Que La gran novel·la sobre Barcelona sigui un llibre de contes confirma que no podem refiar-nos de les aparences. Les quinze històries que componen aquesta intensa experiència narrativa aporten una visió profunda i perspicaç de diverses passions humanes. L?amor, els vicis, la fatalitat o la perplexitat de viure en un món feliçment caòtic són qüestions que, tractades amb una prosa que defuig la transcendència, permeten al lector fruir d?un espectacle d?una inusual força literària, en el qual Sergi Pàmies aconsegueix un equilibri perfecte entre la satisfacció d?escriure i el plaer de llegir. «Còmic, satíric, sense aires de grandesa.» burkhard scherer, Frankfurter Allgemeine Zeitung. «La mirada de Pàmies no s?enterboleix amb els vapors de la revolta. Cap prejudici no atura aquesta mirada. Això dóna a la seva escriptura, molt treballada, parca, calculadora, una eficàcia indiscutible.» patrick kéchichian, Le Monde. «Pàmies fa veure que tot és tal com els nostres ulls es pensen que és, al mateix temps que, amb una mirada diguem-ne evident, trasbalsa aquesta percepció i deixa aflorar tot de detalls que l?esmicolen.» josep m. fonalleras, El País.
Los cuentos de Luis Magrinyà en un solo volumen. Aviso de lectura Y, levantándose, partió en busca de su antiguo editor. «Estando él todavía lejos, le vio el editor y, conmovido, corrió, se echó a su cuello y le firmó un nuevo contrato por cinco años y sin incluir derechos digitales.» Contento, dijo a sus colaboradores: «Traed aprisa al mejor diseñador gráfico y maquetad de nuevo sus libros, ponedle una cubierta a color y demos un gran recibimiento a este retorno impredecible. Desprogramemos el presunto bestseller y celebremos una fiesta, porque este autor mío estaba lejos y ha vuelto; estaba ajeno y ha sido hallado». Y comenzaron la fiesta. Y renació así este libro que es nuevo y clásico, moderno y posmoderno, grueso y colmado de ligereza, perfecto para contar cómo la gloriosa década del pelotazo ya llevaba dentro las inevitables consecuencias que acarrea inevitablemente, el dejarse seducir por esa malvada bestia que llamamos felicidad. A principio de los años noventa Magrinyà publicó en la editorial Debate sus dos primeros libros de relatos, Los aéreos y Belinda y el monstruo; fueron recibidos con entusiasmo por la crítica y situaron al autor en un lugar muy relevante dentro de su generación. Relatos en los que con una sintaxis compleja, aguda y llena de malicia se retrataban «las almas interiores» de personajes sometidos a las condiciones de una educación restrictiva y a un proyecto existencial predecible. El juego de rupturas y el agrietamiento de estas expectativas hacen de los relatos de Magrinyà una lectura repleta de inteligencia y atractivo. Este libro, además de los cuentos publicados en los dos volúmenes señalados, recoge cuatro piezas narrativas inéditas.
En Cemiterio de elefantes o protagonista é a noite, a noite como sinónimo de maxia, de complicidade, de vida, de esperanza, de encanto, pero tamén de erosión, de soidade, de clandestinidade, de anonimato, de silencio e de frustración. Cunha estrutura singular e ubicado no espazo xeográfico de Vigo, este libro cóntanos -con frescura, humanidade e ironía- historias nocturnas e urbanas cargadas de melancolía e humor que nunca nos deixan indiferentes. As páxinas de Cemiterio de elefantes percorren con acidez a paisaxe nocturna, a través de certa estética radiofónica. Na súa escrita húmida refúxianse noctámbulos, camareiras, travestis, estudantes, taxistas, varredores, persoas solitarias, insomnes, xornalistas... que gozan ou sofren o efecto devastador da noite descubrindo as entrañas da cidade. Espazos literarios e personaxes de Fran Alonso como Almas perdidas, Corazóns Solitarios e a Señora Lola naceron neste libro, cuxa trama comeza ás 12.00 AM, cando a noite cae sobre Vigo, e remata ás 8.00 AM, co amencer dun novo día.
