Es lamentable el desconocimiento y la confusión que hoy se vive en el mundo cristiano. La música por ejemplo, ha sido tomada como algo amoral y neutral. Se han emitido veredictos como que Dios ama todos los estilos musicales porque los inventó, y que lo importante es la letra. Muchos no lo saben pero, al adorar, ofrecen fuego extraño. ¿Será usted uno de ellos? Es mi oración que a través de estas páginas pueda alcanzar un mayor entendimiento sobre el asunto en cuestión, y sea capaz de tomar las decisiones pertinentes en cada caso.