El presente libro se inscribe en una serie de trabajos de documentación sobre arte parietal paleolítico de Cantabria. Se acompaña variada iconografía, en la que se incluyen figuras que permiten situar nuevas evidencia, que hasta ahora habían pasado desapercibidas.
El "Neolítico" en la Península Ibérica ha sido estudiado de forma tradicional desde un enfoque historicista que a partir de los años setenta se ha pretendido sustituir por los presupuestos téoricos-metodológicos de la Nueva Arqueología. Sin embargo, el incremento de los datos no ha ido acompañado sustancialmente por un cambio cualitativo sobre el conocimiento que podamos tener acerca del desarrollo de las primeras comunidades agrícolas-ganaderas y sus procesos de cambio. En la región Sureste de la Península Ibérica, el mayor protagonismo en la Prehistoria ha estado centrado en las llamadas "Cultura de Los Millares" y "Cultura de El Argar". Tan sólo contamos con una mayor información del "Neolítico" en su fase final, la llamada "Cultura de Almería", de la que aún no se ha concretado su significado y contenido, debido a la aceptación general de tales "culturas" u "horizontes". Dada la importancia del Sureste peninsular en el marco de los estudios prehistóricos de la península, era imprescindible la elaboración de una síntesis crítica, desde un punto de vista histórico y social, de cómo se ha enfocado el estudio del "neolítico" en esta región desde la labor de Luis Siret hasta las publicaciones más recientes. Tal labor se hace teniendo en cuenta el contexto histórico-profesional y teórico-metodológico de la Arqueología y la Prehistoria en España. Se finaliza con una valoración de las distintas propuestas teóricas relativas al objeto de estudio, la exposición de una serie de tópicos y la propuesta de un enfoque diferente a partir de los principales debates actuales sobre el "neolítico" peninsular.
Volumen dedicado al Paleolítico y Mesolítico. La información científica que se tiene de este amplio periodo ha mejorado en los últimos años en cantidad y sobre todo en calidad. No solo el arqueólogo cuenta con más medios para acercarse a la prehistoria remota, sino que ha cambiado sus propios intentos de conocimiento. La ciencia prehistórica se ha "humanizado", acercándose al gran público y ganando su interés.