Charly Marlow, enigmático y escurridizo personaje, personifica las experiencias de Conrad como marino y viajero. Las cuatro narraciones, estrictamente independientes, que por primera vez se agrupan aquí: JUVENTUD, EL CORAZÓN DE LAS TINIEBLAS, LORD JIM y AZAR, tienen como nexo de unión a Charly Marlow.En las cuatro narraciones Marlow canaliza las experiencias que Conrad vivió en persona u oyó contar a lo lardo de su vida en el mar: "Juvetud" relata el que fuera su primer viaje a Oriente y aborda la forja de su carácter en la adversidad; en "El corazón de las tinieblas" entra en la madurez de la mano del espanto; en "Lord Jim", Marlow se enzarza en un exfuerzo extenuante por mitigar la mala suerte que persigue al jove Jim y redimir la culta que lo atenaza, y en "Azar", Marlow sondea oscuridades siniestras y culpas atroces.Esta obra incluye un prólogo de uno de los más reconocidos traductores y estudiosos españoles de la obra de Conrad, Miguel MartínezLage.Reseñas: www.hislibris.com/?p=#682
Joseph Conrad (1857-1924) nació en la actual Ucrania y fue educado en la Polonia ocupada por Rusia. Quedó huérfano en la infancia y fue educado por un tío suyo. A los diecisiete años abandonó los estudios para alistarse en la marina francesa, y en 1878 pasó a servir en un barco británico para evitar el servicio militar ruso. Hasta los veintiún años no aprendió inglés, lengua en la que escribiría todas sus obras. Tras varios intentos consiguió superar el examen de capitán de barco y finalmente obtuvo la nacionalidad británica en 1884. Puso por primera vez pie en Inglaterra en el puerto de Lowestoft, Suffolk, y vivió en Londres y posteriormente cerca de Cambridge. Entre sus obras más celebradas cabe destacar La locura deAhnayer (1895), El negro del Narciso (1897), Lord Jim (1900), Nostromo (1904), La línea de sombra (1917) o La flecha de oro (1919).
Como narrador, Joseph Conrad sintió la necesidad de transmitir toda la poesía de un mundo que se desvanecía, el mundo de la navegación clásica, de los veleros y la aventura, de las últimas grandes exploraciones, del color local que podía hallarse en aquellos rincones donde no había llegado ningún explorador blanco a «fisgar»; y todo esto quiso hacerlo sin ocultar que ese mundo, todo el mundo, era brutal y despiadado, que estaba sometido a las le yes inflexibles del mercado, al prosaísmo del rendimiento del capital, a la arbitrariedad despótica de los poderes locales y los imperios. De este conflicto nace una de las re flexiones más ricas sobre la condición humana, sobre sus límites y aspiraciones. En los tres relatos que se reúnen en este libro (Juventud, El corazón de las tinieblas, En las últimas) el autor quiso recoger parte de estas experiencias. Propone el novelista al lector una curiosa alegoría sobre las tres edades del hombre: la juventud, la madurez, y la vejez. El corazón de las tinieblas, eje en torno al que gira lo más significativo de estas experiencias, habla al lector de la oscuridad que rodea al individuo, pero le habla también de la oscuridad que anida en su propio corazón.
Desde muy joven, Joseph Conrad se sintió atraído por el continente africano y por las aventuras que, supuestamente, aguardaban a aquellos que tuvieran el valor de adentrarse en la espesura de la jungla. El contacto con la realidad del Congo, colonia personal del rey Leopoldo II de Bélgica, cambió, sin embargo, la situación radicalmente. El sistema esclavista, el estado de terror, barbarie y genocidio instaurado por los representantes del rey belga para asegurar la supervivencia del sistema de control de unos pocos europeos sobre millones de africanos, le supuso no solo experimentar una decepción de sus ilusiones infantiles, sino un serio revés en su salud física y psíquica. Esta experiencia africana marcó fuertemente la composición de " El corazón de las tinieblas " . Desentrañar la complejidad de esta novela, con un estilo narrativo innovador para su época y una temática claramente ambigua, ha sido objeto y tarea de numerosas propuestas que la han convertido en piedra de toque de algunas de las teorías literarias más destacas de las segunda mitad del siglo XX: desde el " New Criticism " y moralismo formal, a las teorías psicoanalíticas, el feminismo, el postestructuralismo o postcolonialismo, entre otras, en las que, a menudo, se recurre al motivo del viaje; una alegoría mítica con una recreación indirecta del mito del viaje a los infiernos, con una confrontación ética entre el bien y el mal, o con una ascensión espiritual al conocimiento trascendente.