Cuando Pomelo era muy pequeño no distinguía entre lo alto y lo bajo, lo duro y lo blando, las preguntas y las respuestas, el principio y el final... El entrañable elefantito de huerto vuelve a enamorarnos con su ignorancia y, en contrapartida, con su sabiduría. No se trata de un libro más de los muchos que existen para que los niños aprendan a diferenciar los conceptos básicos. Esta historia-como todas las de Pomelo- es lo opuesto a una del montón. Es divertida, original, sutil e inteligente. En casa o en el colegio, este libro para conocer los contrarios es igual a un éxito.
Los opuestoros, como su nombre indica, son toros que se oponen. Si uno está arriba, el otro está abajo. Si uno está a la derecha, el otro aparecerá a la izquierda. Pero todo se irá complicando y encontraremos toros abrigados, toros solitarios, toros pacifistas. Un libro imprescindible para los que de verdad estiman a los toros.
¡Averigua los opuestos e invéntate un cuento! Tira de la lengüeta o gira la rueda y descubre cómo cambia la ilustración revelando un paisaje o unos objetos inesperados. Esos cambios permiten que los niños se inventen una pequeña historia que relacione ambas imágenes.