La cocina tradicional de Córdoba es una reliquia del pasado digna de ser conservada para el acervo nacional antes de que nuevas modas gastronómicas nos priven de ella.
Lo mejor de la gastronomía asturiana con una explicación detallada de los ingredientes e instrucciones claras y precisas para la fácil elaboración de las recetas.
Este libro, literario y gastronómico al mismo tiempo, pretende reflejar cuál era la mentalidad y el gusto de los españoles del siglo XIX en lo que atañe a la buena mesa. Incluye un recetario que fue editado en fascículos por la revista madrileña La Risa.
El habitual intercambio de culturas originado por el devenir histórico tiene en Extremadura características especiales que han servido para el desarrollo de una tradición culinaria original, rica, «seria y grave» (en palabras de Néstor Luján): las aportaciones de los conquistadores romanos (principalmente el aceite y el ajo) y árabes (con su gusto por las especias), la pervivencia de la cultura mudéjar y judía, así como los distintos influjos cántabro, asturiano y castellano conforman la singular base de la estructura culinaria extremeña, estructura que aparece estudiada en esta obra con profundidad y amenidad y no solo, como suele ser costumbre, desde sus aspectos meramente culinarios, sino también, lo que es más esclarecedor, desde sus condicionamientos culturales, históricos y etnológicos. Tras un primer bloque en el que se enmarca la gastronomía extremeña en sus coordenadas históricas y culturales, incorpora la obra una selección de más de doscientas recetas (entre ellas, cerca de setenta de repostería), que aparecen explicadas y detalladas, además de con indicaciones para su correcta preparación, con abundantes datos léxicos, referencias literarias y del cancionero popular y apuntes históricos: cabrito, caldereta, lagarto, ranas rebozadas, hornazo, gazpacho, migas, lamprea en escabeche o aceitunas guisás Para completar este itinerario histórico, etnológico y gastronómico sobre Extremadura, se incluye un apartado final con términos del léxico popular extremeño.
El singular i atractiu personatge que va ser Ramon Llull, perd importància quan es contempla la gegantina obra sorgida de la seva ploma. Al prop dun quart de milenar dobres seves conservades, hi sovintegen referències a la vida quotidiana de lèpoca. En les descripcions que hi fa sobre la societat del seu temps apareixen comptades, però ben valuoses i representatives referències sobre cuina, gastronomia i alimentació. Aquestes informacions permeten aventurar algunes suposicions sobre lentorn social i personal en què es va moure. Els plats que esmenta han de ser necessàriament menjars amb els quals és raonable creure que devia estar ben familiaritzat. Fora dalgunes al·lusions circumstancials a la cuina de les gents modestes, pertanyen principalment al que podem considerar que va ser la taula senyorial medieval. No debades havia estat un dels majordoms de la Casa del Rei de Mallorca, enlairats servidors que vetlaven la idoneïtat dels aliments destinats a la taula reial, organitzant i decidint els dinars i banquets servits a la cort mallorquina. Les notícies de la taula coneguda per Llull es poden completar amb la reproducció de receptes que figuren en els manuscrits de lèpoca. La seva elaboració és exposada per un equip de cuiners de lEscola dHoteleria de les Illes Balears. El resultat final, es pot veure en la fotografia que acompanya cada recepta. És una proposta que voldríem que fos agradosa per a tots aquells qui vulguin conèixer materialment com va poder ser la cuina que va tastar Ramon Llull.
Este libro é unha viaxe pola xeografía, historia, literatura e gastronomía do polbo. Logo dunha breve visita a estas disciplinas, a autora describe 67 receitas para cociñar o cefalópodo. A maioría proceden dunha cociña familiar atlántico-mediterránea. Hai algunha incursión noutras cociñas, como a oriental, e nunha cociña que poderiamos denominar moderna ou actual. En calquera caso, todas as receitas poden ser elaboradas con facilidade por calquera persoa, aínda que non sexa experta en cociña.