Arquitectura del Atlas Mnemosyne, tal como su propio título indica, es una aproximación a la obra más críptica, y a la vez elocuente, de Aby Warburg. Sin pretensión de explicar, sino de solo mostrar, el lector es invitado a un recorrido de múltiples paradas a lo largo y ancho de ella. La arquitectura tiene doble sentido en el presente ensayo; por un lado, se trata de re-trazar una posible arquitectura de Mnemosyne en términos de red de conexiones entre sus elementos y, por otro, de averiguar el papel de la obra arquitectónica en sí en cuanto que documento de la cultura.
?Cantaremos a las fábricas colgadas de las nubes por los hilos de sus humaredas?, clamaba el Manifiesto Futurista en 1918. Eran tiempos de auge del industrialismo y la vanguardia cultural manifestaba, en consonancia, su admiración por la velocidad y la máquina. Ciento diez años después, debemos formular una serie de principios exactamente opuestos. Nos encontramos en un momento crucial, ?el siglo de la Gran Prueba?, en el que la mitigación del cambio climático o una transición ordenada a sociedades sostenibles no será posible sin un completo cambio de valores: la diversidad, la sencillez, la durabilidad y el valor de lo próximo son algunos de ellos. Las humanidades ambientales abarcan estudios y propuestas que ponen en común la esfera cultural con la crisis ambiental. Son humanidades que no entienden su separación de la ciencia, y que pueden servirnos para imaginar futuros vivibles, no para trazar utopías irrealizables ni vaticinar escenarios apocalípticos. Se trata de librarnos de la economía como medida de todas las cosas y forjar una cosmovisión alternativa, que coloque el logro de la vida buena y el reequilibrio de la biosfera como metas. Científicos y activistas no cesan de advertirnos del colapso civilizatorio al que nos aproximamos, pero la reacción social necesaria está todavía por llegar. Por eso, las artes que reflejan este cambio pueden servirnos de guía en esta encrucijada, en esta gran prueba: nuevas formas de percibir y sentir el medio ambiente, pueden contribuir, mediante la emoción, al cambio de actitudes.
El arte de dibujar ilusiones ópticas, perfecto para artistas principiantes, empieza con una introducción básica a las ilusiones ópticas y su funcionamiento. Después, Jonathan Stephen Harris nos guía paso a paso en la creación de alucinantes dibujos a lápiz, empezando por unas ilusiones ópticas básicas y progresando hacia otras que encierran mayor dificultad y hacia trampantojos tridimensionales.
Este es la segunda parte de Días ajenos, un diario de diarios. Durante años, Bob Pop escribió su día a día a través de diarios de otros grandes autores que le prestaron sus palabras para hablar sobre sí mismo. Así, Bob Pop documenta su vida con palabras
Este volumen recoge una serie de estudios sobre mosaicos romanos en homenaje a Dimas Fernández-Galiano, arqueólogo y especialista, entre otros saberes, en la musivaria romana. Con sus estudios sobre el Conventus Caesaraugustanus, Carranque, Noheda y tantos otros yacimientos que excavó, dio a conocer a la comunidad científica nacional e internacional estos magníficos conjuntos arqueológicos. Estas son las contribuciones de sus colegas y amigos españoles, franceses, italianos y portugueses del Seminario en torno a los Mosaicos Romanos, en el que siempre participó entre 2006 y 2014. Dimas Fernández-Galiano (Calatayud, 1951 - Madrid, 2015) obtuvo en 1976 por oposición libre la plaza de conservador del Cuerpo de Conservadores de Museos, y en ese mismo año fue nombrado director del Museo Provincial de Bellas Artes de Guadalajara. Con posterioridad se doctoró en Historia por la UCM con una brillante tesis sobre «La musivaria hispano-romana en el Conventus Caesaraugustanus», cuya publicación pasó a ser una obra de referencia acerca de los mosaicos romanos de Hispania. A esta obra científica le seguirían valiosos trabajos de excavación e investigación sobre Complutum, Carranque, Azuara, Noheda y las villas romanas de Soria, entre otros. Además de ser uno de los mejores arqueólogos de su generación, su trayectoria profesional figura vinculada a la puesta en valor, gestión y difusión del Patrimonio Cultural. Colaboran en este volumen: Martín Almagro Gorbea. Real Academia de la Historia José María Álvarez Martínez. Museo Nacional de Arte Romano Jesús Bermejo Tirado. Universidad Carlos III de Madrid José María Blázquez. Real Academia de la Historia Mercedes Durán Penedo. Real Academia de la Historia Antonio Ibba. Universitá degli Studi di Sassari Janine Lancha. Université Lumière, Lyon Filomena Limão. Universidade Nova de Lisboa Guadalupe López Monteagudo. CSIC Purificación Marín Díaz. Universidad de Granada Cátia Mourão. Universidade Nova de Lisboa Luz Neira. Universidad Carlos III de Madrid Rodrigo Pereira.Universidade Federal do Rio de Janeiro Luigi Quattrocchi. Universidad Carlos III de Madrid Ana Ruiz-Osuna. Universidad de Córdoba Manuel Ruiz-Bueno. Universidad de Córdoba María Pilar San Nicolás Pedraz. UNED. Alessandro Teatini. Universitá degli Studi di Sassari
A lo largo de la historia, se han dado diversas formas de relación entre el arte y las matemáticas. La proporción áurea o número de oro, que durante largo tiempo sustentó los ideales de belleza y armonía, la perspectiva o la utilización de distintas figuras geométricas, dan buena cuenta de cómo las matemáticas han constituido desde la antigüedad hasta nuestros días una herramienta fundamental en la creación artística, cuya influencia puede rastrearse en multitud de obras y objetos cotidianos y en diversas disciplinas: en pintura, escultura, arquitectura o música, pero también en fotografía, artes decorativas, diseño de moda o de joyas, etc.; sin embargo, y más allá de su carácter instrumental, también es cierto que los objetos matemáticos, tales como las distintas figuras geométricas o, más recientemente, los fractales o el arte digital, han llegado a convertirse en los protagonistas de numerosas obras artísticas. Orientado a lectores de todos los niveles educativos, este libro nos aproxima, mediante sencillas explicaciones de los principales conceptos matemáticos y construcciones geométricas y de numerosos ejemplos y actividades a partir de una amplia variedad de obras artísticas, al aprendizaje del arte a través de las matemáticas y de las matemáticas a través del arte.
