Ir al contenidoArchivos, preservación y digitalización
Este libro describe y reflexiona acerca de la sociedad de la información y la sociedad del conocimiento como el contexto donde surge y se desarrolla la biblioteca digital y de donde proceden los nuevos retos que debe afrontar el bibliotecario ante la producción exponencial de información publicada en formato digital. Con claridad y partiendo de los conceptos básicos y de las tareas tradicionales, se describe la variedad creciente de materiales digitales así como la digitalización de los tradicionales o analógicos, las herramientas necesarias para su tratamiento (normas, metadatos, formatos...) y los recursos para su preservación y acceso. Un ámbito muy interesante, de progreso e innovación, en el que se conjugan las competencias tecnológicas con las intelectuales, el análisis crítico y el compromiso social. En definitiva, una obra que sistematiza brevemente, de manera clara y divulgativa, sin perder el rigor científico, lo que es la biblioteca digital.
No hay duda de que los fondos de protocolos hispanos son uno de los conjuntos documentales más extraordinarios, por la antigüedad, la continuidad y la significación de sus series. Asimismo, son los más consultados por un amplio abanico de usuarios que acuden a nuestros archivos, de una forma especial a partir de la segunda mitad del siglo XX y considerado el carácter interdisciplinar de esta fuente. Cierto es que se ha escrito mucho tanto sobre la institución y la función notarial o su evolución histórica secular, como sobre el documento por ella producido, sus aspectos diplomáticos o las amplias posibilidades de aprovechamiento histórico que ofrece. Sin embargo, son aún muy escasos los trabajos dedicados al análisis de los aspectos archivísticos del protocolo y de los ingentes fondos documentales que estos conforman, desde el mismo siglo XIII. Por ello, este trabajo se configura como un manual básico sobre los archivos notariales o de protocolos, en el que se concede clara prioridad a los aspectos técnicos y archivísticos y se obvian otros relacionados con el derecho o la diplomática, ya tratados en diferentes esferas. Se trata de un manual de archivística sectorial, conciso, claro y con una cierta intencionalidad pedagógica, pero madurado de forma que pueda responder con precisión y certeza a las cuestiones clave que puedan plantearse un archivero, un opositor de cualquiera de nuestros cuerpos profesionales o un usuario de estos ricos fondos documentales.
En el libro se analizan diferentes aspectos sociales, económicos y lingüísticos de la sociedad gaditana en distintos periodos, acercándose a diferentes parcelas de la vida cotidiana. Desde el vocabulario, se analizan la organización social y las relaciones comerciales de la ciudad de Cádiz.
Sin importar que los documentos sean antiguos o modernos, manuscritos o impresos, analógicos o digitales, son la unión casi indisoluble de: texto -contenido- y soporte -continente-. Y aunque los primeros suelen pervivir más que los segundos, cada vez que una obra se vuelve a presentar a una sociedad, su materialización -según el lugar, la época y las técnicas utilizadas- puede modificar y transformar su aspecto y recepción... Ese proceso, tan antiguo como la escritura misma, sigue siendo vigente hoy. Por ello es importante conocer el devenir histórico de los documentos de otras épocas -en este caso el de los "impresos antiguos"-, pues muchos de los fenómenos que ahora se presentan como "nuevos" en el mundo de la información, no son más que un revenant de otros tiempos. Las soluciones con las que otros resolvieron esos "problemas", pueden hoy arrojar luz sobre cómo hacer frente a los retos de las modernas profesiones de la información.
Cuando hablamos de archivos una parte considerable de los ciudadanos se imagina un espacio silencioso, repleto de documentos y con información histórica de gran interés. Más allá de esta visión simplificada, en este libro proponemos una aproximación más dinámica y renovadora de los archivos, en tanto que instrumentos indispensables para una gestión eficiente y responsable de la información, como aliados de las políticas de transparencia y rendición de cuentas, y como espacio de preservación de documentos auténticos, íntegros y fiables para garantizar el libre ejercicio de los derechos ciudadanos.
Los archivos constituyen los almacenes de la memoria de la humanidad. La documentación en ellos acumulada materializa la conciencia histórica de la sociedad. Los espacios que la acogen, de raíz ancestral, amparan la consolidación de la identidad colectiva mediante un proyecto disciplinar sometido a evoluciones diversas. Las razones de la arquitectura se suman así a la experiencia aportada por la archivística moderna, disociada, con la irrupción del Nuevo Régimen, del museo y la biblioteca, compañeros seculares en este largo viaje de la conservación del conocimiento. Sus depósitos contemporáneos asumen hoy todos los retos que la vigente sociedad de la información pone encima de la mesa, plenamente inmersa en el vértigo de la cultura digital. A las demandas surgidas tras la segunda guerra mundial, fruto de los procesos de democratización y descolonización, les sucedieron las agresiones del tiempo posindustrial, añadiendo nuevos interrogantes sobre un futuro incierto que afecta a sus expectativas más inmediatas. Todo un imaginario que este texto pretende, de la manera más elocuente posible, dejar expuesto como un diálogo positivo y abierto, contextualizado, con vistas tanto a su construcción presente como a su mejor legibilidad por los futuros usuarios. Una revisión radical enfocada desde los parámetros clásicos de seguridad y accesibilidad de los archivos, pero también desde criterios plenamente actuales de energía, uso o espectáculo. La arquitectura del archivo expresa el raro atractivo de los asuntos supuestamente obvios. Nada más lejos de la realidad. El panorama de las últimas décadas es capaz de mostrarnos, a través de muchos de los ejemplos aquí manejados, su potencial de futuro en el territorio de la ciudad vigente. Apoyado el relato en una bibliografía intencionalmente interdisciplinar, las imágenes de esta obra deben ilustrar una política decidida de las administraciones públicas que potencie la riqueza de un repertorio de sugerentes conceptos que proyectan los archivos como espacios para ser habitados por el ciudadano de nuestros días.
Estudio realizado en conmemoración del 150 aniversario de la creación del Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos. Traza un recorrido desde la génesis y creación en el siglo XIX de este cuerpo de profesionales al servicio del patrimonio cultural, pasando por las diferentes fases de su historia y desarrollo.
Las empresas cumplen una misión esencial en la vertebración de nuestra sociedad por el impacto de sus actividades en los ámbitos económico, social y técnico. Para el cumplimiento de sus objetivos y el control de todas las actividades de su negocio, las empresas han necesitado y necesitan documentar todos los procesos que llevan a cabo. En la actualidad, los archivos de las empresas ocupan un papel importante dentro de la profesión, su acceso es demandado por los ciudadanos y los investigadores y las empresas han asumido su importancia desde los puntos de vista administrativo, legal y para la creación de una imagen corporativa ante la sociedad. Por estas razones, era necesaria la redacción de un manual de lectura y de consulta, para introducir al lector en la naturaleza y características específicas de los archivos de las empresas, ofrecer las pautas para la organización de sus documentos y responder a los interrogantes que plantean el tratamiento de las series documentales y los permisos de acceso a la información. El libro está dirigido a distintos lectores. Para el archivero profesional, esta obra es un punto de partida para el intercambio de opiniones y experiencias y el necesario contraste con las situaciones particulares; para el estudiante o el opositor, se ofrece una síntesis sobre la teoría y la práctica archivísticas dentro de las empresas. Para el investigador que se aproxima por primera vez a estos archivos, se ofrece una amplia relación de centros en los que, con seguridad, se abren numerosas expectativas de investigación en los más diversos campos. Para el gestor y el responsable de las empresas, en fin, se analizan las razones por las que un archivo es necesario y tiene su razón de existir dentro de la estructura de la entidad.