El principal problema que tenemos en la Iglesia a propósito de la familia no es el pequeño número de los divorciados recasados que desean acercarse a la comunión eucarística. El problema más grave que tenemos es el gran número de bautizados que se casan civilmente y el gran número de bautizados y casados sacramentalmente que no viven su matrimonio ni su vida matrimonial de acuerdo con la vida cristiana y las enseñanzas de la Iglesia, como iconos vivientes del amor de Cristo a su Iglesia presente y actuante en el mundo [
]. Es posible que la lectura de este pequeño libro no le resulte fácil a algunas personas. Los sacerdotes y los educadores cristianos harán bien en leerlo despacio y ponderar bien todo lo que contiene. En él, el cardenal Müller nos da ideas y sugerencias para repensar con hondura y serenidad estas cuestiones dentro de la tradición y de la comunión de la Iglesia. Con ello nos hace un gran servicio». [De la «Presentación» de Don Fernando Sebastián, Cardenal, Arzobispo emérito de Pamplona y Obispo emérito de Tudela].