En este mundo global, las sociedades mestizas e indígenas se encuentran perdidas entre su integración en este nuevo mundo del consumismo, en el que ocupan un lugar marginal, o encerrarse en sus tradiciones y costumbres, ligadas fuertemente a la religión, para intentar mantener su personalidad independiente, aunque en ello vaya su propia destrucción. Es el eterno enfrentamiento entre lo global y lo local, con un claro vencedor final, frente a unos ideales que no llegan a visualizar la lucha desproporcionada entre los dos.
Las lecciones de Kant tienen muchas veces la virtud de iluminar aspectos oscuros, controvertidos, del corpus crítico que finalmente entregó a la imprenta, en la justa medida en que constituyen buena parte de su paciente, laboriosa y también vacilante génesis. Es el caso de las que impartió en el semestre de invierno del curso 72-73, conocidas como Antropología Collins por el nombre de su transcriptor más temprano, y que propician una cierta lectura de la compleja doctrina kantiana de las facultades, para la que es de la mayor importancia la distinción entre el análisis crítico-trascendental de sus límites y alcance, por un lado, y el estudio pragmático-antropológico, por otro, del uso que el hombre puede de hacer de ellas en el mundo, con el que tal vez desarrolle lo que en principio son tanto y a la vez tan poco meras potencialidades.
Literatura maya constituye un intento de sistematización y un análisis general de la literatura maya colonial, situada en su horizonte histórico cultural, que busca dar una visión de conjunto del afán expresivo y la sensibilidad poética del pueblo maya. El criterio básico que ha seguido este libro, de a acuerdo a su autora, ha sido contemplar no sólo la creación literaria procedente de todo el territorio maya, sino además considerar la diversidad de textos que ellos elaboraron.
La permanente pregunta «¿qué es el hombre?» acompaña al pensador filosófico, tanquam umbra, desde los primeros escarceos intelectuales en la vieja Grecia hasta nuestros días, sin que, pese a la variedad colorista de las respuestas ensayadas, pueda decirse que haya una que quepa reputar de definitiva y ni siquiera de preferente o descollante. Inquirir sobre la esencia humana es tan estéril como obligado, porque el ser pensante no se conforma con su ignorancia sobre sí mismo, por más que intuya que cualquier esfuerzo para superarla está condenado al fracaso, aunque no se identifique con el exabrupto de Sartre «la esencia del hombre es no tener esencia alguna». Por ello, un libro como el presente, El enigma humano, debe arrancar, por necesidad, de la idea de que no va a encontrar la solución, tanto porque un enigma que se resuelve no es un verdadero enigma, como porque el cometido de la filosofía no es encontrar explicación de lo inexplicable, sino a lo sumo enfrentar los problemas insolubles con la «serena desesperación» del que sabe que está hollando un terreno que no puede dominar. El filósofo está habituado a convivir con la incertidumbre, con la desesperanza y con la indefinición, quizá porque, en palabras del maestro Heidegger, «el pensar de los pensadores es un retroceder ante el ser». Adentrarse, como se hace en el libro, en las simas intelectuales del «misterio del alma», de las «trampas del pensamiento» y del «reto de los sueños» es internarse en unos mundos en los que a priori se sabe no va a hallarse respuesta válida alguna; pero, sin embargo, merece la pena hacerlo, merece la pena intentarlo de nuevo, por más que se sepa con total nitidez que, al final de la aventura filosófica, el panorama continuará teniendo la misma y natural oscuridad que lo caracteriza y resulta impenetrable. No es insensato emprender un «viaje intelectual» como el que el libro plantea, aunque sólo fuera porque el mismo es capaz de procurar al viajero unas saludables curas de humildad, de relatividad y de prudencia espirituales. Si se hace con honestidad, el contacto con el misterio siempre engrandece al hombre, por más que deba pagarse un significativo precio.
