Con tan sólo tres años, Maki afronta heroicamente una rara y agresiva enfermedad que sorprende a toda la familia, llevándola a superar seis duras operaciones en el corto espacio de ocho meses. La Encefalitis de Rasmussen obliga a los médicos a extirparle todo su hemosferio cerebral derecho para salvarle la vida. Su madre nos cuenta cómo lo vivió ella. Una verdadera historia de fe, esperanza y oración, que lleva a Maki y a su familia, a vivir un auténtico milagro.