?Los guerrilleros suicidas que atacaron Washington y Nueva York el 11 de septiembre de 2001 hicieron algo más que matar a miles de civiles y demoler el World Trade Center. Destruyeron el mito dominante de Occidente.? Así comienza John Gray este breve e intenso libro que trata sobre la creencia que ha dominado nuestras mentes durante un siglo y medio: la idea de que ser un ciudadano moderno significa también ser más amistoso y razonable. Pero nada podría estar más lejos de la verdad, argumenta Gray. Al Qaeda, por ejemplo, es un producto de la modernidad y de la globalización, y no será el último grupo terrorista que utilice los productos del mundo moderno para conseguir sus objetivos.
Este libro es una fascinante exploración sobre la naturaleza de la identidad cultural estadounidense, todavía en estado de shock tras los acontecimientos del 11 de septiembre de 2001. De hecho, la devoción patriótica que siguió a los atentados se plasmó, entre otras cosas, en la venta de 250.000 banderas en unos conocidos grandes almacenes a lo largo de un solo día. Pero esta súbita reivindicación de la enseña nacional era sólo la evidencia física de algo mucho más importante: el renacimiento del orgullo en gran parte del pueblo de Estados Unidos, un sentimiento que había permanecido en estado de letargo desde hacía mucho tiempo. Para algunos todo se redujo a los McDonalds, a Walt Disney y al béisbol. Para otros, la reivindicación de esos valores debía remontarse a los primeros británicos que se establecieron en aquellas tierras, a la que legaron su cultura y su lengua. Para los afroamericanos y los latinos, sin embargo, no se trató de nada de todo esto. Estados Unidos ha debido lidiar desde sus primeros días con los problemas de asimilación que supone la existencia en su territorio de culturas distintas. No obstante, hoy debe enfrentarse a una situación aún más peliaguda: la facilidad con que los inmigrantes pueden mantener los vínculos afectivos con su cultura de origen ?llamadas a larga distancia, emisoras de televisión en su propio idioma, billetes de avión a muy bajo precio--, con el distanciamiento que ello supone respecto a los nuevos valores de su país de adopción. ¿Quiénes somos? es uno de los libros más importantes de los últimos tiempos, una investigación a la vez histórica y cultural que, como los trabajos previos de su autor, provocará sin duda un encendido debate político e intelectual.
Una biografía tan larga como la del socialismo, todavía sin concluir, no permite balances simplificados. Por lo menos hay que resistirse a la inmediata tentación de hablar de fracaso. No sería justo con los esfuerzos de tanta gente y, sobre todo, no sería cierto. No podemos ignorar que el ideal socialista se utilizó para legitimar la barbarie totalitaria, pero tampoco que buena parte de los derechos y de las conquistas sociales que hoy nos parecen irreversibles no existirían sin la lucha política de los socialistas. Y, entre esas conquistas, una muy fundamental: la democracia.Excluidos los diagnósticos rotundos, con el repaso de las conquistas y las derrotas, de las experiencias y de las propuestas, Proceso abierto permite atisbar los retos a los que se enfrenta cualquier intento de refundar el proyecto socialista. Dentro de las posibilidades de prospección de la teoría social, el proyecto habrá de encarar las tres tareas de siempre: precisar el ideario, señalar el objetivo y sugerir el camino. En este libro se abordan esas tareas desde la perspectiva de la filosofía política. El examen de los modelos clásicos del socialismo y de las propuestas contemporáneas (Tercera Vía, renta básica, republicanismo y Estado del bienestar) constituye el punto de partida de una reflexión que busca precisar el conjunto de valores que está en la base del ideal socialista y las dificultades que deberá superar un socialismo que no ignore la realidad pero que tampoco quiera abandonar su vocación emancipadora.