Demasiado rojo es la excusa que esgrime Beltrán, protagonista del primer cuento, cuando le sacan del cuarto a rastras tras cometer su delito. Adelina, en otro de ellos, posee una voracidad inmensa, tan monstruosa que acogota a la madre incapaz de satisfacer su apetito. El soldado que se encuentra desnudo con una mujer del Vietcong, luchará entre el miedo a perder el pellejo y su irreprimible instinto sexual ante la mujer y su fusil. Pero tan rotundos como todos estos hombres y mujeres, es la fuerza de la conciencia que se reprocha y dialoga consigo en la noche, el sueño y la pesadilla, en un continuo avance, cuento a cuento, hacia un final de soluciones desesperadas sustentadas por alguna loca ilusión, puede que la última. Gustavo Dessal instala a sus personajes ante el conflicto de existir en estado puro, frente al instante definitivo que marca el destino.
Xurxo Souto convida aos lectores de Contos da Coruña a unha apaixonante viaxe ao fondo da memoria desta cidade e dos seus barrios populares, As Xubias, Eirís, Os Castros, A Gaiteira, Oza, O Montiño, Monelos, Elviña, Fontán, San Roque, O Labañou, que resumo son da Galicia toda. A Coruña que Xurxo Souto contempla colectivamente tracexada como unha cidade de músicos e navegantes, entre o palco da festa e o peirao do Muro, polo toque do acordeón e o golpe de mar. Xurxo Souto descúbrenos unha cidade inédita para os medios de comunicación: a Coruña como unha cidade atlántica (onde sopra o vento de Nova York), enxebre e cosmopolita; como unha pedra chantada no océano; como unha cidade que naceu do mar e no mar ha ter o seu futuro. Contos da Coruña é un primeiro e único manual de épica cascarilleira. Velaquí as grandes historias de heroes anónimos da Coruña como o Periquete, o patrón máis novo que mandou un pesqueiro de altura; os percebeiros da Punta Herminia; Pucho Boedo e Sito Sedes, cantantes preciosistas; o ciclista Clemente; ou Manuel Cajaraville, o gran bailador de Aturuxo e Cantigas da Terra. Velaquí un periplo tasqueiro insólito, que nos leva dende o Bar Los Claveles, sede do esplendor da tapa de orella prensada, ata A Toquera, refuxio de mariñeiros, ou á apoteose de os Peteras dos Belés, taberna fermosa no medio das torres de Monelos. Velaquí un libro que recolle tamén a primeira antoloxía do cantigueiro cascarilleiro, inzada de emocionantes repichocas e cantareas de historias lindas da memoria popular. Contos da Coruña é, pois, un convite fraternal para armar un poderoso periplo tasqueiro no que procurar toda a xenerosidade gastronómica das nosas comarcas e das terras estremeiras de Galicia, agora felizmente cartografadas nos bares, tascas, baiucas e adegas do vello plano da Cidade do faro. Contos que arroutan o peito e aclaran a gorxa para nos dicir quen somos e que facemos neste curruncho da Humanidade ao que ben chamamos Galicia.
Un hombre en el ocaso de su vida tiene una última cita con la persona de sus sueños, un treintañero debe lidiar con problemas de impotencia en plena cima sexual, un genial cineasta es incapaz de rodar de nuevo tras realizar su obra culmen, una pareja gay viaja con sus madres al santuario de Fátima para pedir a la Virgen por el éxito de su cercana boda… Los protagonistas de Hombres de verdad enfrentan las contradicciones que supone ser varón hoy en día, atrapados entre el rol tradicional de la masculinidad dura, insensible y dominante, y la lucha por alcanzar el territorio de la emoción, los afectos y la fragilidad. Para ello deberán cuestionarse su papel en el amor, el deseo, la religión, los miedos o la creación artística, pero ¿qué estarán dispuestos a sacrificar para convertirse en «hombres de verdad»? Alberto Marcos se interna con su nuevo libro en las masculinidades del siglo xxi marcadas por el nuevo escenario de igualdad que el feminismo está construyendo; nueve cuentos que ahondan en las inseguridades tradicionalmente tapadas y heredadas durante generaciones. Una nueva e imprescindible mirada que urge leer y sobre la que urge pensar. Un libro urgente para los hombres de verdad. Para lectores y lectoras de verdad.