Tenemos sed y no poseemos el agua que pueda calmarla. El ser humano está abierto a un horizonte de plenitud que por sí mismo no puede saciar. Eso hace que el hombre, en palabras del autor, sea un ser desproporcionado, poseedor de un corazón inquieto, siempre insatisfecho, permanentemente abierto a ese horizonte de abundancia. Ahora bien, lo que para algunos podría ser interpretado como una maldición, para el autor se convierte en la más alta posibilidad de lo humano. De esta manera, se nos propone releer estas huellas de desproporción en nosotros como cinco auténticos preludios para la fe. Estas cinco razones para creer, que dan lugar a los distintos capítulos del libro, son el deseo, la historia, el sentido, el rostro y el exceso. El autor entrelaza teología, filosofía, literatura y cine intentando evocar en el lector la presencia ineludible del misterio. JOSÉ SERAFÍN BÉJAR BACAS (Granada, 1974) es sacerdote diocesano y doctor en teología fundamental por la Universidad Gregoriana de Roma. Actualmente es profesor de cristología, antropología teológica y método teológico en la Facultad de Teología de Granada. Autor de los libros Dios en Jesús. Ensayo de cristología y ¿Cómo hablar hoy de la resurrección?, ha escrito también artículos que abordan temas tales como la reflexión cristológica hoy, el debate sobre la posmodernidad o el quehacer teológico en la actualidad.
La experiencia de lo sagrado fue siempre el objeto esencial del interés del gran historiador de las religiones Julien Ries. Dicha experiencia se caracteriza por una serie de elementos constantes en todas las épocas y latitudes. El primero es el símbolo. Heredero de las concepciones de Carl Gustav Jung, Gaston Bachelard, Mircea Eliade, Paul Ricoeur o la actual antropología de lo imaginario, Julien Ries reconstruye en esta obra la emergencia del pensamiento simbólico en la prehistoria y nos muestra las distintas formas que el símbolo ha ido asumiendo en las religiones antiguas, en las asiáticas, en el judaísmo, en el cristianismo y en el islam, subrayando el papel determinante que ha desempeñado en las diferentes esferas de la cultura humana. Ese panorama histórico se complementa con una exposición temática y el análisis de algunos motivos simbólicos que son descritos e interpretados en toda su riqueza: el cielo, la figura humana, la montaña sagrada, la cruz, la luz o la peregrinación. De este modo, la pluma de Ries va precisando, de un modo cada vez más claro, la fisionomía del homo religiosus que, aspirando a conectar con la alteridad total de lo sagrado, se configura, en primera instancia, como un homo symbolicus.
Amplia investigación sobre la indumentaria indígena en México tanto prehispánica y colonial como la existente hasta hoy día. Abarca desde los trajes típicos usados por hombres y mujeres, hasta los utilizados por los guerreros, los sacerdotes y los gobernantes. Además, presenta estudios y análisis sobre las técnicas de tejido de estas prendas y su confección. Utiliza metodologías propias del arqueólogo, el historiador y el etnólogo. Esto confiere a esta obra su valiosa aportación, significado y valor perdurables.
La presente antología bilingüe, cuidadosamente seleccionada y prologada por Antonio Guzmán Guerra, pretende hacer accesible a cualquier lector interesado la obra de Heródoto, padre de la historia. En los textos de Heródoto no encontramos sesudas reflexiones historiográficas, ni apoyo textual o de cualquier otra índole objetiva que avale los acontecimientos que se narran no es frecuente que los padres se anden con demasiadas justificaciones, pero sí la viveza que caracteriza los relatos inaugurales, por la que, ausentes las obligaciones disciplinares, la narración se entreteje con el pensamiento, la antropología relativiza las costumbres, y a la sabiduría no le falta el mito que la ilustre. Una buena invitación para seguir leyendo y hallar en los orígenes, tal vez, alguna chispa que nos libere de nuestra muy convencional dormidera.
¿Tiene sentido hablar de nobleza hoy? ¿Acaso no vivimos en sistemas republicanos, que garantizan el derecho a ocupar posiciones en función de los méritos personales? A contrapelo de estas creencias, La nobleza de Estado, un clásico de Pierre Bourdieu que se publica por primera vez en español, revela sin concesiones el modo en que la educación consagra una 'nobleza' de nuevo tipo, poseedora de títulos académicos y de propiedad. Esa nobleza, mientras dice defender el acceso igualitario a la escuela liberadora y a las competencias técnicas que requiere el mundo del trabajo, asegura su propia exclusividad a través de férreos mecanismos de selección y de sutiles filtros que distribuyen los lugares posibles: desde el modesto docente de primaria en un pueblo de provincia hasta el funcionario de alto rango en la administración pública o privada. Revisando archivos escolares, exámenes, concursos académicos, obituarios, datos socioculturales de los estudiantes, las apreciaciones con que un profesor evalúa el trabajo escrito de un alumno, e incluso la agenda diaria de un hombre de negocios, el autor reconstruye la carrera que habilita cada tipo de escuela o universidad, y que permite a los individuos circular de un lugar a otro en línea ascendente, perderse en desvíos indeseados o, como en las mejores novelas realistas, lidiar con el fracaso de las aspiraciones personales o sucumbir. El destino de ese juego se define en diversos campos, que Bourdieu analiza con paciencia de artesano (la pertenencia familiar y el lugar de residencia, los colegios de elite y las clases preparatorias para acceder a ellos, los institutos de educación superior de mayor prestigio); en cada uno de estos espacios, los sujetos 'hacen sus apuestas' según el tipo de capital de origen de que disponen: económico, social, simbólico. Desgarrando el velo de las apariencias, tal como hizo en Los herederos y Homo academicus, Bourdieu desnuda los secretos de la magia social que asegura, por la vía de la educación, la reproducción de las jerarquías sociales. Gracias a una escritura que alterna el humor de la distancia etnográfica con la argumentación teórica, realiza el proyecto de una antropología total, capaz de superar la oposición entre la descripción que hace ver y el modelo que permite comprender.
