En los últimos decenios hemos vivido un enorme desarrollo de las tecnologías, lo que nos permite una eficiencia cada vez mayor en la producción de bienes materiales de todo tipo y también en muchos servicios, como las comunicaciones y los transportes. Millones de personas han conseguido un bienestar material como nunca antes. Al mismo tiempo estamos viviendo múltiples crisis a nivel mundial: guerras muy destructivas, millones de desplazados y migraciones en masa. La población mundial se va concentrando en grandes zonas de chabolismo y miseria en la periferia de las grandes ciudades, zonas propicias para la actuación de demagogos. Estamos viviendo un fuerte ataque a los valores que mantienen la cohesión de la sociedad ¿Adónde vamos? ¿Es posible seguir avanzado de manera que toda persona de buena voluntad pueda sentirse incluida en las ventajas del progreso?