El canto y la palabra propone una nueva lectura de las primeras obras de uno de los grandes de la poesía española, Vicente Aleixandre. Este acercamiento se aborda siguiendo una doble línea complementaria: de un lado, el canto que proveniente de la naturaleza escucha o reclama el yo lírico, y, de otro, la palabra que éste se dispone a enunciar. Una voz rebelde que se abre camino para construir un mundo poético. En los libros de Aleixandre que han sido tradicionalmente considerados como surrealistas, Pasión de la tierra y Espadas como labios, o los inmediatamente posteriores, La destrucción o el amor y Mundo a solas, junto a una realidad dinámica e inestable, aparece un lenguaje igualmente sujeto a transformación en el que los términos no tienen un significado unívoco. Su estudio deja ver una poética de la ambigüedad que se extiende por toda la etapa al reflejar una visión a un tiempo emocionada y desolada de la existencia. El motivo último por el que entra en crisis el entusiasmo de tantos versos reside en la imposible ubicación del hombre en un mundo que llega a equipararse con el paraíso.
En este volumen se subraya la hechura de un volumen de poesía teniendo en cuenta la vieja distancia Madrid/Málaga. El poeta Vicente Aleixandre y Bernabé Fernández-Canivell, bibliófilo y mecenas, mantuvieron una larga amistad desde los años 30. El resultado es, a pesar de todos los inconvenientes de la época, un bello volumen de poesía de una extremada delicadeza y bellísima factura. A través de la correspondencia y fotografías, hasta ahora inéditas, se relata al detalle esta aventura editorial.
Este libro propone una nueva lectura de las primeras obras de uno de los grandes de la poesía española, Vicente Aleixandre. Este acercamiento se aborda siguiendo una doble línea complementaria: de un lado, el canto que proveniente de la naturaleza escucha o reclama el yo lírico, y, de otro, la palabra que éste se dispone a enunciar. Una voz rebelde que se abre camino para construir un mundo poético.
El número de las cartas escritas por Vicente Aleixandre (1898-1984), algunas de las cuales se habrán perdido para siempre, es incalculable. En esta edición del Centro de Estudios Andaluces y la editorial Renacimiento, el hispanista Giancarlo Depretis ofrece una selección que pertenece a la estrecha correspondencia epistolar mantenida entre Aleixandre y algunos ilustres hispanistas italianos: desde Oreste Macrì hasta Vittorio Bodini, desde Francesco Tentori Montalto hasta Dario Puccini o Gabriele Morelli. Con esta correspondencia, que va de 1951 a 1984, se puede apreciar el fuerte vínculo entre la cultura literaria española y la cultura literaria italiana del siglo XX, y tiene en todo momento, como inevitable telón de fondo, el proceso creativo seguido en esos años por el propio poeta, desde Mundo a solas (1950) hasta sus perspectivistas Diálogos del conocimiento (1974). Este epistolario italiano, entre otras muchas novedades, muestra el modo apasionado con que el poeta busca abrir su mundo poético, rico y complejo y siempre fascinante, para dar respuesta, orientar y asistir a los estudiosos y fieles traductores de su poesía a una lengua hermosa y fraterna como la italiana.