¿Cómo se gestionan las diversidades en Europa en el siglo XXI? ¿Existen diferencias entre los países europeos? ¿Reciben la misma consideración la gestión de las diversidades étnicas y culturales que las religiosas, especialmente la musulmana? La respue
Pese a ser uno de los campos más explotados en la filosofía contemporánea, las teorías de la justicia, al concentrarse en los principios normativos, abstractos, han quedado a menudo al margen de la realidad social. Axel Honneth se propone aquí un objetivo de gran alcance: trazar una teoría de la justicia situada en sus contextos histórico y social a fin de mostrar el modo en que determinadas instituciones dan cabida a un grado mayor o menor de libertad. Para ello, introduce un enfoque por completo novedoso, que le permite derivar los criterios más significativos de la justicia social a partir de las reivindicaciones normativas que han evolucionado en las sociedades liberales y democráticas de Occidente. Juntos, esos criterios y esas reivindicaciones constituyen lo que él define como una "eticidad democrática": un sistema que está anclado tanto en la ley como en normas de acción institucionalmente establecidas que poseen legitimidad moral. Saludada como una obra maestra por la crítica, 'El derecho de la libertad' fue considerada por la prensa alemana como "un logro impresionante" ('Taz'), un "plan monumental ('SZ') e, incluso, como "un acontecimiento en la historia de la reflexión teórica" ('Die Welt').
Jacques Attali cuenta en estas páginas la increíble historia de los próximos cincuenta años tal como se puede imaginar a partir de cuanto se sabe de la historia y de la ciencia. Pone de manifiesto cómo evolucionarán las relaciones entre las naciones y cómo las convulsiones demográficas, los movimientos de población, las mutaciones del trabajo, las nuevas formas del mercado, el terrorismo, la violencia, los cambios climáticos y la influencia de lo religioso, vendrán a perturbar nuestra vida cotidiana.. Revela también cómo unos progresos técnicos asombrosos revolucionarán el trabajo, el ocio, la educación, la sanidad, las culturas y los sistemas políticos; cómo costumbres hoy en día consideradas escandalosas serán un día admitidas. Muestra, finalmente, que será posible ir hacia la abundancia, eliminar la pobreza, conseguir que cada persona se beneficie equitativamente de las ventajas de la tecnología y de la imaginación mercantil, preservar la libertad tanto de sus propios excesos como de sus enemigos, dejar a las generaciones venideras un medio ambiente mejor protegido, hacer surgir, a partir de todas las sabidurías del mundo, nuevas maneras de vivir y de crear juntos.
Estudio y selección de textos de algunos dirigentes políticos y juristas que durante la Segunda República se manifestaron más abiertamente sobre la organización nacional de España, especialmente en el período constituyente (1931) y en la discusión de los estatutos catalán (1932), vasco (1936) y gallego (1938), reflejando el pensamiento jurídico-político del momento. Francisco Caamaño, ex ministro de Justicia firma la presentación donde dice: «La antología de textos sobre el pensamiento territorial en la II República incorporada a este volumen desmiente la alentada creencia de que el estado autonómico es una forma adaptada de estado federal y nos advierte sobre lo fácil que resulta tropezar reiteradamente en la misma piedra. A nadie escapa que aquel pasado persiste vivo en nuestro presente como una criatura insatisfecha. Ni nadie duda sobre la ineficacia del estado autonómico para ofrecerle una salida convincente. Warning! Quienes prefieran seguir creyendo que el estado autonómico es, con algún retoque, la versión española de un estado federal, abandonen ahora la lectura.
El gobierno de los vivos es un curso fundamental dentro del magisterio de Foucault. Impartido en el Collège de France en el primer trimestre de 1980, en él Michel Foucault continúa con la historia de los «regímenes de verdad» que atraviesa todos sus cursos, con una inflexión importante: comenzado en el campo de lo jurídico y lo judicial, la exploración continúa en el campo político, en los informes temáticos de poder-saber y de gubernamentalidad. Aquí se investiga, pues, en el campo de las prácticas y de las técnicas del yo, campo de la ética que Foucault nunca abandonó. «¿Cómo es que en la cultura occidental cristiana, el gobierno de los hombres demanda de parte de los dirigidos, además de los actos de obediencia y sumisión, actos de verdad que tienen la particularidad de que no solo se exige al sujeto que diga la verdad, sino que la diga acerca de sí mismo», se pregunta Foucault. Esta propuesta le conduce a una relectura del Edipo Rey de Sófocles y al análisis de los «actos de verdad» propios del cristianismo primitivo, a través de las prácticas del bautismo, la penitencia y el control de la conciencia. Michel Foucault opta por centrarse en los actos por los cuales el creyente se ve obligado a manifestar la verdad de lo que es él mismo, en tanto que ser infinitamente falible. La expresión pública de su condición de pecador, en el ritual de la penitencia y en la verbalización puntual y minuciosa de sus pensamientos más íntimos en el examen de conciencia, es la organización de una economía pastoral centrada en la confesión que vemos emerger. El gobierno de los vivos es la primera de las investigaciones, no publicadas, en la que Michel Foucault se adentrará en el campo de la ética, y la que luego seguirán los cursos del Collège de France y los últimos volúmenes de la Historia de la sexualidad.
