A partir de documentos poco conocidos, el autor nos presenta los acontecimientos esenciales de la época, describiendo el entorno de Napoleón y analizando los secretos de sus triunfos y las razones profundas del fracaso del imperio.
La sublevación fascista de julio de 1936 convirtió en un infierno la ciudad de Salamanca, donde residía Miguel de Unamuno. Cuando se cumplen setenta años de la muerte del autor de niebla y del sentimiento trágico de la vida, rescatamos este libro «emocionante» (Patxo Unzueta, «El País») que se centra en los últimos meses de su vida, los que van desde julio hasta diciembre de aquel fatídico año. Egido recrea no sólo una ciudad estremecida por los horrores cotidianos, sino también el particular vía crucis de Unamuno y sus contradicciones íntimas en el inicio de la guerra. En efecto, al principio, Unamuno se había alineado en las filas de los nacionales y el gobierno republicano lo destituyó de su cargo de rector vitalicio de la universidad. Poco después, el gobierno de los sublevados, al frente del cual no tardaría en erigirse el general Franco, lo nombró de nuevo rector. Pero la ferocidad de la represión en la retaguardia, los fusilamientos masivos y las venganzas personales provocaron que aquel anciano enfermo, derrotado y trágicamente aislado se rebelara el 12 de octubre contra las autoridades y proclamara, en su discurso con motivo del Día de la Raza, una célebre y valiente denuncia («Venceréis, pero no convenceréis») ante Millán Astray, fundador de la Legión, en el paraninfo de la universidad salmantina.
Pobre niña rica, coleccionista de maridos y de cuadros, fundadora de la galería y de la colección que dieron entidad al arte del siglo xx, viajera, amante de la noche y de la vida social, gran lectora, divertida, manipuladora, complicada... el perfil humano y profesional de Peggy Guggenheim se desvela por fin en esta biografía breve pero completa, basada en el propio relato de su protagonista y el de quienes la conocieron. Y de fondo, todo el mundo cultural europeo y estadounidense del último siglo.
Con este libro pretendemos acercarnos a la vida y a la obra de Antonio Cruz García, Antonio Mairena (1909-1983). Fue cantaor de Flamenco -de Cante gitano-andaluz, como decía él-, quizá el más grande e influyente -junto con Camarón de la Isla- de la segunda mitad del siglo XX. Creó una escuela muy representativa, el mairenismo, con artistas de la talla de José Menese, Juan Peña El Lebrijano o José de la Tomasa, entre otros. Alcanzó los máximos honores que un artista flamenco pudiera obtener en su tiempo, desde la preciada Llave de Oro del Cante (1962) hasta la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo, la Medalla de las Bellas Artes, y el nombramiento a título póstumo como primer Hijo Predilecto de Andalucía (1983). Además de estos méritos, dejó una obra discográfica de inconmesurable amplitud y de alta calidad. Sin embargo, algunos de estos aspectos han pasado a un triste segundo plano por las críticas, más o menos fundamentadas, a sus ideas y escritos. Escribir sobre un cantaor tan influyente como criticado resulta hoy un reto que requiere tomar la distancia necesaria que nos ha facilitado el paso del tiempo. Y sin dejar de reconocer nuestra profunda admiración por el cante de Antonio Mairena y los aspectos y consecuencias de su discutida y discutible obra literaria, este libro pretende que resaltar lo que, a nuestro juicio, debe importar por encima de la literatura: su arte flamenco fundamental y eterno.
Julián Zugazagoitia es sin lugar a dudas uno de nuestros grandes periodistas olvidados, y Guerra y vicisitudes de los españoles una obra fundamental a la hora de entender la guerra civil española. Publicado en París en 1940,fue su último libro, y probablemente el más importante testimonio de aquel terrible conflicto, desde el golpe de estado del 18 de julio hasta la caída de Madrid y la angustiosa espera en Alicante. Dos motivos justifican esta importancia: la cercanía del autor a los acontecimientos y la objetividad inconcebible en aquel momento, la lúcida convicción de que la reconciliación era la única salida posible. Así, en el prólogo a esta obra, escribe el propio Zugazagoitia en el triste exilio parisino de los perdedores:«Prefiero pagar a la maledicencia las alcabalas más penosas y ser cobarde para quienes me disciernan este dicterio, renegado para los que por tal me tengan. Escéptico, traidor, egoísta... todo me parecerá soportable antes de envenenar con un legadode odio la conciencia virgen de las nuevas generaciones española». Para esta edición hemos contado con la inestimable colaboración de José María Villarías, historiador y nieto del autor, y un oportuno prólogo del profesor Santos Juliá.
American Madness American Madness ofrece un repaso exhaustivo de la creación de Darkness on the Edge of Town, considerado unos de los mejores discos de Springsteen, tanto por la crítica como por los fans. Profusamente ilustrado con más de 100 imágenes -muchas inéditas- de los fotógrafos más relevantes de la época (Frank Stefanko, Eric Meola, Lynn Goldsmith, Chuck Pulin, etc), sigue el proceso de gestación del álbum, demuestra su importancia en el canon del rock & roll y recorre la gira paso a paso. Constituye un riguroso trabajo de investigación que no deja cabos sueltos, enmarca Darkness on the Edge of Town en un vasto tapiz de influencias políticas, sociales y culturales, y despeja dudas a través de entrevistas realizadas a quienes participaron directamente en la gestación del disco, como Dave Marsh, Jon Landau, Stefanko o Meola. Una narración absorbente, escrita con una prosa de alto voltaje, a medio camino entre el ensayo literario y el estilo novelesco, que sitúa la crítica musical española a la altura de los mejores precedentes anglosajones. Como complemento, incluye el póster del mítico concierto en el Capitol Theater, en Passaic, Nueva Jersey.
