El azafrán, la especia más cara del mundo, se compone de los estigmas desecados de la flor de la planta Crocus sativus L. La mayor superficie de cultivo mundial de azafrán ha correspondido a España hasta fechas recientes, siendo Albacete la provincia productora más importante. Tanto la superficie cultivada como la producción de azafrán en la región castellano-manchega y toda España han registrado una continua disminución, cercano al 75% en las dos últimas décadas. Resulta paradójico que esté en peligro de desaparición el azafrán, único producto agroalimentario de esta región, y es uno de los pocos del país cuyo nombre va asociado a la máxima calidad mundial. El azafrán calidad "Mancha" (aunque desgraciadamente ya no producido en La Mancha) es sinónimo del mejor azafrán del mundo.