Una nevada en Roma en pleno mes de agosto, un signo de la proximidad de María. Y la historia empieza así: 'La historia de Nuestra Señora de las Nieves es la historia de una nevada. Una nevada que, de manera milagrosa, cayó en pleno mes de agosto en Roma. Y no solo esto: la historia de Nuestra Señora de las Nieves también es la historia de un descubrimiento. El descubrimiento del papel excepcional que María tuvo en la venida al mundo del Hijo de Dios. El descubrimiento de que aquella muchacha de Nazaret es la Madre de Dios.'