Este volumen aborda la historia intelectual o sociológica de la Escuela Francesa de Socioantropología más allá de la cronología, subrayando la elaboración colectiva de un pensamiento, una manera de enfocar el mundo social y los hechos aplicable ayer como hoy. Una aproximación a la obra y la irradiación de autores como Durkheim, Mauss, Simiand o Halbwachs, Balandier, Gurvitch, Duvignaud o Dominique Schnapper, a creaciones como ?L?Année sociologique?, a una aventura intelectual, y a hondas repercusiones sociales y políticas que han dejado una impronta inconfundible en la Francia contemporánea. En este libro se reconstruyen los orígenes intelectuales, la génesis y el desarrollo hasta sus prolongaciones actuales, de una corriente de pensamiento e investigación social determinante en la sociología francesa y, por ende, europea.
En 1668, un grupo de jesuitas españoles, dirigidos por el burgalés Diego Luis de San Vitores (1627-1672), iniciaron la evangelización de las islas de los Ladrones (luego, islas Marianas), contando con el apoyo financiero de la Monarquía Hispánica de Felipe IV. El contacto entre los religiosos españoles y los indígenas chamorri constituye un caso especialmente relevante, ya que se trata de una evangelización tardía y violenta que tuvo lugar en los confines del imperio hispánico. En aquellas lejanas islas del Pacífico muchos misioneros jesuitas, como el padre andaluz Luis de Medina (1637-1670), se convirtieron en mártires del catolicismo tridentino.
La presente obra abrió un siglo de literatura abiertamente enemistada con el concepto de Estado. Sin ir más lejos, fue el tratado que inspiró la obra de Albert J. Nock y los trabajos de Frank Chodorov, e incluso para muchos es el cimiento teórico sobre el que Murray N. Rothbard articularía posteriormente todo su pensamiento. En efecto, Franz Oppenheimer firmó el que aún hoy sigue siendo considerado uno de los más estimulantes trabajos sobre Historia de la Filosofía Política jamás concebidos. El autor afronta la titánica tarea de desmantelar siglos y siglos de pensamiento falaz acerca del origen, la naturaleza y el fin último del Estado. Oppenheimer establece el punto de partida en los albores de la Humanidad, cuando el mundo estaba constituido por comunidades dispersas de campesinos y nómadas. Un recorrido cronológico y de carácter psicosociológico de la evolución del Estado desde sus formulaciones primitivas hasta el moderno Estado constitucional. Este detallado trabajo supone, sin duda, la réplica más certera que ha recibido jamás la teoría del «contrato social del Estado», propuesta por la mayoría de los pensadores políticos desde la Ilustración. La verdadera naturaleza del Estado no puede ser revelada mediante peregrinas justificaciones filosóficas de pensadores más o menos inspirados, sino gracias a un exhaustivo análisis, científico y desprejuiciado, de la Historia de la Humanidad. Y eso es, precisamente, lo que ofrece Oppenheimer en su obra magna.
Esta nueva edición de Antropología desde un punto de vista pragmático ofrece el texto íntegro en alemán en que se basó la serie de conferencias que diera el filósofo en la Universidad de Königsberg. En este volumen Kant desarrolla su idea filosófica de "antropología" desde un punto de vista pragmático alejado del estudio puramente fisiológico del ser humano, a la vez que ayuda a separar la naciente disciplina del carácter especulativo que la permeaba.