproduce parte del ingente material de trabajo que Jesús Arias generaba a cada paso artístico que daba. La desbordante capacidad creativa y analítica de Jesús Arias hubiera dado para editar varios tomos recuperando archivos de sus diarios. Lo que aquí incluimos es una ínfima parte de un material que espera aún ser estudiado y quizás presentado mediante otras obras y formatos. Estos fragmentos de sus diarios de trabajo pueden servir de mapa visual para caminar por el territorio conceptual que delimitan las tres obras ?hoy ya conocidas, afortunadamente? que hemos decidido incluir aquí, aquellas que alcanzaron un mayor nivel de definición en la responsabilidad que Jesús Arias tuvo en ellas. Asimismo, cada una de estas obras aparece precedida de un breve prólogo en el que se introducen algunas de sus claves biográficas, estéticas y artísticas.
Las doce cartas que forman este brevísimo volumen se escribieron en el verano de 1920. Los corresponsales eran dos de los intelectuales más importantes de la Rusia presoviética. Debilitados por las privaciones de la guerra civil, fueron admitidos, por separado, en el Sanatorio para Trabajadores de la Ciencia y las Letras, donde se les asignó el mismo cuarto. Durante los primeros días se entregaron a largas conversaciones, pero pronto descubrieron que éstas los apartaban de su obra, por lo que decidieron continuar por escrito. El resultado fue esta correspondencia, que contiene un profundo examen del presente y el futuro de la cultura occidental. No es exagerado afirmar que el estatus de estas 'Correspondencias' en la historia cultural de occidente ha llegado a ser legendario.
Ladakh, región situada en la vertiente norte del Himalaya indio, posee un enorme atractivo para el viajero actual. A la belleza abrupta de sus inmensas montañas y valles se une la riqueza y originalidad de una cultura, la tibetana, conservada con una pureza difícil de hallar en el propio Tíbet central. La hospitalidad y simpatía de sus habitantes, todavía no contaminados por el turismo masivo, hacen del viaje una continua invitación al disfrute, al aprendizaje, a la reflexión. Marta Torres Santo Domingo nos lleva, con este libro, a una etapa más de su particular Ruta de la Seda. Con ella visitaremos Dharamsala y el sueño del exilio tibetano, cruzaremos la Gran Cordillera por el Rothang Pass con los moteros que hacen la «Manali-Leh Road» y nos dejaremos rodear por las cabras pashminas del altiplano tibetano. Llegaremos al valle del Indo, cuna del reino de Ladakh, y nos adentraremos en el misterio de sus monasterios budistas. Además, el valle de Nubra y sus dunas de arena dorada, los espectaculares mandalas de Alchi o el conflicto en Cachemira serán otros hitos del viaje. La autora va acompañada en su camino de monjes recitando mantras, moteros y camioneros, camellos bactrianos perdidos, nómadas pastoreando sus cabras, misioneros con una Biblia en las manos, viajeras extravagantes, artistas, militares, exploradores, espías y escritores que, juntos, constituyen un variado paisaje humano en un viaje que no acaba al cerrar las páginas del libro.