Ocho años después del libro de viajes más popular de la segunda mitad del siglo xx, Cela nos volvió a regalar un magnífico retrato de los paisajes y los paisanajes de Castilla la Vieja envuelto con la mejor prosa castiza.
Escrita al dictado meses antes de morir, esta impactante narración contiene la segura, certera y deslumbrante capacidad poética de los más importantes escritos de McCullers. Con la espontaneidad de un soliloquio confidencial, la autora nos relata su infancia feliz en Georgia, las consecuencias de su precoz éxito como escritora o su implícita bisexualidad. El rostro desconocido de la vida americana de la primera mitad del siglo XX, con la fuerza de una existencia contemporánea.
Borges. Esplendor y derrota ganó el VIII Premio Comillas de biografía, autobiografía y memorias. Ha pasado ya un tiempo razonable después de su muerte para que, a partir de ahora, aparezcan varias biografías de Jorge Luis Borges, sin duda uno de los escritores más importantes de nuestro siglo. Ahora bien, probablemente pocas podrán a la vez dar un testimonio personal y responder a una indagación rigurosa de fuentes que hasta ahora habían guardado silencio como esta biografía de María Esther Vázquez, que no sólo instala al lector en el mundo privado de un Borges entrañable y sorprendentemente desconocido, sino que da igualmente cuenta del entorno social e intelectual en el que se desarrollaron su vida y su obra incomparable. En efecto, éste es el relato minucioso, matizado con novedosas y a veces polémicas anécdotas, sustentado a la vez por una sólida investigación, de una dilatada amistad: la que unió hasta el final a Vázquez con Borges. Así, van desplegándose la infancia del escritor en el barrio de Palermo en Buenos Aires, su juventud en Europa, su particular relación con la familia y sobre todo con la madre, Leonor, y la ama muy querida, Fani. No menos importancia tienen sus contactos con el grupo español de poetas ultraístas, su convivencia con el grupo Sur, liderado por Victoria Ocampo, su amistad con Bioy Casares y otros escritores de su tiempo, sus escarceos políticos, sus apasionados enamoramientos, sus dos matrimonios, la fama tardía, los múltiples viajes y esa muerte solitaria, lejos de sus amigos, en Ginebra. Gracias al trabajo de María Esther Vázquez, el lector de Borges podrá finalmente acceder a la compleja personalidad que ocultaba la genial mente creativa del escritor.
No pretendo hacer en estas páginas una crítica de la obra de Picasso. Ese trabajo corresponde a profesionales, a técnicos en arte. Lo que quisiera es sugerir a través de mis observaciones, por insignificantes que sean, un Picasso más verdadero que el que se conoce superficialmente, un Picasso sin disfraces grotescos que no corresponden a la realidad, sin ese circo que con frecuencia se monta en torno suyo. Y en estos recuerdos, en estas observaciones, quisiera no omitir ningún detalle que permita verle en su espontáneo vivir, para un conocimiento más cercano a su realidad, sin olvidar, en el gesto cotidiano, en la intención directa, en la leve sugerencia, en la palabra de una conversación, el sentido humano que Picasso pone en todo, No con la exactitud mecánica que lo haría un magnetófono ni con la interpretación de una memoria privilegia- da, sino con algo más cercano a la intención y a la emoción del momento en que fue recogido. Con estas palabras justifica Mercedes Guillén su libro, escrito no con el propósito de ensalzar la figura de Picasso -que no lo necesita-, sino de retener aquellas reacciones del pintor que, por su significación permanente, forman parte de su personalidad, pues en ellas "se encuentra lo más constructivo, lo que queda y perdura de su persona.
Si nos preguntaran quién es Alejandro Selkirk, pocos podríamos responder. En cambio, casi todos sabemos quién es Robinson Crusoe, el náufrago de ficción creado por el escritor británico Daniel Defoe hace tres siglos, inspirándose precisamente en la azarosa vida del marino escocés que terminó por dar su nombre a la pequeña isla del Pacífico, donde fue abandonado en 1704 por sus compañeros corsarios tras un amago de motín, y donde se vio forzado a sobrevivir durante cuatro años. DianaSouhami, en esta biografía que acaba de ganar el Premio Whitbread 2002, traslada al lector a las islasde Alejandro Selkirk y Robinson Crusoe, que forman el archipiélago Juan Fernández, en el océano Pacífico oriental, a 34º de latitud sur y a unos setecientos kilómetros de la costa de Chile. La vida de Selkirk, hombre de familia humilde, que fue a parar a un Londres portuario,repleto de bucaneros, sinvergüenzas y empresarios sin escrúpulos, permite a Souhami emprender este magnífico relato de las expediciones piratas que cruzaban todos los mares a finales del siglo xvii en medio de guerras, rivalidades y escaramuzas de toda suerte. El contraste de ese ambiente canallesco con el paraíso natural de la isla de Selkirk es el trasfondo en el que se inscribe este aspecto poco conocido de la historia. Selkirk fue rescatado por un barco pirata y, de regreso a Londres, escribió el libro que permitió a Defoe conocer de primera mano al protagonista real de la historia de su genial Robinson Crusoe de ficción.