Este 'Breviario de los políticos', atribuido al muy poderoso cardenal Mazarino—regente de Francia en la niñez de Luis XIV—es un descarnado y cínico manual de comportamiento para conseguir el poder y conservarlo. Y es también sátira de un mundo en el que las virtudes que tradicionalmente habían sido ensalzadas en los políticos parecen verse sustituidas por otras nuevas, en las que la consecución de los objetivos personales eclipsa cualquier consideración de orden moral.