Las Mil y una noches del siglo XXI. Escuchad. Dejad que os guíe en un viaje hacia los confines de la imaginación. Dejad que os cuente una historia... Así empieza a hablar Osama, el hombre recién llegado a Beirut que a lo largo de estas páginas nos desvelará los secretos de su estrafalaria familia y muy en especial del abuelo, un hombre que había dedicado su vida al ilustre oficio de contar historias en bares y mercados. Nadie como él sabía hablar de héroes y villanos, de princesas y esclavas, de tesoros ocultos en ciudades encantadas; nadie sabía mezclar tan sabiamente los hilos de la realidad y la leyenda; nadie, en fin, mejor que él para hacer de la vida un cuento mágico. Osama decide seguir los pasos del abuelo y El contador de historias es su manera de llevarnos a un mundo donde todo es posible, incluso la felicidad. «Si te apasionan las historias de amor, lee El contador de historias.Si prefieres aventuras, lee El contador de historias.Si lees para estar informado, lee El contador de historias.Si solo lees clásicos, también disfrutarás con El contador de historias.Rabih Alameddine es nuestro contador de historias y muy prontotodo el mundo sabrá pronunciar su nombre.»Amy Tan
Este libro, publicado en 1993, narra la historia de un descubrimiento tan hermoso e impactante como enloquecedor: un libro de libros, auténtica "obra maestra desconocida" de la Literatura, matriz oculta y huidiza convertida enigmáticamente en el libro de los libros... donde la maestría perecquiana navega entre las aguas siempre ambiguas de una narrativa que contiene su propia teoría literaria.
EL SOL DE NOCHE Ella es de esa gente que fuma en las cuestas, que se bebe un litro de coca-cola de un trago, que sonríe cuando la expulsan de clase y se tira vestida a la piscina, ella es la amiga-vendaval, ésa que te arrastra y te asusta, que adoras y temes, que te dice ven y sabes que algo va a pasar. Ven me dice. Y voy, esta vez a la fiesta que hace Pablo, porque sus padres se han ido, y cuando llegamos todos nos saludan y nos ofrecen porros y la música sube de volumen, y ella grita y salta, y dice «esto es guay, qué de puta madre», y tira de mi brazo y lo sacude al ritmo del chunda chunda, y me hace sentir que bailo bien, pero luego me suelta y el ritmo se me escapa y cuando me vuelvo a buscarla no está, pregunto por ella y está en el baño, preparando una sangría en un barreño, remueve con el brazo el vino, la fruta, el hielo que los demás van echando y luego saca la mano y me mete los dedos en la boca, «pruébala, qué le falta», y yo no encuentro que nada le falte, más bien diría que se ha pasado con el vino, pero no me atrevo a decírselo, porque ella ya está sorbiendo asomada al borde del barreño. Luego, a la hora de «qué mala estoy, todo me da vueltas», soy yo quien la sostengo en medio de la calle, y sus vómitos me huelen siempre a lo mismo, como si no comiera otra cosa que hígado empanado y coliflor, se lo digo y se ríe, y luego sigue vomitando, y quisiera taparla de las miradas de ese señor que no nos quita ojo, pero mi cuerpo no da para tanto y ella dice «joder, siempre igual», y siento que está cansada, pero la animo a seguir caminando, casi cargo con ella, entre las dos no juntamos para el taxi y el metro la marearía más, así que caminamos y caminamos por la ciudad de noche, bajo la luz de las farolas y de una luna tan brillante que parece una bombilla desnuda, y entonces recuerdo que la luna no tiene luz propia, que el sol le presta su reflejo, y qué, me encojo de hombros, ahora es el momento de la luna, brillará toda la noche hasta que el sol salga de nuevo, pero eso no será hasta mañana.
