HABLANDO DE LEYENDAS recupera poemas de más de 33 autores de las Islas Británicas cuyo denominador común es haber combatido en España contra el fascismo durante la Guerra Civil Española integrados en las legendarias Brigadas Internacionales.
Este libro cubre una etapa crucial de la historia de Europa: las dos revoluciones que estallaron en Inglaterra en 1638 y 1688. Las revoluciones inglesas del siglo XVII tuvieron un impacto similar a la Revolución francesa de 1789 y a la Revolución rusa de 1917. Todas acabaron con sus dinastías reinantes en esos momentos, pero la primera Revolución inglesa fue la que llevó por primera vez al patíbulo al mismísimo monarca, Carlos I Estuardo, acusado de traidor por el Parlamento inglés y ejecutado públicamente en 1649. La muerte del rey dio paso al único periodo republicano en la milenaria historia de Inglaterra, una etapa dominada por la inmensa y controvertida figura de Oliver Cromwell, el único que fue capaz de controlar al ejército victorioso de la guerra civil. Este libro analiza de manera clara y sencilla los años revolucionarios, que marcaron para siempre la relación entre la Monarquía británica y el Parlamento. Lo hace teniendo en cuenta otros aspectos tradicionalmente poco tratados en las historias del periodo, como son la importancia de Escocia e Irlanda y de las relaciones internacionales. Las revoluciones inglesas del siglo XVII resultan cruciales para entender el determinante influjo político, económico y cultural del mundo anglosajón en nuestros días.
En esta extensa y bien ilustrada historia de las Islas Británicas, desde los tiempos prerromanos hasta el siglo XX, Hugh Kearney intenta demostrar que la historia de Inglaterra, si bien de gran importancia, es sólo un componente de una historia de mayor envergadura, una historia de cuatro naciones. Por ejemplo, la emigración en el desarrollo histórico de Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Estados Unidos provenía de las Islas Británicas en su totalidad, no solamente de Inglaterra. El profesor Kearney mantiene que no tener en cuenta esta dimensión de más alcance puede deformar nuestra visión del pasado y obstaculizar nuestra comprensión del presente.