Los años 50 constituyen la época más desconocida de la historia reciente de España. Entre los terribles años 40 de la posguerra y los cambios que trajeron los 60. Manuel Espín acude al rescate de esos tiempos en La España resignada (1952-1960). Una década desconocida, para devolvernos la imagen de un país que quiere dejar atrás los terribles recuerdos de la guerra y la posguerra para empezar a mirar hacia el futuro con esperanza. Los 50 verán la llegada de los estadounidenses, con sus bases, costumbres exóticas, objetos de consumo y fascinantes iconos cinematográficos y musicales. También serán testigos del nacimiento de la televisión en 1956, y de los años dorados de la radio. Así cómo de nuestras estrellas locales, de Bobby Deglané a Sara Montiel hasta Di Stefano y Kubala, pasando por Joselito, Antonio Molina o el Dúo Dinámico. Aunque el país sigue instalado en una autarquía alejada de la prosperidad, en 1959, se va a producir el doloroso, pero inevitable, Plan de Estabilización. Mientras, las costumbres y la moralidad pública se rigen por una omnipresente y estricta catolicidad, con pocas concesiones a la libertad personal y colectiva, bajo criterios de 'doble moral'. Ningún aspecto relevante de la vida española escapa a la aguda mirada del autor. Además, recrea pequeñas historias de personajes ficticios inspirados en la realidad, en un singular ejercicio de fusión de géneros. Y dedica especial atención al papel de unas mujeres que casi eran invisibles.