Una vez que la cultura contemporánea se ha convertido en una especie de parque temático, las prácticas artísticas en un valor de cambio y la vida en un espectáculo banalizado, podemos preguntarnos: ¿qué sentido tiene seguir hablando de arte y legitimar a
El autor nos recuerda que Moreau contribuyó a formar a Rouault, a Matisse y a los futuros ´fauves´ y nos invita a tomar nota de que en la producción de Gauguin, Kandinski, Brancusi, Klimt, Kokoschka y Picasso puede distinguirse un período inequívocamente