Risa y llanto son inseparables. En Auto de fe George Tabori recuerda y narra con maestría los años de su infancia y su juventud con una mezcla inseparable de tristeza e ironía, pues el libro es a su vez una combinación perfecta entre poesía y vida. Las mujeres que le acompañaron, las mentiras sinceras de su hermano, el recuerdo imborrable de su padre y un escenario centroeuropeo a punto de desaparecer se combinan en estas memorias de gran intensidad emocional y literaria.