Filipe Bidart nos habla sobre la tortuta blanca, sobre el aislamiento, convertiendo el humor y el estado de ánimo óptimo en arma de resistencia. Bakartasunaz bi hitz es el testimonio tierno y estremecedor de los veinticinco meses que pasó en aislamiento, escrito en compañía de ratas y uniformes. Y, de pronto, estoy aquí, dentro de una celda, sin poder moverme, sin poder ir a ningún sitio, sin poder ver a nadie, sin tener nada que hacer, esperando a que el vigilante me abra la puerta, mirando, contando mis pasos, contando las horas en minutos, los minutos en segundos...