La educación de los hijos pasa principalmente por la comprensión de su problemática particular y por saber cómo ayudarles a tomar conciencia de sí mismos, de los demás y de su entorno. Las propuestas que presenta la autora están pensadas para hacer que el niño sepa que es valorado, respetado, amado y aceptado incondicionalmente, lo que mejorará su autoestima y la adecuada percepción de sí mismo, además de aumentar su capacidad de comunicación.