Este manual intenta analizar la trayectoria del pensamiento político español desde una perspectiva no abstracta, sino contextualista. Es decir, que los planteamientos filosóficos y políticos que van a ser descritos en el texto han de verse en su contexto histórico y considerarse como producto de una fase concreta de la historia de la sociedad en que se produjeron, en este caso la española, desde el Renacimiento hasta el final del régimen político acaudillado por el general Francisco Franco. Y es que las ideas políticas y/o filosóficas separadas del contexto que les dio vida, pierden su poder y su racionalidad.
Esperanza Aguirre, la política española más importante de los últimos treinta años, nos cuenta por primera vez sus experiencias y reflexiones políticas. Con el lenguaje claro y directo que la caracteriza, Aguirre nos habla del pasado, del presente y del futuro de nuestro país. Un libro muy oportuno en un momento decisivo para España.
«Manolo Monereo vivió los años de la clandestinidad, en los que uno no podía decirse libremente comunista, y aun así nunca cedió en su empeño por mejorar su patria, sí, su patria. Fue detenido, torturado en comisaría, encarcelado, y cada vez que regresaba a la calle continuaba con su labor política. Vivió los años de la Transición, las decisiones de Santiago Carrillo; su partido, el Partido Comunista de España, que en el fondo nunca podrá abandonar, lo despreció; participó en la construcción de Izquierda Unida, caminó junto a Julio Anguita en los años en los que este quiso que la coalición dejara de ser muleta del PSOE para ganar por la izquierda; asistió en primera persona al ideario y construcción de Podemos Manolo Monereo perdió no una, sino muchas batallas, pero siempre volvió a levantarse. Es posible pensar que Manolo Monereo siempre ha sido un idealista, que siempre apostó por aquello que finalmente no ganaba y, sin embargo, el tiempo parece ahora darle la razón.» Manolo Monereo es una de las personas más influyentes de la izquierda española de los últimos 40 años, desde la clandestinidad en el PCE hasta la aparición de Podemos. Siempre entre bambalinas, ha asesorado a gobiernos de izquierda latinoamericanos o a la Izquierda Unida de Julio Anguita. Hasta hace bien poco, ha sido miembro del consejo ejecutivo de IU y, al mismo tiempo, ha sido una influencia fundamental para los fundadores de Podemos. Héctor Juanatey es periodista y colabora con medios como Publico.es o La Tuerka.
España se enfrenta, en los próximos años, a una encrucijada histórica. Por un lado, se le presenta un camino aparentemente fácil, el del estatismo y el populismo, la vía hispana al subdesarrollo seguida por Venezuela y por Argentina, por la que España siempre se ha visto tentada. Por el otro, está una senda que exige cambios importantes a corto plazo, pero que puede hacer que la economía y la sociedad sean más productivas.Elegir el segundo camino supone llevar a cabo reformas al menos en tres áreas prioritarias: la educación, para que sea menos memorística y se centre más en los aspectos analíticos; las instituciones económicas, para asegurar un mercado mucho más transparente, y las instituciones políticas, para incrementar la calidad de nuestras élites y que de verdad rindancuentas ante los ciudadanos.En este libro, el economista y catedrático de la London School of Economics Luis Garicano apuesta decididamente por esta segunda vía, basada en la inversión en capital humano, la reforma en profundidad del Estado y de la justicia, y el obligado cumplimiento de las normas, y propone una visión realizable de lo que España tiene que hacer para salir del marasmo en el que se encuentra.
El objetivo de las lecciones de Rawls era, según él mismo escribió, «distinguir los elementos fundamentales del liberalismo como expresión de una concepción política de la justicia cuando éste es contemplado desde dentro de la tradición del constitucionalismo democrático». Para ello, examina las diversas corrientes que configuran las tradiciones liberal y democrática constitucional, así como las figuras históricas que mejor representan estas corrientes.