Eduardo Aunós (Lérida 1894-Lausanne 1967) lo fue casi todo: Ministro en dos dictaduras la de Primo de Rivera, la de Franco-, diputado, embajador, Consejero Nacional del Movimiento, jurista de prestigio, Presidente del Tribunal de Cuentas, Caballero de la Legión de Honor de la República de Francia, Presidente del Círculo de Bellas Artes, Presidente del Colegio de Doctores Como ministro de Trabajo con Primo de Rivera logró el periodo de menores huelgas de su época, etapa de la que data su amistad con José Calvo Sotelo, con quien compartiría exilio en París cuando se proclamó la República. No regresaría hasta el final de la guerra. Después, su nombre figuraría entre los primeros cincuenta miembros del Consejo Nacional de FET y de las JONS. Cuando ocupó la cartera de Justicia con Franco decretó la excarcelación de 200.000 presos de la Guerra Civil y, luego, cumplió los encargos del dictador como embajador en Bélgica acompañando en el exilio al gobierno belga. Fue, también, embajador extraordinario en Argentina para un importante acuerdo comercial así como vocal del Tribunal de Responsabilidades Políticas hasta su renuncia. Ideólogo del Estado Corporativo, admirador de José Antonio, monárquico, conservador al tiempo que regeneracionista, católico heterodoxo con inclinaciones espirituales y esotéricas, defensor de la justicia social y de los derechos de las clases vulnerables, precursor de los derechos medioambientales y del mundo animal, productor de cine pero, sobre todo músico y escritor. Tuvo tiempo para convertirse en editor de la colección El Grifón donde publicaría a escritores falangistas y católicos, como a autores nada adeptos al régimen. Su vida personal no fue menos ajetreada. Después de un matrimonio algo forzado, conoció en la cincuentena a la joven licenciada en clásicas María Antonia Morales, cuya relación cobraría fuerza a partir de 1958 cuando se inicia un largo proceso para su anulación matrimonial, casándose primero por el rito ortodoxo en Atenas hasta finalmente poderlo hacer en España poco antes de su fallecimiento.
La publicación en Occidente de Elogio de la sombra (1933) (uno de los ensayos de estética más sugerentes y sutiles del siglo XX, en el que Junichiro Tanizaki (1886-1965) devana con sabiduría y sutileza la importancia de este elemento en las artes y en el sentido estético de Japón, en el cual es indisoluble de la belleza) abrió un fértil campo de reflexión hasta entonces inadvertido, habiéndose convertido hoy en un clásico de referencia. Similares estímulos aplicados a otros campos (los modos y los ritmos de vida y la relación entre sexos) despierta la lectura de los dos ensayos que completan esta edición, " Sobre la indolencia " (1930) y " Amor y pasión " (1931), traducidos por vez primera al español, en los que late la doble tensión entre un Japón que emerge y otro que declina y entre la cultura tradicional nipona y la creciente occidentalización a que se vio sometida a partir del periodo Meiji. Traducción de Emilio Masiá
Este libro constituye uno de los estudios globales más amplio e imprescindible sobre la obra de Ángel Saavedra, duque de Rivas; por este motivo merecía la pena enfrentarse al esfuerzo de traducir y editar el trabajo del hispanista francés Gabriel Boussagol. Rivas fue militar, político, embajador, miembro y director de academias como la RAE, Bellas Artes de San Fernando; miembro de la Real Academia de la Historia; historiador, pintor, pero fue ante todo poeta; así lo destacó Bécquer en su necrológica. Boussagol nos presenta una biografía muy completa del escritor cordobés, ampliando desde el rigor las ya existentes ?Nicomedes Pastor Díaz, Eugenio Ochoa...?. Y completa el libro un estudio minucioso del escritor que, en buena media, comenzó a desmantelar el mito de la razón y las luces; quimeras heredadas de los años más plenos de la Ilustración en las que se educó y volcó su primera obra literaria. Calderón de la Barca, idolatrado por muchos escritores y pensadores alemanes, entre ellos Schopenhauer, representó un emblema para el teatro de Rivas del que prácticamente nunca se separó, pese a pasar por otras influencias como el romanticismo inglés (Walter Scott) o el francés (Víctor Hugo), por ejemplo. En la actualidad, la crítica literaria viene aportando numerosos estudios que dan mayor vigencia y proyección a una obra que nos permite salir del tiempo histórico para entrar en el tiempo de la ficción histórica nacional a través de Don Álvaro o la fuerza del sino, El Moro Expósito y los Romances Históricos, principalmente. La fama la tiene en la pluma, pero también dejó su memoria en el pincel.