Así y no de otro modo, antecediendo mi petición del perdón si hay alguien agredido o se siente así, no es mi intención el malestar de otro, sino poner mi obra a buen recaudo ... Tal era mi ajuste a mi vocación escribiendo y esta vez y el sí definitivo a editorial ilustrada no por mi sino, por el trabajo en el que está contribuyendo si bien por haber sido yo el autor un hombre meditabundo desde edad bien temprana hasta la conciencia expresada en el lenguaje. Gracias a la editora doña Sylvia Martínez, su gran editorial que no cualquier editor confió en mi trayectoria porque recorrí bastantes editoriales allá por los años 80, no sin haber un recaudo sin propio de los señores editores, sino la persona que me ha dejado editar y de apoyarme, la quedo agradecidísimo por siempre jamás a ella y la editorial Éride ediciones".