La iurisprudentia es el arte de ser “prudente en el Derecho” y por tanto, es el oficio principal de un jurista en su búsqueda por la Iustitia, la “constante y perpetua voluntad de dar a cada uno su derecho”. No podemos obviar que el Derecho es un producto histórico, lo que hace que una cuestión cardinal en la formación de todo profesional jurídico sea el estudio y la investigación del Derecho Romano. Con seguridad podemos afirmar que todavía se erigen como modelo para la formación de los futuros juristas, hoy estudiantes, los razonamientos y reglas, de técnica sencilla pero de gran claridad y precisión, que los jurisconsultos romanos ofrecieron a los problemas más diversos, y que ofrecemos en el presente libro. Pretendemos en esta obra enfrentar al alumnado a controversias jurídicas reales que se originaron en época romana y que nos han llegado a través de las diferentes fuentes histórico-jurídicas, principalmente a través del Digesto. Con esto, los futuros juristas aprenden y se forman con el mismo método casuístico que era propio de los jurisconsultos clásicos romanos, en su actividad de respondere, a través de la utilización de conceptos lógicos y reglas, un correcto uso de la técnica de argumentación y lógica jurídica y una aplicación certera del derecho y las leyes romanas. Estudiaremos aquí los cuatro contratos consensuales (compraventa, arrendamiento, mandato y sociedad) y reales (mutuo, comodato, depósito y prenda), según la clasificación de Gayo, así como los cuasicontratos (pago de lo indebido y gestión de negocios ajenos), por ser los de mayor trascendencia en nuestro Derecho Civil. En cada uno de estos contratos y cuasicontratos, tras explicar su esencia romana, se hará una referencia a la actual regulación jurídica de los mismos, para que el estudiante pueda comprobar de propia mano la recepción del Derecho Romano en nuestro Código Civil. De la misma forma, acompañará a cada institución unos casos prácticos extraídos directamente del Digesto de Justiniano, así como un breve compendio de fuentes jurídicas romanas, que se presentan en latín y castellano.