En septiembre de 1968, la Unesco celebró en su sede de París la Conferencia Intergubernamental de Expertos sobre las Bases Científicas para un Uso Racional y Conservación de los Recursos de la Biosfera y, tres años después, puso en marcha el Programa sobre el Hombre y la Biosfera, del que nació en 1974 la idea de crear las reservas de la biosfera («zonas de ecosistemas terrestres, costeros o marinos, o una combinación de los mismos, reconocidas en el plano internacional»), constituidas como red a partir de 1976. Las zonas propuestas han de ser representativas de una región biogeográfica cuyos paisajes, ecosistemas y especies requieran ser conservados; han de aportar oportunidades para estudiar y aplicar la filosofía del desarrollo sostenible; y han de disponer de una zonificación adecuada y de territorio suficiente para realizar funciones de conservación, desarrollo e investigación. La declaración por la Unesco de reservas de la biosfera a cuatro espacios naturales de Asturias (Somiedo, Muniellos, Redes y Picos de Europa) no ha hecho más que poner de manifiesto la magnitud e importancia del patrimonio natural asturiano.
En la presente publicación se trata de poner de relieve las principales características geográficas de la Reserva Mundial de la Biosfera de Monfragüe, desde de una visión cartográfica y desde la perspectiva de la accesibilidad. La finalidad por tanto es hacer partícipe a la sociedad de los valores ambientales, paisajísticos, socioeconómicos, humanos y, en definitiva, culturales de un territorio que es patrimonio de todos.