Sania continuó toda la noche relatando, fiel a su tradición. Sólo al llegar el alba me percaté que se limitaba a mover sus labios y que su garganta no emitía sonido alguno. Los cuentos que ella desgranaba en realidad eran mis propios cuentos, mi propia historia. ¿Pudiera ser que yo escribiera realmente palabras que Sania me dictara por medio de alguna sutil hipnosis a la que me había sometido?¿ Pudiera ocurrir que estos cuentos estén escritos por cada uno de ustedes?
Tejer las palabras para que comprendan por qué Violeta existe. Ese es el complejo trabajo que le toca a este hombre de manos largas y grandes orejas, que de tanto escuchar terminó hablando de sí mismo, al menos en el cincuenta por ciento de los casos. Quieto se quedó frente a la espesa blancura del papel blanco y pensando descubrió que estas cosas primeras no son más que el espejo de una infancia mágica, llena de juegos callejeros, y de los amigos que, de joven, le iniciaron en el lento aprendizaje de la dignidad, y de las Islas que lo parieron y lo llenaron de veredas verdes y de las escudillas de amor, que de tanto llenarlas acabaron rebosándose y esparciéndose por toda su casa, que en este caso es sólo su propia existencia. Usando unas lonas gastadas, estuvo este hombre andando y halló a los poetas y a los libros que creía que se habían quedado en el olvido. Impensadamente se le salieron todos los aprendizajes y se fueron colocando con la alegría del desorden, compartiendo espacio con estrellas y lunas que alumbran su corazoncito rojo. Es así que le robó unos versos a Neruda para hacerle un regalo a dos jóvenes amantes o puso en boca de la poesía zapatista las palabras de un Benedetti que sigue asombrándolo o se descubrió en el lenguaje insurgente y tierno del Subcomandante. Repasó sus escritos a medida que iban naciendo a la luz y comprobó que lo que decían, aún siendo suyo, tenía palabras de miles de lecturas que, ahora se da cuenta, se quedaron trabadas en su memoria. Ocupó el tiempo de los últimos trescientos sesenta y cinco soles en escribir lo que quería decir y no lo que ustedes quisieran oír.Meciendo las palabras, para que descansaran, acurrucadas en su aplastada barriga, este hombre revivió sus amores de antes y siguió viviendo los de ahora. Ubre a ubre fue ordeñando todos los besos, pues dibujándolos se quedarían siempre con él. Jugueteando con sus manos que saltaban de la a hasta la p y volvían, con cierta rapidez, de nuevo a la a, fue levantando un muro fuerte que aislara al ostracismo. En esas circunstancias, las amantes y los amigos se volvieron cuentos. Recolectó sus viajes y sus causas y comprendió que podía sonreírse con los absurdos que no esconden más que metáforas. Despacito fue desenredando la madeja de sus afectos y cogiendo nalgas con sus manos. Enternecido por las voces de una piel morena, se mojó en la arena rubia de un desierto por conquistar y de una esperanza que se cubre de melfas negras y verdes y naranjas y rojas... y también de melfas libres. Miró incansable por la ventana y descubrió el árbol de los nísperos y la enredadera espesa que cubre la canal del molino viejo. Estuvo así tiempo, hasta que decidió dedicar sus escritos al padre que lo engendró y a la madre tierna que los parió, a este hombre y a la mujer que un día es pelirroja y otro rubia y, al siguiente, nada más que castaño. Navegando por mares de resistencia decidió, por último, que su puesto estaba junto al ejército de hormiguitas que, lentamente, van horadando al mundo. Todas las palabras que estaban por el aire también se unieron al frenético trabajo del hormiguero. Así, laborando sin pausa, es que nació Violeta y el resto de las cosas primeras que, nada más crecer, se encadenaron a las voces de la rebeldía.
Si te gustan los cuentos y eres una persona curiosa que te encanta observar el mundo, este libro está escrito para ti. Los protagonistas son niños y niñas como tú que solucionan los conflictos que les surgen gracias a sus conocimientos de matemáticas, po