Como bien se expone en la definición el primer caso a seguir es descartar una falsa asma de difícil control. La mayoría de pacientes con este mal control de síntomas se produce por causas ajenas a la propia enfermedad, el diagnóstico de asma no es correcto, el paciente tiene además otras enfermedades con síntomas parecidos que crean confusión, existen factores agravantes no controlados, o el paciente no cumple adecuadamente con el tratamiento. Por ello, lo primero que debe hacerse es descartar este tipo de problemas, englobados bajo el término de falsa ACD.