Jarvis Cocker como artista, pero también como personaje, desborda cualquier idea previa. Pulp es un fascinante caso de adaptación al medio, de resistencia al fracaso y de náusea ante el éxito. Richard Hawley es un músico excepcional emboscado en su imagen de gente corriente. Son vidas tan cercanas que no podía ser que no confluyeran. Cocker persiguiendo infatigable el estrellato hasta que una vez alcanzado le resulta insoportable. Hawley escapando obstinadamente de los focos hasta que el mundo le descubre entre las sombras. Indagando en sus canciones y en sus vidas, que se entrecruzan constantemente, se llega a Sheffield, la ciudad en la que nacieron y en la que viven, la que alumbra sus canciones y construye esa obra tan personal. Como dice Fernando Navarro en el prólogo: es una suerte que se escriban libros como este.